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Jaehyun estaba sentado en el césped, fumando al lado del lago cuando Taeyong se acercó. Se estaba congelando, pero nunca lo admitiría o haría un esfuerzo para volver. Él quería a Jaehyun para mantenerlo caliente.

Taeyong se sentó a su lado y no dijo nada durante unos minutos, se quedó mirando el agua oscura.

—Te estás congelando. —dijo Jaehyun y Taeyong lo miró.

—Sólo un poco.

—Sostén esto.

Taeyong tomó el cigarro ofrecido y observó a Jaehyun mientras se quitaba la chaqueta de mezclilla antes de entregársela.

—Tómala.

—Uh... ¿Seguro?

—Sí.

Jaehyun tomó el cigarrillo de nuevo mientas Taeyong se abotonaba la chaqueta hasta el cuello. Abrazó sus rodillas a su pecho y miró a Jaehyun mientras fumaba.

—Así que, ¿te sientes diferente ahora que tienes veinte? —intentó hacer una conversación.

—La misma mierda vieja, pero en una edad diferente.

—Es que... ¿por qué no parece que tu cumpleaños sea importante? Debes estar feliz.

—¿Feliz de que hace veinte años nací en un hogar abusivo con dos padres que ni siquiera les importo una mierda? ¿Quieres saber por qué yo no me preocupo por los cumpleaños?

Taeyong asintió, inseguro.

—A mí me gustaba mi cumpleaños cuando era pequeño. Mi madre me hubiera horneado un pastel y luego me gustaría desear un pastel aún más grande para el próximo año. Pero cuando cumplí diez, mi madre no estaba en casa, así que pensé que lo celebraría con mi padre. Bajé las escaleras, obviamente emocionado de que me estaba convirtiendo en un chico de diez y que había hecho una década. Le dije a mi padre que era mi cumpleaños y que estaba llegando a los diez. Todavía recuerdo la mirada de indiferencia en su rostro cuando él se encogió de hombros y dijo: "¿y qué?". Es estúpido... pero recuerdo esa mirada en cada uno de mis cumpleaños.

Se detuvo un momento antes de continuar.

—Entonces, en mi décimo primer cumpleaños, ambos lo olvidaron, y en mi doceavo cumpleaños mis padres dijeron que ni siquiera planearon tenerme, que sólo querían a mi hermana mayor y que yo era un accidente. Él estaba bromeando, pero eso se me quedó atascado en la cabeza. Nunca celebré mi cumpleaños después de eso, nunca me hicieron ningún pastel y ni siquiera se molestaron en desearme un feliz cumpleaños. Así que, sí, no creo que sea un gran problema.

El corazón de Taeyong dolió. Es, literalmente, dolor de lo mucho que quería abrazar a Jaehyun, acariciarle el cabello y decirle que él estaba feliz de que hubiera nacido.

—Sabes que es una casa llena de gente que vino aquí para celebrar tu cumpleaños, ¿verdad? —preguntó Taeyong finalmente y Jaehyun negó con la cabeza.

—Están aquí por el alcohol. Las personas sólo se preocupan si tienen algo de él.

—Eso no es-

—Toma a mi madre, por ejemplo. Ella no da una mierda sobre mí, porque no tiene nada que ganar con ello. Si tuviera un trabajo, estaría besando mi trasero. Simplemente nadie se preocupa por mí.

—Yo me preocupo. —dijo Taeyong y Jaehyun se giró para mirarle a los ojos.

—Todavía estoy tratando de averiguar quién eres. Finges preocuparte porque no quieres que le diga a la gente que eres gay. —Jaehyun habló y le dio una calada de su cigarrillo.

Baby, heaven's in your eyes|| Jaeyong [Adaptación] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora