¡Ah! ¡me amenazas!.

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El Kryptoniano intentaba con todas sus fuerzas sostener una de las manos del gigante mientras los otros atacaban.

Sin embargo no fue suficiente para detener la aterradora fuerza del gigante.

Steppenwolf aplicó más fuerza en su mano, para estrellar en el piso al hombre de acero.

No perdió tiempo y con todas sus fuerzas empezó a pisar el cuerpo del superó héroe, los otro mientras intentaban detener tal brutal ataque.

Pero ninguno era oponente para su fuerza.

Asta que un látigo brillante detuvo el pie del gigante, para luego con fuerte tirar el lazo provocando la caída del Steppenwolf.

"Mujer maravilla es bueno verte".

Un hombre vestido de rojo con rayas amarillas saludo con una gran sonrisa a la Amazonas.

"No hay tiempo para esto tenemos que acabar con el antes de que llame a su ejército".

Dijo una más que enojada Diana para saltar y golpear con todas sus fuerzas al gigante gris.

"¿Bueno que le pasa? ¿alguien sabe que le pasa?".

Intentaba preguntar pero nadie le respondía.

"Será mejor que te concentro en la batalla".

Con seriedad en su voz dijo un hombre con un traje verde.

En una habitación oscura de la nave extraterrestre, un aturdido Supremo Saiyaman acariciaba con cuidado su mejilla.

En la cual se podía ver una marca clara roja en forma de palma.

"Jajajaja párese que no le gustó jajaja".

Se reía con intenciones el otro gigante gris que todo este tiempo veía todo sentado en el trono.

"¡Cállate!".

"Jajaja eres muy divertido terricola, me llamo Darkseid".

Al escuchar el nombre salto de emoción dispuesto a presentarse de la forma apropiada.

"Jaja no dejaré..

"No es necesario que te presentes ya se tu nombre".

Una nube negra de tristeza había aparecido en la cabeza del Supremo Saiyaman mientras en una esquina hacía círculos en el piso con su dedo.

"Shif, este es muy injusto, primero la invasión, después la bofetada y al final no me dejan presentarme bien shiff~".

Diana al recuperar la consciencia y ver lo que el Supremo Saiyaman estaba haciendo.

No pudo ni quiso escuchar explicaciones, ya que sin previó aviso le dió una bofetada con toda su fuerza.

Estando a punto de tomar su espada y acabar con la pobre vida del joven héroe, el cual apresuradamente explico lo que había pasado.

Por un momento no creía nada de lo que el Supremo Saiyaman le decía pero al ver a los otros super héroes afuera de la nave recibiendo una golpiza de lo lindo, le creyó.

Sin embargo eso no quería decir que le perdonaría, su furia no se había calmado.

Pero al valorar mejor las cosas, decidió ir en ayuda de los otros super héroes, dejando detrás una clara advertencia, de lo que pasaría.

"Tu quédate aquí este asunto aún no termina".

Fue lo último que dijo para de un salto ir en ayuda de sus compañeros.

"Bueno, terminemos con esto para ir a casa y caer más profundo en la depresión".

Decía mientras se limpiaba el polvo de su traje de super héroe.

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