22|Confesiones

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Ronal salió de la tienda mientras yo permanecía sentada en el suelo por unos segundos hasta que me cansé y me puse de pie, a paso lento caminé hacia la entrada de la tienda que miraba hacia el océano, ya ahí puse mi mano sobre el borde de la pared...

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Ronal salió de la tienda mientras yo permanecía sentada en el suelo por unos segundos hasta que me cansé y me puse de pie, a paso lento caminé hacia la entrada de la tienda que miraba hacia el océano, ya ahí puse mi mano sobre el borde de la pared apoyándome sobre mi lado izquierdo observando el hermoso paisaje de la puesta de sol sonreí bajando la mirada encontrándome con Lo'ak, Neteyam, Tsireya, Ao'nung y Roxto a la orilla de las rocas nadando. Tsireya  estaba sentada al borde con Roxto mientras Ao'nung estaba en el agua con Lo'ak y Neteyam, ellos reían. Escuché unos pasos acercarse.

—Que curioso—la voz de Ronal acercándose desde atrás mio me hizo voltear a verla

—ho, ¿Qué cosa Ronal?—cuestioné, ella se paró justo a mi lado derecho observando el paisaje

—lo mucho que observas—rio ligeramente bajando la mirada a los chicos

—es un hermoso paisaje—levanté mi mirada disimuladamente hacia el océano

—no me refiero al océano...— desvié la mirada ante su comentario ladeando la cabeza ligeramente hacia un lado—me refiero al hijo de los Sully—rio nuevamente desviando la mirada a mi, ella suspiró con una sonrisa.

Me bajé de hombros y suavemente baje la mirada, Ronal habló.

—La manera en que te observa—posé mi mirada en Neteyam— es como si estuviera dispuesto a dar su vida por ti sin pensarlo...—Neteyam sonreía alegremente

—¿eso... es malo?— levanté las cejas involuntariamente sin quitar la mirada de él

—es intenso, apasionado, eres diferente con él, actúas diferente, él se mueve tú te mueves, uno no avanza sin el otro, como el mar sobre la tierra—ella elevó ligeramente la mano haciendo un ademán

—es difícil, es....—bajé la mirada al piso

—amor...—alcé la mirada a Neteyam sorprendida, empecé a cuestionarme —sus ojos reflejan amor..., es a lo que nosotros llámanos tsaheylu, crean un vínculo fuerte, emocional y de por vida, que nadie puede rompe — ella sonaba como una madre

—...¿amor?...— giré a verle sorprendida y llevé de nuevo la mirada a Neteyam, este seguía jugando con Lo'ak en el agua

—Lo entiendo, yo sé lo que se siente, lo mismo sentí con Tonowari, cuando lo conocí—bajó la mirada—yo no iba a ser la siguiente tsahik, pero gracias a Eywa me unió con él, lo mismo pasó contigo ¿cierto?—la vi a los ojos— por algún motivo que no entiendo, Eywa está contigo, a tu alrededor hay una energía que no logro descifrar, es una energía vendita... eso te abrirá caminos e incluso puedes llegar a unir clanes—

—¿Usted cree eso?—la vi algo esperanzada

—odias la guerra ¿no?— ella me vio—es por eso que no te negaste en venir con él aun sabiendo que podría ser peligroso, alejarte de tu gente, de tu cultura, tu cariño y tu tranquilidad para estar con tu pareja, es una prueba que no muchos pasan, después de todo cada uno viven con sus decisiones—ella frunció ligeramente el sueño poniendo énfasis en sus palabras 

"Príncipe Azul" (Neteyam y Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora