San Valentín~ El día de los enamorados, el día de confecciones y se forman parejas, y de soldados caídos pero eso no importa en este momento.
Tadeo estaba en su cuarto dibujando a un dichoso ser amarillo que conoció hace unos días, se hicieron amigos (mejores amigos mejor dicho) en poco tiempo. El Omega estaba solo en casa, ¿Por qué? Bueno su hermano gemelo fue a su ciudad natal para pasar el día con su pareja, sus padres salieron a una cita para contar cosas que pasaban en su vida diaria y pues el solterito de Tadeo estaba en casa, pero en esta ocasión se sentía diferente a comparación de otros días del mismo motivo.
Se sentía solo
Esta en ese momento donde deseaba tener pareja para pasar el día con ella pero sabía que por ahora era complicado y más teniendo a su padre casi respirando por su nuca para vigilarlo, así que desecho esa idea desde hace unos años atrás.
Salió de su burbuja de pensamientos cuando escucho alguien tocar por su ventana, se paró y vio a la persona que estaba dibujando, abrió la ventana dejando entrar a Bill
Bill: Mi buen amigo -saludo- ¿Qué haces aquí adentro?
Tadeo: Bueno no tengo motivos para salir y no puedo ir al pueblo sin que alguien me acompañe -contesto guardando (mejor dicho escondiendo) el dibujo y sus colores- ¿Y tú qué haces aquí?
Bill veía con cuidado a Tadeo y noto que esté estaba desanimado, su cara estaba más pálida, unas ojeras no tan exagerados y sus ojos cafés se notaban tristeza cosa que no le gustó para nada al alfa ni a su lobo Interios.
Bill: Vine por ti -sonrió-
Tadeo: ¿Por mí? -pregunto confundido-
Bill: Así es mi querido Omega
Bill preciono sus labios aún sonriendo al percatarse lo que dijo, no midió bien sus palabras y sin querer se le salió poniéndose nervioso al sentir la intensa mirada de su contrario
Bill: Así que ponte la ropa más bonita y cómoda que tengas -intento esconder su pequeño error-
Tadeo: Si -soltó una pequeña sonrisa-
El Omega tenía el corazón acelerado por lo que dijo el Alfa, si bien nadie se dirije de esa forma hacia el y solo puedes llamar así a un Omega si es tu pareja. No sé iba a ilusionar por ello, tal vez simplemente se confundió.
Tadeo fue en busca de ropa cómoda que era un pantalón café claro, unos tenis negros, una playera blanca algo grande, el collar que encontró y una pequeña mochila donde llevaba su celular, su cartera y una pequeña cámara.
Bill vio que esté estaba listo y salió como una persona decente por la ventana asustando a Tadeo y como no si están en el segundo piso, el Omega se asomo y lo vio flotando como si nada dedicándole una bonita sonrisa.
El más bajo fulminó con la mirada a Bill y dejó eso de lado y salió por la puerta, una vez afuera fueron al bosque platicando de todo.
Tadeo: ¿A dónde vamos? -pregunto viendo al contrario-
Bill: Eso es una sorpresa -contesto-
Llegaron a una parte del bosque que Tadeo no conocía, estaban en frente de una puerta en una roca gigante que era escondida entre unos arbustos haciendo que sea imposible de ver a primera vista.
Tadeo: Esa puerta nunca la había visto -menciono curioso-
Bill no dijo nada y llevo a Tadeo a la puerta, este dudando un poco abrió lo puerta y se espero lo peor pero resolvió una ligera ola de viento dándole la bienvenida, en el otro lado de la puerta se podía ver un lindo campo lleno de flores de colores y un río.
El Alfa vio a su acompañante viendo que esté cambiaba su rostro, de una triste y sin energía cambiaba a una alegre y de sorpresa.
El Omega lleno se felicidad entro al lugar siendo seguido por el contrario que veía al pequeño emocionado por eso, una cosa que podía ser tan simple para el pero era lo más bello para un humano. Bill veía a Tadeo correr por el lugar viendo las flores y viendo las mariposas que salían de las plantas, el Alfa se sentía feliz por haberle sacado de esa triste casa donde se encontraba triste y solo, y lo que ganó fue ver al Omega con una hermosa sonrisa.
Pasaron ahí un rato platicando, jugando y tomando fotos con la cámara del humano pero la felicidad nunca es para siempre y Tadeo tenía que regresar a casa.
Una caminata tranquila y de miradas rápidas, Bill tomo la mano de Tadeo sorprendiendo a este quien lo volteo a ver y Bill esquivaba la mirada del contrario haciendo que esté sintiera ternura.
Finalmente llegaron a la casa pero había un pequeño problema, si familia estaba entrando a la casa.
Tadeo: ¿Cómo entraré ahora? -pregunto-
Bill: En la misma forma que entre yo -tomo de la cintura al omega- ¿Confías en mi?
Tadeo estaba nervioso por el agarre pero afirmó e igualmente se sujeto y espero nervioso, Bill noto esto y soltó un poco de sus feromonas tranquilizando lo, se empezó a elevar y se acercó a la ventana que gracias a Dios estaba abierta y entró viendo el cuarto oscuro y solo entraba la luz de la luna, al tocar el suelo Tadeo vio a los ojos de Bill ahora viéndose a los ojos.
Bill se sintió nervioso, quién lo diría el ser más poderoso estaría nervioso por un humano Omega, pero como dicen espérate lo inesperado.
Tadeo sin querer ronroneo sin darse cuenta al esconder su rostro lleno de pena haciéndole sentir ternura a Bill, el Alfa le picaba los labios de querer besar al Omega pero sabía que estaba llendo rápido y eso podría terminar mal. Bill le dio un pequeño beso en la frente a Tadeo y desapareció al escuchar la puerta del cuarto ser abierta.
Dipper: Ya llegamos -entro al cuarto detectando un ligero aroma-
Tadeo: Si -contesto- ¿Cómo les fue?
El menor saco plática intentando sacar a su padre y lo logro, también intentando calmar su corazón hecho un lío.
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