𝐓𝐇𝐄 𝐓𝐘𝐑𝐀𝐍𝐓'𝐒 𝐖𝐈𝐅𝐄 | 𝐖𝐌𝐌𝐀𝐏

𝟎𝟒

𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐂𝐮𝐚𝐭𝐫𝐨

A pesar de que ya era complicado tener al emperador molestando a su alrededor, la situación empeoraba cuando se encontraba rodeada por el resto de la familia imperial. Sin embargo, al menos agradecía que el hermano menor de Athanasius no estuviera observándola; al parecer, el otro rubio prefería ignorarla. Eso era algo por lo que estaba agradecida.

Por otro lado, su esposo simplemente la observaba con la misma mirada fría y aterradora. Ah, y las niñas, bueno... ellas tenían reacciones distintas. Jennette parecía tímida, deseando acercarse a ella, pero sin saber cómo hacerlo, mientras que Anastasya la miraba con odio y le sacaba la lengua cada vez que sus miradas se cruzaban.

Honestamente no recordaba por qué la princesa Anastasya la odiaba tanto, bueno a ella no, a Clara, pero se entiende el punto, pero ese odio no parecía limitarse a una simple antipatía infantil. Parecía haber algo más profundo, aunque en ese momento no tenía intenciones de indagar en ello. Su prioridad era asegurarse de no cometer errores durante la dichosa ceremonia en honor a Diana.

Después de caminar un poco más, finalmente llegaron al lugar donde se suponía que se llevaría a cabo la ceremonia, o al menos eso creía Clara, ya que no estaba completamente segura. Observó con curiosidad a su alrededor, notando que había mucha gente afuera. Se preguntó si Diana había sido tan importante o si la multitud simplemente estaba allí para complacer al emperador.

Observó por la ventana durante un rato, manteniéndose apartada de la familia imperial. No parecía que su presencia realmente importara mucho allí. Solo estaba allí por apariencias, de hecho, parecía que la única persona que mostraba algún grado de simpatía hacia ella era la pequeña y tímida Jennette, lo cual resultaba irónico, considerando que, en la historia original escrita, Clara había intentado matar a Jennette.

Clara soltó un suspiro, sintiéndose agotada por su papel como emperatriz. Anhelaba volver a su vida "cómoda", incluso consideraba que la vida en la pobreza con el estrés diario era más llevadera que su destino actual. Miró de reojo a su ¿familia política? y decide que sería mejor acercarse y tratar de participar en la conversación, aunque tal vez solo se convirtiera en un adorno.

Sin embargo, antes de que pudiera llegar al lado del emperador, este pasó a su lado y le susurró algo al oído antes de dirigirse hacia la puerta principal. A su lado, la hermosa niña de cabellos castaños lo siguió, luego fue tomada en brazos por su padre. Parecía que el verdadero tormento estaba por comenzar.

Se esforzó por contener cualquier muestra de frustración y se dirigió hacia el emperador. Aparentemente, la entrada de la familia debía ser impecable. Pero aún más impecable debía ser la entrada del emperador, junto a su esposa e hija, debían lucir perfectos, como si el emperador amara a la emperatriz y como si la emperatriz no odiase la sola existencia de su hijastra.