El día había llegado para nuestra querida Ame, qué se encontraba preparando la cena de esta noche, faltaban tan solo unos miserables minutos para que el señor Ashiro llegará a negociar con ellos. La pelirosa tenía un sonrisa en su rostro mientras sacaba un pequeño frasco transparente del bolsillo del delantal, echó el líquido turquesa en la bebida del invitado, que claramente era la única bebida diferente por los gustos de este. La bebida consistía en angel shot con más de tres bebidas alcohólicas moderadamente fuertes. Está había tomado un color turquesa por el veneno pero nada que una excusa barata sobre un nuevo alcohol pudiera servir.
El timbre se oyó a lo lejos, "Es la hora" pensó la de ojos verdes. Con suma cautela colocó las bebidas en una bandeja de plata y se dirigió hacia el comedor, donde se daría acabo la cena.
Ella solo debía estar presente como una cocinera para no levantar sospechas. Vió a todos los integrantes en la mesa junto al señor Ashiro, quién la miraba con una sonrisa medio rara y una mirada de morbo.— "Que asco" -volvió a pensar- "Ayer me encontré con uno y ahora con otro, madre nunca supo elegir personas estables"
— ¿Y quién es la linda señorita? -preguntó ese señor de unos 45 años-
— Es nuestra cocinera, Ame. -respondió Koko, mirándolo con sus ojos de serpiente-
— Vaya... Es tan linda. -lamió sus labios-
— Gracias, señor. -dijo firme mientras le ofrecía la bebida con el veneno-
— Nunca se debe mentir, ¿verdad? -aceptó el vaso-
— Claro. -sonrió falsamente- "Maldito hipócrita" -lo miró con asco-
— Ame, traenos algunos aperitivos, por favor. -le pidió Kakucho con su habitual seriedad pero amablemente-
— A la orden, Kaku-sama. -dió una pequeña reverencia y se fue a la cocina-
El hombre al ver qué la chica se fue no dudo en preguntar: — ¿Cuánto quieren por esa niña?
— ¿Disculpe? -Haruchiyo no dudo en mirarle indignado-
— Lo sentimos, Ame no está en venta. -aclaró Manjiro-
— Que raro, vosotros siempre me dejáis acostarme con vuestras sirvientas e incluso comprarlas. -dijo con tono cantarín-
— Tal vez, pero Ame es nuestra cocinera personal, así que no dejamos que nadie la toque. -contestó Rindou- ¿Quién cocinaría si está en cama?
— Lamento interrumpir sus negocios pero aquí están los aperitivos que me pidió. -hizo acto de presencia la mujer-
Colocó pasteles de crema, dorayakis, taiyakis y una tarta de fresa y nata. También trajo un poco del líquido turquesa, que Sanzu tomó para verlo de cerca con una sonrisa.
— Bien hecho, copito. Este alcohol es muy raro de conseguir, mañana tendrás día libre. -dijo Sanzu mientras observaba con una gran sonrisa a la botella-
— ¿Puedo probarlo?
— Por supuesto, señor Jin. -contestó el mayor de los hermanos- A nosotros no nos agrada mucho porque es un poco suave pero cómo usted es un amante de todo tipo de alcohol, Ame lo consiguió exclusivamente para usted, ¿verdad, querida? -la chica asintió a la pregunta-
— Espero lo disfruté. -inclinó su cabeza y se marchó a una esquina del cuarto-
— Pueden comer. -y después de que Mikey dijera eso, todos se sirvieron, encantados por probar la comida de Ame otra vez-
Jin echó un poco del supuesto alcohol en su bebida, qué no dudo en tomarla de un trago. La Hiroko miró el reloj de la pared, el efecto era casi instantáneo, solo debía esperar unos segundos.
1... 2... 3... Y.... Bingo.
Una fuerte tos se empezó a escuchar por toda la habitación, el viejo verde no dejaba de toser mientras escupía sangre debido al veneno. Todos los ejecutivos sonrieron pero fingieron estar preocupados para engañar a su víctima.— ¿Se encuentra bien? -preguntó Ran, fingiendo estar preocupado-
— ¿Q... Qué m-mierda te-tenía esa b-be-bida? -habló entrecortado por la tos-
— Ame. -llamó el albino de pelo corto-
— Veneno de nenúfar azul. -contestó tranquilamente-
— ¿¡Q-QUÉ!? -se exaltó al ver sus dedos tornarse de un color azul turquesa-
— Dulces sueños... -logró escuchar antes de desmayarse-
— Ran, Rindou, llevarlo al sótano. -todos se levantaron para poner fin a la reunión- Mañana le esperara un infierno... ~
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Dos horas después la de ojos esmeralda se encontraba en su habitación alistándose para poder dormir. Se estaba dando una ducha mientras se quitaba los restos de ese veneno, es decir, las huellas para que no sospecharan de ella. Lavó su pelo y su cuerpo, salió de la tina muy relajada y con ello empezó a secar su pelo y a hidratarse la piel.
