Swok - Neteyam Sully [Editando]

6. Pukap

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Al otro día, luego de aclarar todo con la familia Sully, Diana necesitaba dejar de pensar tanto en ese compromiso.

Ella recuerda como en la mañana Neteyam se mostró muy simpático, era dulce y agradable, algo que no me gustaba, se le hacía difícil la idea de mantenernos alejada.

Por la tarde logro escapar del grupo que tenía con sus hermanos y los Sully, logro ir a la arena para dormir un poco; su pasatiempo favorito.

—Diana—ella se preguntaba porqué todos interrumpían sus siestas.

—Rotxo—le respondio sentándose en la arena, Rotxo se sento junto a ella.

—Tengo una invitación que te va a alegrar—Diana elevo un poco una ceja.

—Dudo mucho que lo haga, ¿Qué pasa?

—Hay fiesta, en la isla secreta—vaya, si que me alegro.

—¿Cuándo?—ahora tenía una sonrisa en su rostro.

—Hoy, a las nueve—y ahora la sonrisa de Diana había desaparecido—¿Qué sucede?, no te gustó la idea.

—No, es solo que hoy en la tarde es mi cena de compromiso—su cara reflejaba un poco de sorpresa, creo que él no sabía.

—¿Compromiso?, entonces todos tenían razón.

—¿Todos?—Diana estaba ahora atenta a las palabras del chico.

—Por la aldea se decía que te emparejaras, lo supe en la mañana.

—¿Cómo sabían?, tal vez mi padre ya lo anunció—se quedo perdida mirando a la arena bajo ella.

—Bueno pero, luego de esa cena escápate y ve a la isla, sabes que aguantamos hasta las cinco de la mañana—tenia razón, todos eran unos fiesteros, además esto no pasaba seguido ya que todos tenían responsabilidades.

—Bien, me escaparé luego de que todo pase, gracias por
avisarme.

—No es nada y...—ella se quedo esperando a que él hablara—¿Llevarías a Kiri?—Diana rio por su pregunta, era obvio que quería algo con Kiri

—¿Por qué no la invitas tu?, ¿De verdad eres tan tímido?

—A ti te conoce más, a mi solo me saluda y no he tenido la oportunidad de hablarle.

—¿Y crees que en una fiesta es buena oportunidad para hablarle?—Rotxo se quedo mirando a Diana, suplicándole con la mirada.—bien, la invitaré.

—Gracias—luego de sonreírle Rotxo se levanto de la arena—bien, dejó que tomes tú siesta.