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Siyeon sonríe ampliamente y se acomoda en el cuello de Bora. Con los ojos desorbitados y confusa dice "Sua", "Bonita", dice en voz baja.

Todo el aliento parece salir de las entrañas de Bora.
"Estás borracha", dice. "Apenas has bebido y estás tan borracha", ríe acunando la cara de Siyeon.

Las manos de Siyeon encuentran el pelo de Bora mientras ella parpadea hacia Bora con estrellas en los ojos, mirando descaradamente como si... como si Bora fuera la única persona en el universo, como si no hubiera nadie más a quien mirar que a Bora.

El corazón de Bora tartamudea y se detiene, una ola de comprensión se estrella en la superficie de su alma, sacudiéndola, sacudiendo toda su constitución, sacando el suelo de debajo de sus pies. Quiere que Sol la mire así, siempre. Quiere que la atención de Sol nunca se aparte de ella. Quiere que Siyeon la mire, la abrace, la toque y... también que la bese. Sabe que nadie puede compararse con el afecto que siente por Siyeon, lo sabe desde que la conoció. No podría haber nadie para ella más que Siyeon.

"Oh", susurra, apretando a Siyeon contra su pecho, respirando profundamente. "Oh no", susurra. Siempre ha estado enamorada de Siyeon, se da cuenta y luego se pregunta cómo es que no lo habia notado, cómo se ha acostumbrado tanto a la forma en que sus sentimientos se hunden en todos los aspectos de su vida que no ha sabido reconocerlo y sacarlo a la luz.

La habitación da vueltas, y Bora quiere...

"Bonita", vuelve a susurrar Siyeon, y Bora casi llora de frustración.

Bora se queda con esos sentimientos; una vez reconocidos, son más difíciles de rechazar, más difíciles de ignorar, más difíciles de volver a acostumbrarse.

Bora se queda hasta que las respiraciones de Siyeon se igualan, hasta que Siyeon empieza a roncar, sólo un poco, y murmura al aire libre: "Te quiero", dice. "¿Cómo no iba a saberlo, Siyeon? Siempre has sido tú"

Siyeon refunfuña algo más y se acurruca más en los brazos de Bora.

"Mi persona favorita", susurra y presiona un beso en la parte superior de la cabeza de Siyeon.

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Siyeon es siempre la primera persona a la que acude Bora cuando quiere compartir algo.

Sin embargo, esto no es algo que pueda contarle a Siyeon, así que se dirige a la siguiente persona que esta al tanto de la mayoría de las cosas que le ocurren.

Minji está convencida de que debe contarle a Siyeon lo que siente, totalmente ajena a sus ansiedades y a su origen. Ella cree que "¡no será un problema, Bora!" y que "itus miedos no están arraigados en la realidad!", pero Bora ruega que no sea así.

Entonces, su hermano le propone invitar a Bora y a su pareja a pasar el fin de semana en el complejo turístico.

Entonces, Bora propone algo totalmente salvaje y superfluo.

Entonces, Siyeon acepta, por razones desconocidas.

Pasar tiempo con Siyeon como su falsa novia abre un nuevo grado de deseos para el que Bora no está preparada. No es que tuviera dudas después de esa noche, pero el hecho de que sienta más cuando Siyeon le sonríe que lo que sentía cuando sus ex-novios la besaban, confirma todo lo que preocupaba.

La confirmación, sin embargo, lleva a Bora por el mal camino y abre una compuerta de preocupaciones. Si pierde a Siyeon, equivaldría a perder la mitad de su alma, la mitad de su vida: de principio a fin, sería perder a la única persona que considera su hogar.

Por eso, decide que si consigue tener a Siyeon así, como su falsa novia y su mejor amiga sin que ella sepa nunca de los sentimientos que la poseen, Bora estará satisfecha y feliz.

 ˢᵃᵛᵉ ʸᵒᵘʳ ˡᵒᵛᵉ  / 𝐬𝐮𝐚𝐲𝐞𝐨𝐧Where stories live. Discover now