Hospitalizado.

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Mitsuki se levantó no por los rayos de sol, sino por una enfermera que venía a darle su desayuno.

—Buenos días Mitsuki-kun.—Saludóbla enfermera entrada con una bandeja.—

Mitsuki algo somnoliento asintió con la cabeza acomodándose en la camilla mientras ella le daba su mini mesa donde tendría que apoyar su desayuno.

Vió su desayuno y podría jurar que era una cantidad enorme, le dieron té con unas cuantas galletas al igual que un jugó de naranja y tostados con mermelada.

Tragó en seco al verlo, vió a la enfermera que mantenía una cara tranquila al igual que una sonrisa.

—Disfrutalo Mitsuki-kun, volveré más tarde para llevarme la bandeja.—Habló la enfermera saliendo de la habitación.—

Mitsuki pensó que la enferma se quedaría con él, dejo el desayuno de lado para ir al baño y acearse.

Se cepillo los dientes al igual que su cabello, ignorando la gran perdida de cabello que tenía al peinarse.

Se mantuvo pensativo ¿Qué deberi hacer lo que le dieron? ¿Tirarlo o comerlo? Si lo llegaba a comer lo vomitaria.

Optó por esa opción, al menos verán que "si se comió todo" tomó asiento otra vez en la camilla y procedió a comer si desayuno.

Desayuno que era delicioso a su paladar pero su conciencia decía lo contrario.

Cada mordisco que daba más quería devolverlo, su mente le jugaba mal y tan solo pensaba que engordará si sigue comiendo al igual que veía la calorías de los alimentos.

Tardo una hora en poder comer, tan solo pudo terminar la mitad de una tostada y el té, después de eso lo devolvió y se deshacío de los demás.

Se recostó en la camilla viendo el techo, no sabía que hacer, tomo su celular y empezó a recibir las redes.

Pasaron unas cuantas horas, estando aún más aburrido procedió a dormir aunque fue interrupido por la enfermera que venía con el almuerzo.

—Al parecer comiste todo.—Dijo la enferma recogiendo la bandeja del desayuno y dejando del almuerzo.— Provecho.

La enferma de retiro de la habitación dejando a un Mitsuki con la mirada asqueada, viendo la bandeja.

Sopa y un vaso de agua, de postre una gelatina, la gelatina la podría comer había leído de que si comes gelatina sacea el hambre al igual que no engorda, pero la sopa no podría de tan solo olerla le daba náuseas.

Debía desaherce de ella, podía comerla pero el sabor de vomitarlo es uno horrible que le disguta.

Pensando no se dió cuenta de la precisión que se dirigía a él.

—¡Hola Mitsu'ttebasa!—Dijo con alegría Boruto dándole un susto a Mitsuki.—

—B-boru ¡Boruto no asustes así!—Regaño Mitsuki para luego sonreír.— ¿Qué hacés aquí?

—¿No es obvio? Vengo a visitar a mi hermoso novio que por cierto ¿Cómo estás?—Pregunto Boruto tomando una banca y poniéndola al lado de la camilla de su pareja.—

—Bien, ahora mismo iba almorzar ¿Y tú?—Dijo Mitsuki tratando de ocultar su sonrojó por el halago de Boruto.—

—Mejor ya que ví el sol de mis mañanas.—Halago Boruto tomando la mano de Mitsuki.—

—Pareces como si me diras algo importante.—Dijo Mitsuki en broma pero al ver cómo Boruto forzanba una sonrisa concluyó que acertó.—

—Pues...no quería decirlo pero parece que sone bastante sospechoso.—Suspiro Boruto.— No quería preguntarte ni nada de eso, apena te encuentres en recuperación.

I Don't Have 𝗛𝘂𝗻𝗴𝗿𝘆  [MitsuBoru/BoruMitsu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora