CAPÍTULO 4
No sé por cuánto tiempo dormí y mucho menos cuando lo hice, puedo sentir un dolor fuerte en mis caderas y parte de la espalda, al quitarme la sabana puedo ver que solo estoy en ropa interior y una camiseta que de seguro es de Mijaíl.
Me levanté y fui directo al baño para asearme, abrí el closet encontrándome un vestido blanco y unas zapatillas rojas que el lunático del ruso dejó para mí. Anoche después de bañarme, Mijail abandonó la habitación dejándome completamente sola y no sé por cuánto tiempo más estaré en la misma situación.
Al tratar de abrir la puerta para salir de la habitación, me doy cuenta de que esta se encuentra con llave, al parecer el mafioso no es tan idiota para dejarme sin seguro y menos con lo que le dije anoche.
Trato de forzar la puerta, pero no cede—¡Mijail, sácame de aquí! — grité con todas mis fuerzas, pero nadie me escuchaba, la cólera se apoderó de mi pequeño cuerpo haciéndome estallar, tomé una silla y esta se parte en pedazos sobre la puerta cuando busqué la forma de quebrarla, pero sigo en las mismas, la manera no cede.
Mis manos me duelen por la presión que hago, grito, gimo, peleo, pero Mijaíl parece no escucharme o al menos que él no se encuentre en aquel lugar.
A mi mente llega la idea de que es el mejor momento para escapar, busco como loca por toda la habitación algo para poder forzar la cerradura de la puerta. Las horas viendo C.S.I tendrían que servir para algo, esculco entre los cajones, pero no encuentro nada, hasta que me percato de una caja de pasadores dentro de una bolsa plástica.
Trato de recordar todas las veces que vi en películas la forma en que colocaban el pasador para abrir la cerradura, pasan diez minutos y era frustrante pensar que era mentira lo que veía en la televisión, así que decidí no rendirme, porque una oportunidad como esta no tendría dos veces, hasta que lo logré.
—¡SÍ! —grité de la alegría, tapándome la boca de golpe por si acaso alguien me había escuchado. Con mis manos temblorosas giro la perilla de la puerta, me sorprendo al no escuchar nada en aquel lugar, mi cuerpo comienza a temblar por la adrenalina.
Veo que estoy en una especie de bodega llena de bolsas plásticas, como si fuese un depósito reciclable, voy a paso lento para no ser descubierta.
Mis ojos se agrandan al ver una habitación, giro la perilla y está abierta, doy la gloria a cualquier dios que me esté escuchando en ese momento, me alegro al ver que ese lugar es un tipo de oficina—¡Bingo! — digo mirando un teléfono sobre una mesa, corro desesperadamente hacia el, lo coloco en mi oído y suena la bocina claramente. Comienzo a marcar el número de mi casa.
—Tres, nueve, seis, cinco...—repito.
Suena, uno, dos...
—¡¿Bueno?!—la voz de mi madre se escucha agitada. Comienzo a llorar.
—¡Mamá! ¡oh mamá soy yo! —mi voz se quiebra.
—Victoria de por Dios, ¿Dónde estás? —escucho al fondo a mi padre tratando de quitarle el teléfono.
—Hija, ¿Dónde estás? —esta vez es mi papá.
—¡Papá, ¡no sé...! ¡yo...! ¡no sé! —escucho las maldiciones de mi padre.
—Victoria, ¿me escuchas?
Pregunta mamá llorando con fuerza.
—Mamá, un hombre llamado Mijaíl Volkov me secuestró, él.... Me tiene retenida en un lugar que desconozco, se ve como una bodega mamá... ¡sáquenme de aquí!
—Gilberto, la niña—escucho a mi madre llorar.
—Te sacaremos de allí hija, te lo prometo—dice mi padre entre llanto.
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MIJAIL VOLKOV (+21) Terminada ✔️✔️
ChickLitMijail siendo un mafioso secuestró a Victoria Jones, ella logró huir de él, pero su vida ya estaba marcada por todo lo que tuvo que vivir mientras estaba bajo su poder. Tiempo después Mijail se ha dispuesto a recuperar a su mujer, a la única chica q...