𝐀 𝐁𝐋𝐎𝐎𝐃𝐘 𝐏𝐑𝐈𝐍𝐂𝐄𝐒𝐒🍷

Estaré allí, para usted...

Una princesa y una guardiana, perdidas en un lugar desconocido. Pero, ¿cómo llegaron allí?

...

Yoko, Yoko Tanaka es la princesa más hermosa que había, su belleza realmente es irreal, pero ella también podía ser escalofriante y peligrosa si quería.

Ella es una vampira... Pero, bueno eso ya lo sabiamos.

Siempre había soñado con amar y conocer a alguien especial, soñaba con estar enamorada pero cometió el error de enamorarse de alguien que no la amaba.

O eso pensaba ella...

Y ese alguien, era un tipico chico malo, con antecedentes serios y mucho mayor que ella. Él logró algo que ninguno de los hombres y mujeres del reino había logrado...

Sí, logró enamorar a esa hermosa, pobre e inocente princesa.

Ella huyó de la seguridad de su reino y de sus padres para ir tras ese hombre, tras ese amor o más bien, fue tras lo que ella pensaba que era amor...

Pero la princesa no estaba sola, ya que con ella estaba una de las guardianas reales. Y su nombre es Divina, es una de las chica más fuertes, altas, rápidas y poderosas del lugar.

Fue por eso que la escogieron.

Es una mujer increíblemente inteligente. Una de las sirenas más hermosas y fuertes... Y Prosupuesto, fue una de muchas que se convirtió en guardianas.

Tal vez no era gran cosa, pero Divina, es esa única persona que podía cuidarla y traerla de vuelta a su reino.

...

Ya había pasado dos semanas desde que se fueron. Y se encontraban en un lugar desconocido, el hombre que las trajo les dijo que tenían que quedarse ahí para así después irse con él.

Obviamente que la princesa le había creído. Así que se quedó allí esperando todos los días a que él volviera.

Divina odia esa decisión, pero ella tenía que guardar silencio, ya que solo quería proteger a su amaba y no la iba a dejar, aunque eso le dé celos y le provoque dolor.

...

Divina volvía de su recorrido en el pueblo. Era un pueblo desconocido pero sabía que no estaba muy lejos del reino, aún así ella estaba esperando que su princesa le diera el "Sí" para volver a casa.

Minutos después ella preparó una cena decente para su amada y cuando estuvo lista, la llamó.

"Traje la comida mi señora..." dijo mientras arreglaba la mesa y le servía.

La vampiro sonrió ampliamente y caminó silenciosamente allí y cuando llegó, se sentó en una de las sillas, y espero atentamente su plato con comida.

"Sé que tal vez esto no es mucho mi señora, pero es lo único que ofrece este pueblo" respondió mientras dejaba el plato al frente de la princesa.

"No importa, mientras mi sed y mi apetito se hayan detenido, sobreviviré", respondió...

Mirando su cena que era; una carne muy jugosa  acompañada con una simple ensalada de tomates.

Divina no respondió a lo que dijo la joven princesa, pero dejó una copa de sangre a su alcance.

"Es de ciervo", respondió con una sonrisa cuando observo a la chica, quién está rápidamente notó la copa. "Su favorito", terminó diciendo.

"Lo aprecio mucho" fue su respuesta y luego bebió.

Luego se limpió elegantemente los labios con una servilleta y sonrió con satisfacción.

"Está delicioso" respondió y tomó un sorbo de nuevo.

Divina estaba feliz de poder complacerla y estaba tan satisfecha con su trabajo, que estaba lista para retirarse, pero la princesa al ver eso la detuvo rápidamente.

"Sabe que puede acompañarme, no estamos en el reino... Siéntese a comer conmigo" dijo suavemente.

Divina la miró mientras su corazón latía rápida y lentamente con una sonrisa regresó a la mesa.

"Por supuesto, que la acompaño mi señora, creo que es la costumbre..." rió.

"Lo entiendo, pero eso ha cambiado ahora" respondió con simplesa.

Y tenía razón. Todo está cambiando...

La chica mayor la escuchó y la miró cuidadosamente.

"¿Eso significa que ya no volveremos al reino?", preguntó con cuidado y curiosidad.

La vampiro la miró suavemente y respondió cuando terminó de masticar.

"No, nunca he sido feliz ahí... Pero si usted desea hacerlo puede irse" respondió con tranquilidad y muy segura de sus palabras.

"No puedo hacerlo, mi señora" respondió segura.

"¿Por qué?", cuestionó mientras la miraba.

Ahora las dos se miraron. Divina no podía dejar de verla, siempre intentaba no ser descubrirla pero a veces no podía evitarlo.

Yoko era la mujer que amaba.

"Porque tengo que protegerla, es mi deber. Se lo juré a su padre".

"No ya no debe, puedo irse cuando quiera, es libre, ya no seré una princesa mas, entiende?" respondió algo molesta cuando escucho lo de su padre.

Divina se dio cuenta de eso, así que volvió a hablar.

"Aún así no la voy a dejar, la voy a seguir a donde quiera que vaya, porque mi deber con usted, es cuidarla y protegerla... Incluso si no lo quiere, incluso si ya no es una princesa"

Ella respondió con mucha confianza y sin arrepentimientos.

Realmente Divina siempre ha amado a la princesa. Incluso sabiendo que ella nunca la corresponderá.

"No, no entiendo con certeza... ya no tiene, porque hacerlo pero agradezco su fidelidad y protección, Divina", respondió la joven princesa, pronunciando el nombre de la chica mayor.

Era la primera vez que lo hacía y fue agradable para las dos escucharlo.

La sirena sonrió. Mientras su corazón seguía latiendo rápidamente.

"Estaré allí, para usted cuando quiera, mi señora", respondió.

...

Continuará...

Hola Bienvenid@s a otra nueva historia... 💗!!