Toni Stark sabía que moriría desde el momento en que le hablaron de la posibilidad de viajar en el tiempo, supo que tendría que dejar atrás a Morgan.
Pero si ese fuera el precio para recuperar a Peter, lo habría hecho mil veces.
Lo único que no espe...
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Había muchas cosas que Sirius odiaba de su madre: desde las miradas de desaprobación que le enviaba hasta las bofetadas mordaces que le daba. Odiaba cómo ella lo ignoraba la mayor parte del tiempo si no fuera para torturarlo. Pero, ¿qué es lo que más odiaba en este momento? El hecho de que su abrazo había sido suficiente para calmarlo, el primer abrazo que había recibido de ella.
Salir de la habitación con su hermano había sido lo más fácil que había hecho en su vida, pero ahora no sabía cómo debía comportarse. Después de todo, su "madre" se había desmayado y podría despertarse para convertirse en la misma arpía odiosa que solía ser. Incluso podría estar peor después de lo que él le lanzó cuando se sintió demasiado confiado, lo que resultó en la segunda vez en menos de una semana que él solo la había lastimado dos veces. Ella nunca dejaría que lo olvidara y si pudiera encontrar una manera de marcarlo con su estúpido error sin que nadie se diera cuenta, estaba seguro de que lo haría. Incluso sus amigos de Hogwarts estaban al tanto de lo que podría estar pasando en casa, y seguramente nunca le creerían si alguna vez contara lo que había sucedido.
Trató de pensar en otra cosa, pero solo pudo recordar sus desconsolados ojos azules cuando ella entendió cuán serio era él sobre su crueldad.
Walburga Black... bueno, ella era un misterio para él. Aparte del hecho de que ella lo había dado a luz a él y a Regulus y su boda con Orion, quien ahora estaba destinado a heredar los títulos y la fortuna, él no sabía nada más. Apenas sabía lo que le gustaba a ella cuando era solo una niña y nunca había escuchado una pequeña historia de broma sobre su tiempo en Hogwarts. Incluso nunca se habló de sus padres dentro de su casa, a pesar de que había escuchado algunos rumores sobre el hecho de que su abuela se había metido en la cama con su prima de 12 años cuando ella tenía 17 para tener una buena reputación.
Sirius quería seguir manteniéndose calmado y distante, pero cada minuto que pasaba fuera de la habitación lo ponía nervioso. Era difícil permanecer sentado mientras uno de sus padres podría estar muriendo o donde podrían estar tramando su venganza contra él y sus formas de traición a la sangre.
No entendía exactamente por qué, pero... le había dolido que su madre no lo recordara. Al principio, realmente había pensado que ella les estaba gastando una broma cruel para castigarlos por su insubordinación y su falta de atención cuando practicaban hechizos peligrosos en casa, especialmente porque ella se había ocupado de esconder a Wanda ese día antes de que obtuvieran un contrato. aguanta el de ella.
No sabía qué era peor: que volviera la Walburga que conocían o que se quedara la nueva Walburga. El adolescente ni siquiera quería tener ningún tipo de esperanza, ya que sabía que podía hechizarse fácilmente y cargar con una tercera opción que podría ser desastrosa en sí misma: no tenía idea de lo que podría ser, pero estaba seguro de que Black el grupo podía ser creativo cuando tenía que serlo.
Como de costumbre, cuando no sabía qué podía hacer, pensaba en la solución más obvia. ¡Por supuesto que necesitaba a James! Su madre era una gran sanadora y podía ofrecer ayuda si era necesario (y averiguar si Walburga estaba mintiendo o si estaba realmente confundida por su falta de recuerdos). Empezó a caminar hacia el estudio vacío donde seguramente encontraría pergamino, una pluma y tinta. Incluso la lechuza de su padre estaba allí, fue entonces cuando supo que había tomado la decisión correcta, incluso las estrellas le sonreían.
