Giyuu se encontraba entrenando con su maestro, Yae observa a al azabache pensativa, han pasado dos meses desde la muerte del pilar de la llama y Giyuu se encontraba.. ¿Perdido? ¿Pensativo? ¿Melancólico? No podía estar segura pues el era todo menos expresivo. el entrenamiento se detuvo y el azabache se acercó a su joven compañera
Giyuu:Yae, ¿puedes ayudarme?
Pregunto mostrando sus manos heridas
Yae:Si claro
Entra a la casa por unas vendás, con cuidado fue envolviendo las manos del chico y se percató de algo, sus manos eran ásperas, no es que ella tuviera Las manos más suaves del mundo pero las de Giyuu eran un chiste, podrían competir con las de su difunto padre.
Su maestro le dijo que Giyuu sido muy dedicado a su trabajo como cazador y Tanjiro que cuando se fue de la cofradía los pilares y demás cazadores tuvieron que trabajar el doblé para tapar el bueco que dejó, ése esfuerzo se hacía presente en sus grandes habilidades y en sus manos
Yae:oye Tomioka, ¿Cuando tiempo llevas matando demonios?
Giyuu:Ocho o Nueve años
Yae:¿En serio?, Parece que tardaré en poderme a tu nivel
Giyuu:Sólo sigue entrenando
En medio de la conversación un cuervo se acercó posando su cuerpo en el nombró dél azabache, esté último noto que el ave traía lo parecía una carta, la tomó con algo de intriga
Kanzaburo:¡crack, crack!
Yae:Kanzaburo no hagas tanto ruido porfavor
Kanzaburo:¡crack! ¡¿Que dice?! ¡crack!
Grito el cuervo no muy lejos de los oídos de la chica, cosa que a esta no le gusto para nada
Yae:¡Dije que desdé de hacer tanto ruido, pon atención Kanzaburo!
Kanzaburo:¡crack, no grites tanto!
Yae:¡¿Es enserio?!
Urokodaki:Ya basta de pelear
Yae:Bien...
Kanzaburo:¡jaja por boba!
Yae:¡¿Disculpa!?
Giyuu observa la escena con diversión sonriendo como pocas veces su rostro se lo permite, todos dirigieron su vista hacia el incluyendo a Kanzaburo el cuál tenía el pico abierto por el asombro
Giyuu:Ésto me recuerda a algo que paso con Sabito
Yae: ¿Sabito, quién es?
Urokodaki:Uno de mis... difuntos estudiantes, el y Giyuu crecieron juntos aquí
Yae¿De verdad?
Giyuu:Si, una vez cuando éramos niños, Sabito peleo con un cuervo el lo persiguió al bosque y yo fui trás el. cuando quisimos regresar no pudimos encontrar el caminó y estuvimos ahí hasta que el maestro Urokodaki nos encontró
Yae:Vaya
Urokodaki:Aún lo recuerdo y aún me molesta
Giyuu:Lo siento, por décima vez
Yae:¡jajajajajaja!
Urokodaki:Espero no tener que ir a salvarte a ti también Yae
Dijo el hombre mayor alejadonse Yae fue detrás de él indignada pues ella conocía el bosque a la perfección, Kanzaburo se quedó a lado de Giyuu el cuál volvió poner su atención en la carta misteriosa
La abrió con cuidado y la leyó detenimiento, al terminar su sonrisa se desvaneció
Yae: oye Tomioka ah... ¿Pasa algo?
Giyuu:.....
Yae:¿Tomioka que ocurre?
Yae se acercó a su compañero extrañada por su cambio de humor, Giyuu la vió sin ninguna expresión y le entrego la carta
"Hola Tomioka, espero que te encuentres bien donde sea que estés holgazaneando mientras nosotros arriesgamos nuestras vidas. Me encontré con tu cuervo y le pedí diera está invitación, te invito a dejar una ofrenda conmigo y los demás pilares en la tumba de Rengoku, el murió hace poco peleando contra una luna. Se que luego de tu castigo quedamos en malos términos pero espero que puedas recordar nuestro tiempo juntos antes de esté, será en dos días no faltes"
"Atentamente: Shinobu Kocho"
Yae: (¿Castigo, que castigo?)
La de ojos naranja voltio a ver al azabache, pero esté ya no estaba
Eso es todo por hoy, espero que lo hayan disfrutado, feliz día 💕
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Las heridas de la tortura (Giyu Tomioka)
FanfictionLuego de ser torturado por sus compañeros por proteger a los hermanos Kamado Giyuu deja la cofradía, regresa con su maestro y junto a una vieja conocida emprende un camino en el que va sanando sus heridas