-Disculpa, voy a usar el baño - el chico solo me miró con gracia. Sentí como lentamente estaba a punto de perder la cordura
- Eres sordo o que!! - fui a abrir la puerta del baño, cuando una mano grande y fría no me dejo terminar la acción. Lo vi a los ojos, pero esta vez no veía nada de gracia en ellos.
- Hola Eva - dijo sin mas preambulos
-Com.. - iba a preguntar pero me acordé esa noche cuando Ale grito a todo pulmón mi nombre. - Ummm, hola - dije al final
- Decirle a alguien que es sordo, no es muy bonito de tu parte, Eva - hizo énfasis en mi nombre. <<Y quien se cree este para decirme que está bien o mal?>>
-Disculpa?! - Exclame - El tabaco te tosto el cerebro o que?!
El solo esbozó una sonrisa y yo... yo me perdí en ese hoyuelo que se le formaba, y esos labios rosados. Me imagine besar esos labios por un instante, y bueno, como era de esperarse me sonroje. Al subir mi mirada hacia sus ojos me estaba viendo fijamente con una mirada intensa. No pude ponerme más roja.
- E-enserio, t-tengo que usar el baño - tartamudee - puedes salir por favor?- pedi
El solo me miró a los ojos mientras abría la puerta, se volteó y tomó rumbo hacia la fiesta otra vez. Cerré la puerta con pestillo, y me deje respirar de nuevo.
Después de quince minutos me atreví a salir del baño. Fui directo a buscar a Ale.
Llevaba casi media hora buscándola y nada, entre tanta gente era casi imposible encontrarla. Cuando por fin la pude encontrar, se estaba besando con Roan, de una manera muy apasionante. Obviamente no iba a interrumpir, me mataba si lo hacía. Así que tuve que poner en marcha mi plan B.
Salí de la casa para que no se escuchara tanta bulla al llamar un uber.
No había ni comenzado la llamada cuando alguien me quitó el celular.
-OYE!! - proteste, cuando me di cuenta de quién era, voltee los ojos
-Yo te llevo - dijo sin más, tomó rumbo hacia un Mercedes negro deportivo. Cuando iba a abrir la puerta para subirse, se dio cuenta que yo estaba en el mismo lugar donde me dejó. -Vamos, no tengo toda la noche- comentó
-Expectas que yo entre a un coche de un extraño?- dije
-Pues yo te vi llamando a la compañía de Uber por uno, y no creo que el que lo conduzca sea tu papá princesa, así que súbete y deja de decir babosadas- atacó, y lastimosamente no pude decir nada. Porque no tenía argumentos para eso, él tenía razón, y eso me chocaba.
-Primero que todo, no me llamo Princesa, tengo un nombre, estoy cien por ciento segura de que lo sabes. Segundo, ni me se tu nombre Princeso, asi que muchas gracias por tu invitación pero no gracias - le dije, me voltee para comenzar a llamar a la compañía.
Pasaron unos segundos y no escuché que el motor prendia. De repente escucho la puerta del coche cerrarse. Supuse que se había subido al coche para irse a Dios sabe dónde.
-Oye escúchame, perdón por haberte llamado así -se disculpó, yo solo lo miraba a los ojos- Por favor, déjame llevarte, es más seguro que vallas conmigo a que vallas con un completo desconocido - no dije nada, solo lo mire. El se dio cuenta, volteo los ojos y dijo - Me llamo Ed
Esboce un sonrisa, y asentí
Ed tenia ese dia una camiseta de Guns N' Roses y pantalones negros.
Al subirme al coche lo primero que pude notar es que estaba impecable, todo estaba reluciente. Ed puso el coche en marcha, había un silencio, así que decidí poner música. Undi un boton alazar y comenso a sonar "Teenage Dirtbag". Lo dejé porque era un temazo.
Comencé a cantar la canción, con todo mi sentimiento (obviamente en un tono moderado para no asustar a mi piloto y que me deje tirada). Sentí unos ojos encima mio, pero no me importo, seguí cantando.
Cuando se acabó la canción vi una mano muy grande apagar el radio, lo mire confundida por su decisión
-Tienes un buen gusto musical- dijo- Bueno eso lo supe desde que te vi en el bar - Me reí. Con que el princeso tiene un ego muy grande. no?
-Muchas gracias- dije- pero para que te sientas mejor, ni sabia que ustedes existían- informe. Ed se quedó callado, no dijo nada, solo me miró.
-Será mejor que pongas tus bonitos ojos azules en la carretera, ya vaya ser que nos matemos aquí- dije sin pensar, y cuando me di cuenta de lo que había dicho era ya muy tarde. TRAGAME TIERRA!
-Con qué piensas que mis ojos son bonitos, eh - no dije nada, no pude decir nada
-No importa Eva, yo también pienso que eres muy bonita - dijo
Damas y caballeros prepárense para mi funeral ;)
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La Noche
RomanceEva, una chica de diecisiete años, estudiosa y aficionada a la lectura. Cuya única compañía aparte de sus apreciados libros, es su mascota Oddie. Ella que siempre estuvo inmersa en sus libros; quién diría que una noche de chicas y bar, una mirada ib...