01.- Missa-Spreen

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Omegaverse.

Missa: Gamma.

Spreen: Alfa.

[***]

Missa era normal, bueno, todo lo normal que se podía ser en un mundo donde las personas estaban divididas por castas.

Ser un Omega no era fácil, pero ser un Gamma tampoco era sencillo. Más de una vez había tenido que lidiar con Alfas que lo apartaban por su "asqueroso olor", sus feromonas no eran asquerosas, pero no eran los olores que los Alfas esperaban de un Omega.

Ellos querían olores dulces...pero el tenía un olor demasiado dulce.

—¡Quackity! —chilló a su amigo, el cual estaba tranquilo junto a su novio Shadoune, ambos lo miraron.

—¡Missa! Bienvenido, wey. —dijo el Omega mientras se levantaba. —Ya te dije que hacer, ten está tarjeta, cualquier cosa que pidas corre por mi cuenta. —le dijo alegre. — En cuánto Spreen llegué, te llamaré. Es un pendejo difícil de tratar, pero nuestras familias quieren que lleguemos a un acuerdo. —rodo los ojos irritado.

Quackity le abrazo viviendo a agradecer su ayuda, el Omega era hijo de un matrimonio importante en la ciudad, tenían casinos por todos lados. Estaba podrido en dinero y el Omega era el heredero. Había sido instruido desde niño para ello, y jamás había sido relegado por sus padres cuando resultó ser Omega. Su madre le dio que esperaba que dominará a todos esos Alfas idiotas que creían que se podría imponer ante él.

Missa había sido rescatado por Quackity y su guardia de aquel entonces, quién ahora era novio de Quackity: Shadoune.

Un Alfa muy cariñoso con el Omega, que no dudo en golpear a los que estaban contra Missa y por consiguiente contra Quackity.

Y Missa evita pensar en ese incidente, odia recordarlo, odia pensar en lo que hubiera pasado si Quackity no hubiera aparecido, le debía su vida al chico, por lo que, desde ese día, su parte animal y el buscaban como ayudar siempre al chico.

Y hoy Quackity había dicho que necesitaba de su ayuda. Algo sobre un viejo amigo que vendría y que era algo difícil de lidiar, así que se ofreció para ayudarlo, pero, tal vez...no debió de ofrecerse.

El casino estaba lleno de Alfas pretenciosos que le observaban hacía abajo, a pesar de ser más alto que algunos de ellos, y le hablaban golpeado o le decían que se alejará.

Se sentía pequeño y pateado, porque aceptaban fácilmente que cualquiera se les acercara, pero cuando él lo hacía, ellos lo apartaban o pedían a los seguratas de las mesas que lo alejaran.

Unos idiotas totales si le permitían decirlo. Y estar siendo apartado constantemente ya estaba haciendo sentir mal a su parte animal la cual le rogaba porque se fueran de un lugar donde claramente no eran bienvenidos.

«Pero lo hacemos por Quackity...» pensó, y esa parte animal se quedó en silencio. Lo que Missa tomo como que su parte animal soportaría solo por tratarse de su amigo.

Esperaba que el tal Spreen llegará pronto para poder hacer lo que debía lo más rápido posible e irse de ahí.

[***]

Spreen, estaba irritado, entre sus padres presionando porque ya era momento de tener una pareja y su abuelo que quería formar una alianza con los Nevadas, las cosas no habían ido bien para él.

A primera instancia podía parecer que solo estaba mostrando su careta de negocios, pero realmente estaba cansado.

Deseaba poder ir a su hotel y dormir como un maldito oso en invierno.

One Shots-Team Vacío Legal.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora