HOLA MI HERMOSA GENTE DE WATTPAD, HEMOS VUELTO CON UN NUEVO CAPITULO, YA SABEN QUE SI LES GUSTO, LES SACO UNA SONRISA O LOS ENTRETUVO, PUEDEN REGALARME UNA ESTRELLITA, NO SABEN CUANTO ME MOTIVA A SEGUIR CON ESTO
BUENO, SIN MAS, VAMOS CON EL CAPITULO
Poco a poco la conciencia fue volviendo a su cuerpo. Abrió los ojos con pesadez parpadeando un par de veces mientras su vista se normalizaba. Le hubiera gustado poder moverse, pero al parecer su cuerpo aún no se encontraba en óptimas condiciones. Forzar un poco su cuerpo entrenando con la pelirroja sin duda había sido una mala idea, aunque claro, había obtenido una valiosa lección, así que no había mucho de lo que pudiera quejarse en realidad
'veo que despertaste'
No era necesario que se moviera para saber a quién pertenecía aquel tono severo y lleno de molestia, por lo que solo se limito a soltar un suspiro de resignación junto a una sonrisa burlona
'hola Heith-san' saludo Bell
'¿hola? ¿es todo lo que dirás?' cuestiono Heith
'¿lo siento?' se disculpó Bell con duda
'pues deberías, no sabes lo preocupadas que estaban la diosa Astrea y esas mujeres' dijo Heith
Un nuevo suspiro escapo de los labios del albino antes de soltar una risa irónica. Su tendencia a preocupar a los demás parecía ser algo que permanecía incluso en Orario, por mucho que odiara esa parte de el
'al parecer el número de personas con las que debo disculparme no deja de aumentar' dijo Bell
'tal vez no sería así si dejaras de ser tan imprudente y comenzaras a cuidarte más' reprocho Heith
'puede ser, pero...no tengo muchas opciones' dijo Bell
'¿eh? ¿a qué te refieres?' pregunto Heith
'sabes Heith-san, yo...no siempre fui así ¿sabes?' dijo Bell
'¿eh? ¿Qué quieres decir?' pregunto Heith
'al principio tenía un cuerpo débil y lamentable, bueno, más que ahora, apenas y podía correr un par de minutos antes de caer y comenzar a convulsionar, era realmente frustrante, que tu propio cuerpo no te hiciera caso, recuerdo que la primera vez que me paso tenía siete años...estaba jugando mientras mi madre cocinaba cuando caí al suelo y comencé a convulsionar' dijo Bell
Llevando su mano a su pecho, una sonrisa intrépida apareció en el rostro del albino mientras memorias de su pasado volvían a su mente
'solía llorar y quejarme por lo injusto que era todo, vivía atormentado, postrado la mayor parte de tiempo y totalmente desconsolado, no entendía porque la vida me dio un cuerpo tan débil, el dolor físico no se comparaba a como me sentía por dentro' dijo Bell
Una expresión sombría apareció en el rostro de la sanadora en ese momento. Necesito de todo su control para seguir manteniendo un semblante relajado. Estaba segura de que la vida del chico había sido muy dura gracias a lo que su diosa le había dicho. Vivir todos los días de tu vida sufriendo, y lo que era peor, ver a tu madre sufrir también debió ser algo muy trágico. La fuerza para poder seguir a pesar de eso era algo que no muchos tenían. Era por eso por lo que, a pesar de su imprudencia, debía admitir que había una parte de ella que sentía admiración por el joven y su lucha por seguir adelante a pesar de su situación
'y en medio de la tempestad, mi madre fue quien me rescato, fue la luz que destellaba mostrándome el camino en medio de mi oscuridad, ella me dio esperanza, me dijo que era afortunado, que mi destino no estaba marcado por la condición de mi cuerpo, que solo yo decidiría quien quería ser, que empezar desde abajo no era malo, que los caminos fáciles no existían, y solo cumpliría mis sueños si me esforzaba lo suficiente...fue entonces que lo entendí, quizás no fuera bendecido con un cuerpo fuerte, pero solo debía compensarlo con una voluntad inquebrantable, así que me dispuse a volverme fuerte, obviamente mi madre me apoyo en todo lo que pudo, así que comencé a entrenar, bueno, tortura en mi caso, cualquier esfuerzo físico era realmente doloroso, pero no me rendiría, tampoco escuchaba las burlas de las personas del pueblo que se reían de mis pobres intentos de correr por todo el lugar o hacer cualquier ejercicio' dijo Bell
