The Other Targaryen

I

"La desgracia de los Siete"

Naherys Targaryen contaba con apenas once onomásticos cuando su padre, el Rey Viserys, la desterró a Antigua junto con los Hightower. La niña era bruta y astuta, y portaba con orgullo el color verde. Nunca se consideró una Targaryen, su padre la había apartado como si fuese una bastarda, aún teniendo ojos morados y el pelo platinado, la aborrecía.

Sir Otto la alimentó y la cuidó como si de su propia hija se tratase, la presentaba con su apellido, Naherys Hightower, le enseño modales y como sostener la espada la añadió a la septa familiar para que aprendiese todo lo necesario. Y eso se lo agradecería por siempre, ella era una Hightower y quién se atreviese a llevarle la contraria sufriría las consecuencias.

Cuando Viserys la desterró a Antigua, Otto se vió obligado a permanecer en Desembarco, tanto por su poder como mano y por su hija de sangre; Alicent. La niña sabía de sobra que Naherys no era su hermana, era idéntica a la princesa Rhaenyra, al fin y al cabo eran gemelas, pero crecieron juntas y se apoyaron hasta el momento de su separación, y previo a este siguieron haciéndolo. Ella era su hermana, aunque no compartieran ningún lazo sanguíneo.

En cambio, Rhaenyra, siempre fue la mejor amiga de Naherys, ninguna podía verse con hermandad cuando ni siquiera comían juntas, pero ambas eran confidentes de la otra, no se consideraban hermanas, pero su sangre las unía, haciendo su conexión aún más potente y poderosa.

Pero el destino tiende a ser cruel y el tiempo a cambiar a las personas.

Naherys ya no era una niña, contaba con quince primaveras y su carácter se había endurecido como una roca. Era fuerte y leal a sus principios, portaba con orgullo el apellido Hightower y luchaba en sus frentes. En Antigua la veneraban como si de su salvadora se tratase, mientras que en Desembarco del Rey la veían como una desgracia, "La desgracia de los Siete" La llamaban los de Antigua, burlándose de la realeza Targaryen, mientras que en Desembarco, la llamaban "La errata Targaryen" Burlándose del apellido Hightower. Cierto es, que nadie se atrevía a llamarla así en su presencia, quien se atrevía acababa sin lengua, cortesía de su tío, Hobert Hightower, quién quería a Naherys como una más de su familia.

Muchos consideraban a Naherys débil, por no haberla visto con sangre en las manos y por no poseer un dragón. Pero los más cercanos a ella, sabían de sobra que la sangre Valyria, pura y espesa, recorría sus venas, en espera de una llama que la haga florecer. Nadie quería que eso sucediese.

Ella era su propio dragón.