Serie de los CP 16 - El Despertar de Niel

Capítulo 4

Niel cometió el gran error de correr. El león en el interior de Minsoo sintió alegría por poder perseguir finalmente a su compañero, y no para reclamar alguna baratija vieja o una moneda, sino para que, finalmente, el mocoso supiera a quién pertenecía.

Está bien, quizás el giro de 180 grados en su forma pensar sobre Niel era confuso. Infiernos, Minsoo seguía teniendo problemas para envolver su mente alrededor de eso, y era que tenía miles de sentimientos. Lo único que sabía con certeza era que su compañero llevaba el olor de otro felino macho sobre él, y eso no le gustaba ni un poquito.

Minsoo lanzó un rugido de triunfo cuando vio a Niel esconderse en la cafetería. Sabía por experiencia personal que el lado sur de las puertas de esa habitación estaba cerrado con llave por la noche. ¡Ja! Ahora no había forma de que el halcón pudiera escaparse, no a menos que cambiara de forma. La experiencia del pasado, le dijo a Minsoo que sería la opción menos probable que Niel elegiría.

Tal vez era uno de esos cambiaformas a los que no les gustaba afrontar que tenían ese aspecto animal en ellos. O tal vez todavía no había aprendido a controlar sus cambios. Infiernos, podía ser que el niño no supiera cómo hacerlo sin que fuera doloroso. Nada de eso importaba ahora. Minsoo tenía toda la intención de encontrar la respuesta para poder ayudar a Niel a superarlo, pero ahora había cuestiones más importantes a mano. Como conseguir que el hedor de ese maldito puma saliera de su halcón.

Minsoo se sorprendió al encontrar la cafetería muy concurrida, sobre todo por los amigos de Niel. Todos ellos parecían pensar que la situación era divertida. Sin duda, porque todos asumieron que era otro de los habituales juegos de Niel.

«¡Oh, si tan sólo supieran la verdadera razón por la que lo estaba persiguiendo! Probablemente se quedarían tan sorprendidos que los dejaría sin habla por primera vez en sus malditas vidas.»

Desafortunadamente, no sabía que todos eran demasiado vocales. Algunos de ellos incluso yendo tan lejos como para ofrecerle a Niel algunos consejos.

—Cuidado, que te va a arrinconar si vas por ese camino — advirtió Donghyun.

Niel giró inmediatamente hacia la izquierda, obligando a Minsoo a detenerse antes de que siguiera hasta una fila de mesas. Dejando escapar un rugido, Minsoo cambió de dirección y comenzó la caza de nuevo.

—Cuidado con la araña. Viaja contigo —gritó Kun.

—Amo todas tus locuras, Kun, pero este realmente no es el momento —jadeó Niel.

—¿Qué demonios le has robado esta vez? —preguntó Yunhyuk.

—Nada, te lo juro. Pregúntale a Donghyun, finalmente me di por vencido.

Niel corría alrededor de una mesa grande y redonda, su respiración salía dificultosa y forzada.

—¡Oh, no! No seguiste adelante con tu amenaza de mover los muebles de Minsoo, ¿verdad? —preguntó Donghyun.

—Niel, eso no es muy agradable —advirtió Kun—. Tal vez necesitas hablar con el doctor Yoongi acerca de tus habilidades en el manejo de la ira.

Incluso Minsoo hizo una pausa en estado de shock ante la sugerencia. Niel no tenía problemas con la ira en absoluto. De hecho, era uno de los cambiaformas más dulces de la coalición.

Yunhyuk dio un manotazo juguetón a Kun. —Te has confundido de nuevo con Donghyun. Se podría pensar que desde que viviste con Niel durante años, al menos acertarías.

—Oh sí, eso es correcto. —La sonrisa juguetona en el rostro de Kun le dijo que lo había sabido todo el tiempo. Probablemente lo hizo para devolverle el golpe por su comentario sobre la araña.