-Buenos días, hermano – Cushiro se estiró
-Buenos días, hermano – Kushigo se sacudió.
-Buenas tardes Cushiro, buenas tardes Kushigo – una parpariana lila estaba en el cuarto y asintió con la cabeza.
-Ah, Clembri, buen, ¡¿Qué?! – se asustó Cushiro.
-¿Q-Qué hora es? – preguntó Kushigo asustado.
-Son las 3 de la tarde – respondió Clembri
-¡¿Qué?! – exclamaron ambos parparianos asustados.
-El rey no está molesto con ustedes – comentó la parpariana – ya se enteró que ustedes estuvieron practicando toda la madrugada.
-Te dije que era muy tarde – reprendió Kushigo.
-El que se echaba para atrás primero perdía – Cushiro revoleó los ojos.
-¡Igual perdiste! – increpó Kushigo.
-Pero no por echarme para atrás – reprochó Cushiro.
Clembri negó con la cabeza.
-También mencionó que ustedes podían salir a lo que tenían planeado hoy.
-Oh, entonces no está molesto – Cushiro sonrió.
Kushigo echó un suspiro de alivio
-Bien, vayamos a almorzar, hermano, antes que se haga tarde – mencionó.
-Sí sí – Cushiro se estiró – Clembri, ¿Puedes guiarnos otra vez a ese sitio donde venden chicharrón?
La parpariana se extrañó.
-¿Q-Que los guíe? Disculpen, pero hoy es mi día libre – mencionó.
-Y por eso te vamos a sacar a comer – respondió Cushiro.
-¿P-Perdón? – Clembri se extrañó más.
-En Equestria en un par de días se celebra el día de los corazones cálidos, una festividad entre familiares y seres queridos
-Ajá, como buena amiga de nosotros, queríamos sacarte a comer y a pasar un buen rato, pensé que Cushiro te lo había dicho. Lo ideal hubiese sido más temprano, pero bueno, mejor tarde que nunca
-Quedamos en que tú le ibas a avisar.
-Tú
-¡Tú!
Clembri logró aguantar la risa.
-Como sea – Kushigo revoleó los ojos - ¿Te animas, Clembri?, ¿O estás ocupada hoy?
-No. Agradezco mucho su invitación – la parpariana respondió con tono sereno.
-Bien, ahorita le pido dinero al rey – dijo Kushigo y se marchó de la habitación.
-Clembri – habló Cushiro.
-Dime.
-¿Te parece si tenemos un duelo luego de almorzar?
-¿Yo con ustedes?
-He oído que eres la parpariana más fuerte del reino, ambos quisiéramos probar eso.
-Agradezco mucho tu halago, ¿Están seguros de que quieren tener un duelo contra mí?
-Completamente seguros.
-Está bien – respondió Clembri y suspiró resignada.
-¿Estás bi...?
-¡Regresé! – dijo Kushigo entrando a la habitación con una pequeña maleta a su costado – Tengo todo en el bolso.
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Cortos
FantasyComo su nombre dice, esto sera una serie de cortos de temas completamente aleatorios que involucren a mi personaje o a otros. ¿Oficiales en la trama del fic? Depende ¿Por qué hago esto? Porque me gusta escribir pequeñas historias o microrelatos alea...