✉ 17-07-2014 (Parte 3) ✉

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F: ¿Cómo?

F: ¿Y eso? Explícate mejor

P: Bien. Es complicado...

F: ¿Complicado?

P: Sí.

F: Pucha (1), no te entiendo nada.

P: No es fácil de explicar, Fabián.

F: ¿Quién te comprende? La flaca se te ha declarado. Tú le gustas y ella a ti. ¿Qué esperas para ir de la manito, todos tortolitos, mientras la llevas a la discoteca a regatonear juntos? :v

P: Nunca la llevaría a una discoteca de ese tipo. No me gusta el reggaetón.

F: Pero si tú no bailas reggaetón ni nada. Por eso los chicos de la facu dicen que tienes "dos pies izquierdos". :v

P: ¿De qué hablas? No he nacido con una malformación de ese tipo.

F: Me refiero a que así se le dice a los que no saben bailar.

P: Pero si yo sé hacerlo. Me metí en los cursos de salsa en la universidad.

F: De los cuales no pasaste del nivel básico en dos semestres seguidos :v

P: ¡Claro! Lo hice para reforzar mis conocimientos en esa danza caribeña y ver su repercusión cultural en nuestra urbe y sus ciudadanos. Es interesante la simbiosis de ese baile y en las costumbres de nuestra gente.

F: ¡Contigo no se puede!

P: ¿Cómo?

F: ¡Olvídalo!

F: Más bien dime por qué no puedes tener una relación con ella. No te entiendo.

P: No es tan sencillo de explicar.

F: A ver... La flaca te gusta y ella ya se te declaró. ¿Cuál es el problema aquí?

P: Tiene que ver con algo muy íntimo.

F: Uhm... ¿Íntimo?

P: Sí.

F: No te entiendo nada. Explícate mejor, oye.

P: No te lo puedo contar así por así.

F: ¿Ah no?

P: No.

F: Pues bueno, entonces no me hagas perder más mi tiempo. Me "quito"(2) a seguir estudiando, ¿ok?

F: Suerte, Rodri.

P: ¡Espera!

F: ¿Qué pasa?

P: Necesito un consejo.

F: ¿Consejo?

P: Sí. Hoy más tarde quizá hable con Aira y no sé cómo afrontar esto.

P: ¿Qué le digo? ¿Qué hago? ¿Cómo comienzo nuestra charla? No se me ocurre decir nada sin que salga a flote esto que sé que siente y que creo que también siento...

P: No tengo experiencia alguna en esto y no quiero malograr nada.

P: Me gustaría seguir como antes con ella, en el que ambos no sabíamos que gustábamos del otro. Sólo preocuparme por ella... por saber cómo estaba ella... por saber sólo de ella...

F: Pucha... te tiene loquito.

P: ¿QUÉ HAGO? POR FAVOR, AYÚDAME.

F: ¿Ella es de Lima?

P: Sí, vive aquí.

F: Uhm....

F. Pues no sé cómo ayudarte, brother.

Ansías y Poesías [Saga Ansías 1] ✓ - [GRATIS]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora