Hyunjin estaba caminando por la calle para atender su asunto, pero al mirar de reojo por una tienda pudo ver a Felix con un chico que estaban riendo.
Su corazón sintió una presión, pero al mismo tiempo se mareo, cosa que atrajo la atención de los de adentro de la tienda, principalmente a Felix que salió inmediatamente a sostenerlo.
—Hyunjin, ¿Estas bien? —le preguntó preocupado.
—Si, estoy bien, Felix. —respondió inmediatamente y sostenido del violinista volvió a estabilizarse.
—¿Quieres que te acompañe a donde vas? —se ofreció, pero el de cabello negro inmediatamente se negó.
—Estaré bien, solo fue un mareo, vuelve con tu amigo. —le dijo.
—Si tu lo dices, más tarde iré a verte.
Hyunjin asintió y volvió a caminar hasta llegar a su destino. Para ser exactos al hospital.
—Bien joven Hwang, sus estudios revelan lo que temíamos, tu leucemia ya está en estado terminal, pero creo que eso ya lo sabías desde que te dijeron que tenías un año de vida.
—Si, doctor, pero últimamente me he sentido peor, creo que no cumpliré ese año. —le dijo cabizbajo.
—Lamento decirte que tienes razón, al empeorar tu caso, tu tiempo de vida también cambio, te quedan tres meses y según se en tres meses es tu exposición de arte.
—Si, pero creo que no podré estar presente para ver las reacciones de todos.
El recuerdo de la reacción de Felix le vino a la mente y su mirada se volvió triste.
—Te sugiero que aproveches para hacer lo que tengas estos tres meses y vive como nunca lo has hecho.
Hyunjin asintió y se despidió del doctor con una reverencia, mientras salía del Hospital pensó:
«Necesito arreglar todo antes de esos tres meses, pero Felix no puede enterarse.»
En la noche preparó todo para cuando llegará Felix que fue justamente media hora después de las siete como le había indicado la noche anterior.
Al abrir la puerta Felix lo abrazo.—¿Como estas? Me preocupe mucho después de verte en la tarde, incluso mi mejor amigo insistió en que te acompañara. —le confesó.
—¿Era tu mejor amigo? —preguntó sorprendido.
—Si, se llama Jisung, el toca el violonchelo. —le explicó.
—Ya veo, pensé que eran...
—¿Pareja? Si, eso piensan muchos, solo hablabamos de unas cosas, pero bien ya estoy aquí. —le cambió el tema con una sonrisa.
—Bueno, tengo un regalo para ti. —confeso para guiarlo al piso de arriba a otra habitación diferente de «su santuario».
Al abrir la puerta, en una repisa habían discos, cuadros con las noticias de algunos músicos y después una foto de Felix con su violín autografiada, pero lo mejor de todo un violín en una vitrina con un diseño que se podría decir único de Hyunjin.
—Wow, esto es... —Hizo una pausa para tocar la vitrina con delicadeza.
—Es tuyo, siempre quise dartelo, lo compre e hice el diseño para ti.
—¿En serio? —pregunto entusiasmado y Hyunjin se limitó a asentir.
—Por cierto, nunca te pregunte si tenías algún músico favorito o alguna sonata.
—La tengo, es Satie, mi sonata favorita de ese pianista es Gymnopédie No. 1, cada que la escucho me llena de inspiración, a veces me hubiera gustado que hubiera partituras de violín y escucharte tocarla.
—Espero algún día poder hacer esas partituras, me encantaría que la escucharas en violín.
Ambos se sonrieron, pero Hyunjin desvío la mirada y la puso en el violín.
—¿Por qué no tocas algo para estrenarlo? —le sugirió.
Felix asintió y tomó un pañuelo cualquiera para usarlo como barbada y lo colocó en el violín para ponerlo en su barbilla.
Comenzó a tocar una sonata Pachelbel Canon y su nombre es Stringspace, una sonata que práctico mucho antes de debutar, pero nunca la tocó para nadie.
Esos minutos parecieron el mismo cielo, donde había nadie más que ellos dos, Hyunjin escuchandolo y disfrutando del hermoso sonido mientras Felix tocaba con amor ese hermoso violín que el pintor había pintado para el.
Después de al rededor de unos cinco minutos, el rubio término y volvió a colocar el violín en la vitrina.
—Sería mejor que se quedara aquí en lo que se desgasta el mío, fue un lindo detalle, te lo agradezco. —le dijo y se acercó a Hyunjin para darle un beso en la mejilla.
El chico de cabello negro se sorprendió, pero aún así se sintió en el aire por haber recibido ese pequeño beso.
—¿Me acompañas a tomar un taxi? —le preguntó el violinista con una sonrisa y con el ligero tono de rosa en sus mejillas.
Hyunjin asintió y lo acompañó, rápidamente pasó el taxi, pero cuando el pintor vio que Felix iba a subir se dirigió a su puerta, sin embargo este lo llamó.
—Hyunjin.
El chico se giro para prestarle atención.
—Claro que entendí lo que quisiste decirme aquella noche, quiero decir que... tienes razón, tú, mi pintor me inmortalizaste sin que yo me diera cuenta.
Hyunjin sonrió y le lanzó un beso a Felix, esa acción fue devuelta.
—Hablaremos mañana.
Atentos con la canción favorita de Hyunjin, eso es algo importante.
Big Hug de parte de Chan ❤✨
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El Violinista Que Lloró
FanfictionEn medio de una gran presentación de violín para ese chico de la nada empezó a llorar y nadie sabía porque, los testigos detrás de sus lágrimas solo son el, su violín y un pintor