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Jian Yi, corría por el metro escapando de un grupo de personas que lo venían siguiendo desde que salió del colegio, no sabia cuanto había corrido pero no era raro que fuera perseguido, le pasa desde pequeño, pero últimamente se había vuelto más peligroso y concurrente, tanto que diría que se había hecho costumbre, pero no podía ser tan fácil, las opciones para esconderse parecían esfumarse el lugar que usaba para esconderse no podía repetirse pues para la próxima ya lo estarían esperando en ese lugar.

No sabia cual era la intención de esas personas, pareciera que ahora si querían alcanzarlo a toda costa, pasaron de tratar de capturarlo unas cuantas veces al año, y fueron avanzando hasta que ya eran todas las semanas.

El rubio no sabía a dónde se dirigía, no sabía si estaba bien poner en peligro a uno de sus amigos, y aun así conociendo el riesgo él era lo único que estaba en su mente en esos momentos, sentía que verlo podía calmarlo, sabia ya a esas altura que no era solo un amigo, pero, ¿Cómo arriesgarlo a él? ¿A la persona más importante de su mundo? En esos momentos su vida estaba en riesgo, tenía que escapar si o si, alejarse lo más que pudiera, después podría pensar a dónde ir, así que, cuando vio un vagón del metro abierto, no lo pensó y se subió dejando atrás al grupo de personas que lo perseguían.

Pudo ver como su perseguidor saco el teléfono hizo una llamada y antes de perderlo de vista se había dado la vuelta para irse.

El miedo lo inundo, se sentó en el piso cubriendo su rostro con sus manos para calmar los nervios, su cuerpo se sentía pegajoso del sudor provocado por haber corrido tanto tiempo y la gente lo miraba, había curiosidad y quizás algo de miedo, después de todo algunos no eran ajenos a que él estaba escapando.
Jian Yi ya estaba advertido, esta vez probablemente seria la ultima en la que lograría escapar. 

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El metro ya había avanzado varias paradas y Jian Yi decidió bajar.
En medio del paradero lo primero que hizo fue buscar una tienda de conveniencia para comprar un agua, y fue asi como espero que el semáforo estuviera en rojo para caminar en línea recta, agradecido de no tener que buscar mucho.

Dentro de la tienda saco su celular y se puso a ver dónde estaba, estaba lejos de todo, su departamento ni si quiera era una opción, de seguro ya estaba saqueado, en la casa de He Tian estaban los niños y Mo lo mataría si los ponía en riesgo. Entonces solo le quedaba la casa de Xi, y no iba a negar la felicidad que le inundo saber que lo vería.

Se tomó un trago de agua y guardo la botella en su mochila, y así   empezó a caminar a casa de su amigo.

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Cuando llegó tocó la puerta varias veces, hasta que abrió una niña de pelo castaño muy parecida a su hermano, Jian Yi si la reconocía era la hermana menor de Xixi, pero en esos momentos solo quería ver al castaño, después de todo estaba ahí por él no caminaría una hora  y media para no verlo. Sin decir nada, la niña junto la puerta y fue a avisarle a su hermano su presencia por lo que logro escuchar.

Espero un rato apoyado en la pared al costado de la puerta, hasta que escucho que está rechino un poco al ser empujada, volteo la mirada y ahí está el chico que le robó el corazón desde pequeño, sin poder esperar más, lo abrazo y casi se pone a llorar, pero se aguantó mordiéndose el labio, no quería causar más problemas, suficiente era con su presencia.

Todo el agotamiento paso a segundo plano cuando lo vio, cualquier problema parecía banal cuando Xixi estaba con él.

—¿Que paso?— pregunto el castaño agarrándolo de los hombros, alarmado del aspecto desalineado que tenia, él le quito el pelo de su rostro y lo hiso caminar hasta su cuarto.

19 𝔻𝕒𝕪𝕤 ¥ P̸A̸D̸R̸E̸S̸ ¥Donde viven las historias. Descúbrelo ahora