CAPÍTULO VIII

419 38 0
                                    

Pensamientos








"Amor Prohibido" una novela famosa pero muy triste, ver como dos amantes son separados por la sociedad.

Damas hermosas, gobernantes, bandidos, corruptos, ciudadanos con alta pobreza es de lo que se habla.

Nezuko los salvó la verdad, estaba muy semejante a él sueño.

Por más que lo veas, es la realidad.

Pero... Nunca contaron la historia de los bandidos, sólo dijeron que atacaron la escuela con tal de robar dinero y objetos que lo llevarías a la fama y fortuna, sin embargo son atrapados y fueron a la cárcel, después se habían escapado y nunca más se supieron de ellos.
Hasta el día de la tragedia de todo, el bandido sólo mataba a la gente que estaba alocada en el lugar, había incendios y olor a sangre, desorientado, vio como mataron a la hermosa dama. Después mató a esa persona que había cometido eso, no por venganza a la muerta de la dama, sino, porque había matado a su mujer. La venganza lo consumió y lo mató y después se suicidó.

Nadie sabía cómo murió esa persona, si la torturaron o que paso?

Hasta que llegó el sueño.

Desde lo lejos, en el techo de un lugar, una mujer entró discretamente hacia el edificio, cerrando puertas y ventanas.

Había matado a la persona que estaba dentro de ella.

Se estaba quitando su vestimenta, para ponerse algo más revelador.

- nadie me ha reconocido, es un alivio para mí - decía mientras se veía en el espejo. - está historia será más trágica que la que escribieron.... - sonrió de forma macabra.

Alguien más entró, no se sabe como pero entró.

- vengo a darle noticias señora... - decía temblando de miedo.

- habla... Mukago - le dijo mientras la veía en el espejo.

- se han metido más personas, la cantidad suficiente para el trama que quería.... - dijo mirando al suelo. - pero... - sintió que algo la miraba de manera furiosa y odiosa, sudaba del miedo y solo quería irse. - se está acabando el olor de rosas... - sintió que algo se quebró y eso la asustó.

Mukago, una niña usada por esa persona. Nisiquiera sabía lo que hizo para meterse en ese lío.

Quería llorar de miedo.

Había quebrado un vasito de vidrio muy bonito, la miraba muy furiosa. Se acerca y le jala el cabello, haciendo que se queje de dolor, pero no le importaba.

- si sabes que se está acabando, que estas esperando..? - acerco su rostro al de ella. - sabes muy bien que quiero matar a esas personas mientras duermen y tu no haces nada...? - solo quería correr y huir por su vida. - aveces ser bruja es difícil pero.... Te da muchas cosas inigualables - le dio una a bofetada después para tirarla al suelo.

Se le cayeron algunas lágrimas y puso sus manos en su cabeza.

- eres tan fea que no encuentro un papel para ti en este lugar - la estaba humillando feo.

Se arrastraba como podía y desapareció.

Esta ni le importaba, solo se sentó y miro al espejo.

- Solo los puse como los más hermosos porque su final sería muy trágico - dijo disgustada pero sonriente. - ahora que lo pienso... No puedo sacar a kaigaku ni a ese hombre... Al menos los quiero juntos - dijo emocionada para terminar de arreglarse.

Hablando de ellos....

Habian despertado en otra parte, en una pequeña casa de madera al frente de un río.

Aroma De Ensueño (yaoi) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora