Nuestra Menira

VX

Quince días habían pasado y la pareja de jóvenes no había vuelto a hablarme y/o verce.

Steve estaba siendo acompañado por sus mejores amigos, algunos días lo sacaban de su habitación para que respirara aire puro y en otras ocasiones hacían noche de películas con pizzas.

Tony por otro lado, le había pedido a Pepper para quedarce con ella unos cuantos días, esta sin dudarlo aceptó y lo recibió en su casa, está siempre lo consolaba y abrazaba cuando lloraba por Steve.

Sarah se había enterado de lo sucedido y trataba de acompañar a su hijo lo más posible para que no se sintiera solo.

Sin embargo los padres de Tony aún no habían regresado a casa de su viaje y por eso el castaño optó por irce con su mejor amiga.

Steve por primera vez en quince días, se sinto lo suficientemente bien como para salir sin ser obligado por su madre o mejores amigos. Así que se dirigió a su cafetería favorita y llevó su cuaderno de dibujos consigo.

Cuando llego, se pidió un café americano y un muffin de arándanos.

En cuanto tuvo su pedido en sus manos, se dirigió a una mesa a un lado de una ventana que daba hacia el hermoso exterior.

Tomo su libreta, su lápiz y comenzo a dibujar la vista que tenía desde la ventana.

Estaba todo muy tranquilo, eran alrededor de las cinco de la tarde y el sol aún estaba brillaba en el cielo, el lugar donde estaba ubicada la cafetería era tranquilo ya que no pasaban muchos vehículos por ese lugar.

La tranquilidad lo había inundado por unos segundo hasta que escuchó una vos que le resultaba familiar.

- Un café negro y una dona por favor - pidió la vos que le resultaba familiar al rubio

Volteo hacia el mostrador y allí estaba Tony, esperando su pedido.

El castaño sinto la mirada de alguien sobre el y volteó a todos lados hasta que encontró al rubio observándolo a unos cuantos pasos. Cuando su pedido fue entregado se acercó a la mesa de Steve y simplemente con la mirada le pidió sentarse el aciento frente a el.

Steve acintio y Tony tomó aciento.

- ¿Como te ha ido en estos días? - pregunto el castaño luego de beber un sorbo de su café

- No te mentiré, han sido días bastante difíciles, mamá, Bucky y Nat me sacaban de mi habitación a la fuerza, si no fuera por ellos seguiría en mi cama llorando - conto el rubio con una pequeña sonrisa

- Yo estoy igual, me fui unos días a la casa de Pepper y ella es quien me saca de mi cama y obliga a comer - comento el castaño

- Lamento haberme comportado tan cortante contigo el otro día, se que querías arreglar las cosas y yo como un tonto tuve una mentalidad terca - se disculpó el rubio

- No tienes que disculparte, yo también estarías igual si me engañarán con otra persona - contestó el castaño

- ¿Fue tu intención hacerlo? - pregunto el rubio luego de estar algunos segundos en silencio

- Stephen me tuvo que contar con lujo de detalle lo que había pasado - comenzó a explicar el castaño - Steve, se que en el pasado te lastimaron y no quiero que tengas el mismo recuerdo conmigo. Te amo y no me creo capas de dejar de sentirlo, perdóname Steve por favor - el genio le estaba casi suplicando a su ex que volviera con el

- ¿Como haces Stark? - pregunto el rubio y como respuesta obtuvo una mueca de confusión por parte del castaño - ¿Como haces para sacar mi lado más débil y hacerme ceder solo mirándome con esos hermosos ojos? - pregunto el rubio con una pequeña sonrisita

- ¿Eso significa que me perdonas? - pregunto el genio ilusionado

- Eso significa que te daré otra oportunidad, pero si la vuelves a cagar olvídate de mi - dijo el ojiazul serio

Tony se acercó a su novio y le dio un tierno beso, ambos se extrañaba y lo demostraron en ese acto.

Después de ese beso estaban dentro de una burbuja de amor, no desviaban la vista del contrario en ningún momento.

Cuando terminaron con su merienda, salieron de la cafetería tomados de la mano y caminaron hasta un lindo parque donde se sentaron en una banca a charlar.

- Te voy a contar algo y espero no te lo tomes a mal - comenzo el castaño y recibió una mirada de intriga por parte del rubio - Durante estos quince días venía a la cafetería y siempre pedía lo mismo que pedí la primer ves que me llevaste allí, me sentaba en el mismo lugar y miraba por la ventana la ciudad; eso me trajo muchismia paz y recordar ese día en la cafetería cuendo accidentalemnte derramé un poco de café sobre tus pantalones, me hace sonreír, tu me haces sonreir baloved - concluyo el castaño con una sonrisa

- Yo hacía algo parecido, cuando Nat y Bucky me preguntaban a dónde quería ir a cenar, siempre respondía Burger King y específicamente queria ir al que esta más serca de tu casa, para poder verte aunque sea por algunos segundo - sonrio el rubio

- ¿Por qué no simplemente me llamaste? - pregunto el castaño con una sonrisa ladina

- Creo que no quería aceptar que te extrañaba y necesitaba - admitio el rubio con una sonrisa apretada

- Te entiendo, me pasaba lo mismo, aunque tu desde un principio me dejaste bien claro que ya no me querías ver y por eso no te contacté, quería darte tu espacio; gracias por perdonarme - agradecio el castaño con una sonrisa y mirando a los ojos color zafiro

- Gracias a ti por no dejar de insistir, se que fui terco al principio, me cerré y no quise escuchar tu vercion de la historia - agradeció el rubio mirando los avellana

- Te amo Steve - declaró el castaño

- Y yo a ti cariño - luego de decir esto ambos se besaron delicadamente

Cuando se separaron se miraron a los ojos y se sonrieron.

💙❤💙

Hasta aquí este nuevo capítulo.

Espero que les allá gustado, si es así déjenmelo saber con un voto o un comentario.

Aquí finaliza mi reporte, nos leemos en el siguiente capítulo bye💙❤

Cata🌻