Leonie Grace: La Cazadora De Fantasmas./Anthony Lockwood.

La mujer triste y La casa en llamas.

No estábamos listos.
Resulta que en esta casa hubo dos horribles muertes.
La señora Hope no nos aviso sobre esto.
La melodía de esta mujer me esta dejando sorda.
Es como si el villano nos contara su historia de amor.
Un amor que siempre culmina en muerte.
Su aura esta rodeada de una gran tristeza .

-¡Aguanta Lucy! ¡No te sueltes!- le grito mientras subo las escaleras.
-¡Te juro que si me vuelves a tirar por las escaleras voy a agotar mis reservas de plata en ti!- le grito al la mujer fantasma.
Si la mayoría de las mujeres son temperamentales.
Las mujeres fantasma lo son mas.
Me dirijo hacia Lucy.
-¡Lockwood!- exclama ella.
-Lucy resiste- contesta el mientras hace una maniobra impresionante con la espada.
-¡Leo, mi pie se atoro!-me ve con desesperación.
Anthony con su espada en la mano evita que el fantasma se acerque a nosotras.
Me acerco a Lucy con rapidez.
La tomo de su mano libre justo antes que se cayera el cuadro del que se sostenía.
-Te tengo- suspiro con alivio y comienzo a subirla.
El fantasma se fue, por el momento.
Anthony se acerca a nosotras.
-Lucy- la mira- Leo, ¿están bien? Si alguna no se siente bien tenemos que irnos-
-No, esta bien, puedo seguir- contesta Lucy.
-continuemos, no es la primera vez que caigo por una escalera, además ya estamos aquí.
Lucy comienza a hablar con Anthony.
No escucho muy bien lo que dice.
Cierro los ojos, el sonido es tan fuerte.
Suéltame.
La voz de la mujer pide.
Me levanto siguiendo el sonido de sus lamentos.
Entro a la habitación del final del pasillo.
Ella me guía aquí, quiere que encuentre algo.
Pasamos de jugar al gato y el ratón a buscar el tesoro, supongo que hace mucho no se divertía.
Toco con la punta de los dedos la pared frente a mi.
Y la música suena, hace eco en mi cabeza.
-Se desvaneció antes de tocar la pared, pero eso intentaba-llega Anthony colocándose a mi lado.
-Una chimenea, el cuerpo debe de estar ahí- habla Lucy colocándose al otro lado.
-Lo esta, ella nos guio hasta aquí, quiere que la encontremos-hablo después de un momento.
-¿lo escuchaste, cierto?-me pregunta Lucy.
-¿Hablas del Suéltame y su gritos?- digo mientras volteo a verla-claro que los escuche eran tan fuertes, eso fue lo que me trajo a este cuarto-
-Leonie-habla Anthony.
Lo veo.
Acerca su mano a mi cara.
Con cuidado pasa unos mechones de cabello detrás de mi oreja.
-¿Estas bien?, te están sangrando los oídos- explica el.
Muestra su mano que tiene un rastro de sangre.
-Oh, estoy bien- le miro- hace tiempo que no pasaba, tendré que usar tapones de oído otra vez-veo a Lucy que tenia una expresión de preocupación- tranquilos, ya encontramos la fuente, hay que terminar con esto-.
Lucy asiente y Anthony solo me observa.
-Iré por el equipo antes de que el fantasma regrese- habla Lucy saliendo rápido por la puerta.
-Leo, ahora eres parte de el equipo, si se te sientes mal no dudes en decírmelo- dice Anthony.
-Gracias, y que sea reciproco, si te sientes mal y no tienes con quien hablar puedes buscarme-le sonrió- no debe ser fácil se el jefe-
Lucy entra por la puerta.
-Leo ayúdame a colocar el circulo de protección-  habla ella entregando me una maleta.
-¿Aquí están las cadenas?- Tomo la maleta.
-Eh…-
-No a Lockwood se le olvidaron- acusa Lucy.
-Mentira, en realidad se le olvidaron a George- alega Anthony-.
Respira Leonie, respira.
-¿Cómo pudieron olvidar las cadenas?, ¿no es cucharon que la plata es la mejor amiga de los agentes en la noche?, saben que ya no importa, solo terminemos con esto- les digo.
Cada uno toma una maletas y se prepara por si el fantasma regresa, Lucy y yo colocamos el circulo de protección.
Tomamos unas herramientas que había en la casa y comenzamos a golpear la pared.
-Esto es tan relajante- menciono mientras golpeo la pared.
-Lockwood cuidado, rompiste el circulo- se inca y trata de componerlo.
-Ups-
Volteo hacia Lucy para ayudarla cuando veo una luz creciendo en la esquina de el techo cerca de la puerta.
-ya volvió- nos informa Lucy. Todas las puertas se azotan a la par.
-Aburrido, ya habías hecho eso, intenta algo nuevo ¿te atreves?- reta Anthony al fantasma.
-No la incites Lockwood, esta enojada- me responde Lu.
-Yo también estoy enojada y no voy por ahí matando personas-
Vuelvo a ayudar a Anthony a  golpear la pared.
Escucho como Lu desenvaina su espada.
-Chicos- apura ella.
-Ya casi Lucy, solo un golpe mas-le digo.
-Listo- Anthony jala un pedazo de ladrillo suelto.
Parte de la pared se cae y nosotros también en el proceso.
Caigo sentada al contrario de los otros dos.
La fantasma flota sobre nosotros.
Anthony se vuelve su objetivo.
Comienza a acercarse a su cara.
-¡Lockwood!-Grita Lucy.
Toma algo de si cinturón y lo lanza hacia el fantasma.
En ese momento es cuando reacciono lo tomo de los pies y lo jalo hacia mi.
Puedo ver como salen chispas de el fantasma y todo en la habitación comienza a incendiarse.
Nos ponemos de pie.
-Es ella- Lucy señala el cadáver en la pared.
Ellos pueden encargarse de eso.
Me acerco a al fuego para intentar apagarlo.
No podemos dejar que la casa se incendie.
Pero no importa es demasiado tarde no lo podremos apagar.
-El cuerpo es la fuente, la distraeré, ponle la red de plata- le indica Anthony a Lucy.
Me acerco con mi espada en mano dispuesta a ayudar a Anthony.
-En otras palabras, el plan F- dice el con seguridad.
-Ese no es el plan F- le aclaro.
-digo plan B- titubea.
-Plan B es bombas de sal, el fantasma es demasiado fuerte para eso- contesta Lucy.
-Nosotros la distraemos y tu contienes la fuente- dice Anthony viéndome.
-Eso ni siquiera es un plan- reclama Lu.
-Cuando esto acabe hay que cambiar este sistema de letras-
-Habla por ti-.
Anthony y yo nos acercamos a la fantasma con las espadas en mano.
Yo esquivaba y el atacaba.
Luego fue al revés.
La teníamos acorralada.
El fuego se expandía.
La mujer cambio de objetivo.
-Lucy detrás de ti- Anthony exclamó.
Lu coloca la red sobre el cuerpo y el fantasma se desvanece.
-Lucy rápido-
Anthony abre la ventana.
-Leonie sal tu primero- dice el mientras observa a Lucy.
-No, voy por ella- corro atreves del fuego.
Tiene algo en la mano que no logro distinguir.
Sostengo a Lucy del brazo y la jalo hacia la ventana.
Anthony me ve serio.
Salgo por la ventana y ellos me siguen.
Estamos en un pequeño balcón sin salida aparente.
Se empiezan a subir por la barandilla y los imito.
El fuego se acerca, los sonidos se nublan a mi alrededor.
El calor se acerca a nosotros.
No puedo parar de ver hacia abajo.
Siento que alguien toca mi mano.
-Tenemos que saltar- me avisa Anthony.
Cierro los ojos.
Esto no puede estar pasando, no otra vez.
-¿Es mal momento para decir que tengo miedo a las alturas o mas bien a caer de un lugar muy alto?- los veo.
Lucy toma mi otra mano.
Suena la madera crepitar a nuestras espaldas.
-A la cuenta de tres ¿listas?- Las dos negamos con la cabeza- uno, dos, ¡tres!-
Y saltamos.



Desperté en un lugar negro, donde no había sombras y desde un extraño horizonte una luz comenzó a crecer.
-Hola Leo- dice una voz calma, haciendo eco en mi cabeza.
-Ya no me recuerdas- ríe.
Suena tan familiar y a la vez me es tan difícil reconocer quien habla.
-Te entrene, ayude, fuiste mi familia- a lo lejos se ve una sombra que se acerca.
-¿Señora Ross? ¿En serio es usted?-
Esto no puede estar pasando.
Ella esta muerta.
-Claro que soy yo, que pregunta tan tonta- su figura se hace mas clara.
-¿Por qué esta aquí? Esta muerta, te fuiste sin despedirte ¡me dejaste!- mis ojos se nublan por las lagrimas que se avecinan.
-No estas haciendo las preguntas correctas y yo no te deje, no ves, aquí estoy contigo- se para frente a mi.
-Esto no puede ser real- niego.
-ya habíamos hablado de eso, todo puede ser real hasta que se demuestre lo contrario,¿ ya olvidaste todo lo que te enseñe?- reclama.
-No, por supuesto que no he olvidado, no podría-
-No se si creerte- frunzo el seño- olvidaste las cadenas de plats, usaron fuego griego dentro de la casa, no aseguraste las escaleras ni buscaste la ruta de escape para cualquier emergencia, es una suerte que los tres salieran vivos- reprende.
-Lo siento- bajo la cabeza.
-No te disculpes conmigo niña tonta, ya estoy muerta, nada peor puede pasarme, pero tu… te queda mucho camino que recorrer, no entrenaste conmigo 5 años para nada- lagrimas caen por mi rostro.
-la música es mas fuerte desde que te fuiste, ya no puedo controlarlo, y mis compañero son tan buenos que no quiero causarles daño, no como lo hice contigo y con Emma-
- No puedes seguir culpándote Leo, yo tome mi decisión y nunca me voy arrepentir de que tu vivas, y sobre Emma, tienes que dejarla ir, no sabias lo que iba a pasar- me acaricia el rostro- no pude despedirme de ti en vida, así que lo hago ahora, se avecinan cosas grandes y peligrosas, esos amigos que hiciste, son buenos chicos, no los alejes y ayuda a esa niña Lucy, son mas parecidas de lo que crees- me besa la cabeza.
-Es tiempo de que me vaya, no debí de cruzar- dice intranquila.
-¡No te vayas! No otra vez, aun hay muchas que te quiero decir-.
-Créeme Leo cuando te digo que siempre voy a estar junto a ti  aunque no pueda contestar, yo te entrene para esto y  no gasto mi tiempo en cualquiera, haz pasado por tanto ¿Te rendirás ahora?-
-Claro que no- le digo entre lagrimas- gracias, por lo sea que hayas hecho para estar aquí conmigo- le sonrió.
-Antes de que me vaya, ese chico Lockwood, es guapo ¿no?- ríe.
Niego divertida.
-Ni estando muerta desistes de conseguirme novio-.
La abrazo.
-Adiós Leo-
-Hasta que nos volvamos a ver señora Ross-.