Salió del baño y vió a Mikey en su cama con su habitual ropa negra. Eso hizo qué se enojara un poco pero estaba tan cansada que no le tomo importancia, fue directa hacia su cama y se tumbó. Abrazó al chico, apoyándolo contra su pecho, el cuál era cálido a pesar de ser pequeño. El albino se acurrucó estrechandola fuertemente contra él, no lo admitía pero el cariño maternal que Ame emanaba hacia que él la empezará a ver cómo su madre... ~𝘕. 𝘈𝘶𝘵𝘰𝘳𝘢: 𝘌𝘯 𝘦𝘭 𝘱𝘳ó𝘹𝘪𝘮𝘰 𝘊𝘈𝘗 𝘩𝘢𝘣𝘳á 𝘶𝘯𝘢 𝘱𝘢𝘳𝘵𝘦 𝘥𝘦 "𝘴𝘶𝘪𝘤𝘪𝘥𝘪𝘰", 𝘴𝘦𝘳á 𝘭𝘦𝘷𝘦, 𝘯𝘰 𝘰𝘴 𝘱𝘳𝘦𝘰𝘤𝘶𝘱é𝘪𝘴. 𝘊𝘳𝘦𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘦𝘴𝘵𝘦 𝘤𝘢𝘱í𝘵𝘶𝘭𝘰 𝘦𝘴 𝘦𝘭 𝘮á𝘴 𝘤𝘰𝘳𝘵𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘩𝘦 𝘩𝘦𝘤𝘩𝘰 𝘱𝘦𝘳𝘰 𝘦𝘴𝘵𝘰𝘺 𝘦𝘯𝘧𝘦𝘳𝘮𝘢 𝘺 𝘵𝘢𝘮𝘣𝘪é𝘯 𝘵𝘦𝘯𝘨𝘰 𝘶𝘯 𝘦𝘹𝘢𝘮𝘦𝘯 𝘢𝘴í 𝘲𝘶𝘦 𝘦𝘴𝘱𝘦𝘳𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘭𝘰 𝘤𝘰𝘮𝘱𝘳𝘦𝘯𝘥á𝘪𝘴.
𝘘𝘶e 𝘵𝘦𝘯𝘨á𝘪𝘴 𝘭𝘪𝘯𝘥𝘰 𝘥í𝘢. 💗
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𝐋𝐀 𝐒𝐈𝐑𝐕𝐈𝐄𝐍𝐓𝐀☁️ | 𝐁𝐎𝐍𝐓𝐄𝐍 𝐗 𝐅𝐄𝐌! 𝐑𝐄𝐀𝐃𝐄𝐑
Fanfiction𝘈𝘮𝘦 𝘏𝘪𝘳𝘰𝘬𝘰 𝘦𝘴 𝘶𝘯𝘢 𝘢𝘥𝘶𝘭𝘵𝘢 𝘥𝘦 22 𝘢ñ𝘰𝘴 𝘥𝘦 𝘦𝘥𝘢𝘥 𝘦𝘯 𝘣𝘶𝘴𝘤𝘢 𝘥𝘦 𝘶𝘯 𝘦𝘮𝘱𝘭𝘦𝘰 𝘱𝘢𝘳𝘢 𝘱𝘢𝘨𝘢𝘳 𝘴𝘶𝘴 𝘦𝘴𝘵𝘶𝘥𝘪𝘰𝘴 𝘺 𝘭𝘰𝘴 𝘥𝘦 𝘴𝘶 𝘩𝘦𝘳𝘮𝘢𝘯𝘰 𝘮𝘦𝘯𝘰𝘳. 𝘔𝘪𝘬𝘦𝘺 𝘦𝘮𝘱𝘪𝘦𝘻𝘢 𝘢 𝘷𝘦𝘳𝘭𝘢 𝘤ó...