-Se supone que nos olvidaríamos, que lo olvidaríamos.
No había nada que traer ni llevar
Sin embargo tu recuerdo yacía en mí-
No te recuerdo.
Que mal mentiroso.....
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
La pintura nueva matizada de un rojo brillante, los neumáticos con el ligero olor a caucho, las ventanas polarizadas eran lo que destacaban de este convertible que estaba aparcado en medio del bosque pues lo contemplaba sin ningún rastro de expresión en mi rostro.
Papá solía decir que vemos en una persona solo lo que queremos ver.
Cuanta razón tenía.
Mi corazón y dignidad habían sido quebrados, el moretón en mi pómulo solo reflejaba mi impotencia por no haberme defendido de Leigh.
Por fin hago una mueca al apretar los dientes y frunciendo el ceño reflejando el enojo y odio como mis cómplices de esta noche. Tomo el bate de béisbol que traía conmigo y no dudo en estrellar contra las ventanas del auto una y otra vez. Con la respiración agitada por la adrenalina saco una navaja y lo clavo en cada neumático. Maldito hijo de perra. Seguido de eso empieza a trazar varias líneas desgarrando por completo la pintura.
¿Despechada? Puede ser, pero es lo menos que puedo hacer después de que ese idiota no solo rompió mi corazón, tuvo el descaro de golpearme solo porque no asumía la paternidad de una chica que había embarazado.
¿En que estaba pensando al intentar creerte? Salir con tus amigos hoy y dejando tu precioso tesoro a solas...
Lo pagaras
Para añadir la cereza del pastel esparzo de gasolina lo que quedaba del automóvil, la sonrisa maquiavelica que espantaria a cualquier niño o incluso adulto, según decia mi padre, hace acto de presencia en mi rostro. Prendo un encendedor antiguo contemplando esa pequeña llama que pronto crecería y arderia consumiendo todo.
Cierro los ojos recordando todos esos "bellos" momentos que paso junto a mi ex-pareja pero más recordaba, más me maldecía por haber sido tan genuinamente estúpida hasta el punto de pedir prestamos para ayudar a Leigh por un proyecto secreto que tenía, convenciendome que sería una inversión para "su futuro"
Si. Campanas de boda, cualquiera pensaria eso después de una relación de 6 años. Grata fue mi sorpresa al verlo pasear con el convertible con una mujer a su lado mientras que hacía las compras para nuestra cena de aniversario.
Esa fue la chispa que necesitaba para arrojar el encendedor sobre el auto.
-Que bonito-dije embelesada por la gigante llama ardiente frente a mi.
Todo habria salido de acuerdo al plan.
Todo habria sido perfecto.
Sin embargo un par de risas escandalosas se escucharon a la deriva, una risa lo reconocia perfectamente.
-Carajo regresaron rápido-
Recojo mi bate y corro al interior del bosque pero fue en ese momento que escucho el grito desgarrador de Leigh.
