Especial día de los inocentes [I]

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(Aviso, esto que ven aquí es parte de una dinámica que nos planteamos en el grupo de discord con unos users, en el cual consistía en hacer historias para trigerear a otros usuarios a modo de broma (ya sea usando sus personajes, waifus, etc). Todo esto ha sido a modo de broma y sin ánimos de hacerle un daño a alguien. Muchas gracias. Empecemos)


Eirin estaba petrificada.

-¡Reisen! -exclamó la lunarian

Los parparianos vieron a Eirin delante del espejo que usaban para viajar entre mundos. Por ahí se veía a Yukari del otro lado que estaba sorprendida. La lunarian trataba de entender la situación: Kushigo tenía una de sus patas en un mochi que estaba en la boca de Reisen, mientras cushiro tenía otro sosteniendo sus pulgas. La coneja tenía su vientre hinchado, al punto que algunos botones de su saco y la camisa que llevaba por dentro se habían salido. Buena parte de la piel era visible, y esta estaba respirando fuertemente.

-!Kushigo, qué es esto! -exclamó Eirin completamente confundida.

-Es parte del experimento que te dije -respondió kushigo con tranquilidad.

-¡Ah sí, ajá! ¡Ahí veo un mochi! -replicó la lunarian.

-Parte del experimento era cuánto de comida podía aguantar. Ya que no debe comer comida parpariana, que es exclusivamente carne, probamos con mochis de zanahoria, y comprobamos que el estómago de las conejas lunarian se expanden de forma increíble -respondió kushigo manteniendo la serenidad.

Yukari ahora quería reirse, mientras que Eirin poco a poco se enfurecía más.

-¡Me dijiste que la tratarías bien!

-Y lo hice, le dimos hospedaje, le dimos un lugar donde dormir, un ambiente tranquilo, y claro, le dimos de comer.

-¡Le dieron demasiado de comer! -exclamó Eirin

-Reisen, ¿Te gustaron o no los mochis? -preguntó el parpariano.

-S-Sí -contestó esta antes de soltar un erupto.

Eirin ante esto cerró los ojos y puso ambas manos sobre su cabeza. Tras dar un fuerte respiro, se dirigió hacia la coneja.

-Reisen, ¿Cómo te trataron ellos?

-B-Bien... Maestra -respondió esta.

-¿A esto le llamas bien? -replicó Eirin sosteniendo el vientre de la coneja. Ante esto, Reisen cerró fuertemente la boca y evitó eruptar. Tuvo que pasar unos segundos para que pudiese hablar.

-M-Maestra, solamente puedo... Estar agradecida por las vacaciones -dijo Reisen respirando fuertemente.

Eirin ante esta respuesta pasó de estar molesta a estar confundida.

-Tú, ¿Qué? -preguntó esta.

-M-Maestra... agradezco mucho la hospitalidad de los parparianos hacia mí... Eso es lo que puedo decir.

-No... ¿No te sientes mal? -preguntó la lunarian.

-No... Ellos me han... Me han tratado bien -respondió tratando de controlar su respiración.

Eirin bajó la mirada tratando de comprender nuevamente lo que estaba pasando. Tras pensarlo durante un breve momento, se volteó hacia Reisen, mas esta le habló primero.

-Maestra... por favor... No se enoje con ellos -imploró.

-Si tú lo dices, Reisen -suspiró Eirin y se devolvió hacia los parparianos, quienes miraban la escena atentamente -Si ella lo dice, entonces supondré que no tengo por qué hacerlo.

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