Capítulo 3 ⋆。°✩ ☾⋆。°✩

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- Pasajeros les informamos que tenemos que detenernos debido a que el carro está haciendo un extraño ruido, vamos a revisar de qué se trata y mientras tanto les pedimos que por favor permanezcan en sus asientos. – anunció el conductor sacándome de mi profundo sueño.

Cuando desperté sentí en mi hombro un peso extra, voltee a mirar de qué se trataba y me encontré con Luis dormido recargando su cabeza en mi, se miraba tan tierno que sentí como mi corazón latía más fuerte solo con verlo.

Empezó a abrir lentamente sus ojos y cuando me miró yo también lo estaba viendo. Justo a los ojos.

Se incorporo rápidamente.

-       Lo siento, no me di cuenta de que me quedé dormido - dijo con pena.

-       No te preocupes, yo hace poco que me acabo de despertar – dije sonriendo.

-       Pensé que no te habías dormido jaja, oye ¿Por qué nos detuvimos? – dijo frunciendo el ceño.

-       Según escuche, van a revisar un ruido que está haciendo el autobús, quizás  se poncho una llanta  – respondí.

-       Oooh vaya, cambiar una llanta de autobús debe requerir más de una persona – mencionó pensativo.

-       Supongo que si, por si requieren ayuda, acá hay un gay que puede apoyar – bromee.

Él soltó una carcajada – Bueno en realidad somos dos gays que pueden ayudar – dijo sonriendo.

Sentí como mi corazón saltaba de felicidad, el hecho de que lo haya dicho de alguna manera me permitió dejar de tener la duda en mi cabeza que no me permitía aceptar mis sentimientos. Era algo muy precipitado; lo sabía, pero no podía negar la atracción que sentía por él.

-       Wow ¿Tú también eres una oveja arcoíris? – dije con sorpresa.

-       Así es – dijo sonriendo.

-       Fantástico – mencione sonriendo de oreja a oreja.

Vi un segundo la pantalla de mi celular y era casi medianoche, todos los pasajeros alrededor estaban dormidos aunque el autobús seguía parado.

-       Pasajeros necesitamos que salgan del autobús debido a que una de las llantas se poncho y vamos a cambiarla lo más rápido que podamos pero por favor salgan de manera ordenada y no se alejen del autobús – dijo el conductor a través de las bocinas.

-       Parece que saldremos a explorar – dijo Luis mientras se levantaba de su asiento.

-       Así parece – dije siguiéndolo por el pasillo donde las personas estaban formadas para salir.

Al estar detrás de él pude observar que era más alto que yo quizá unos 15 centímetros y tomando en cuenta que según la última vez que me medí en el centro de salud; me dijeron que mi estatura era de 1.67 seguro el estaba entre los 1.75 o 1.80 cm, realmente alto.

Cuando finalmente logramos salir del autobús nos dirigimos a la orilla de la carretera, estábamos en un puente donde entre las montañas se podía mirar una luna llena que iluminaba todo el lugar.

Siempre quise conocer a alguien a estas horas de la noche, creo que es el momento en el que más sinceros somos con respecto a nosotros.

-       ¿Cómo se lo tomaron tus padres, lo de ser gay? – preguntó girando su cuerpo para quedar frente a frente.

-       Bueno la verdad es que se los dije cuando tenía 15 no hace mucho tiempo y fue complicado para mi por que me daba miedo el cómo ellos reaccionarían y fue raro, ósea se tomaron algo de tiempo en procesarlo pero durante esos momentos se acercaban a mi de una manera que se sentía sincera, eso me hizo sentirme amado y pues si la verdad es que me hubiera gustado que hubieran dicho que ya lo presentía, hubiera sido más fácil – dije con una sonrisa y un tono nostálgico al recordar esos momentos.

-       ¿Y cómo fue la reacción de tus papás? – pregunte.

-       No se lo esperaban, creo que siempre me vieron muy hétero jaja, pero en el momento en el que se los dije me expresaron su apoyo, se los dije cuando tenia como 16 creo y hasta el momento siguen estando siempre para mi y es algo que les agradezco demasiado – dijo mirando a la luna mientras sonreía.

-       ¿Entonces cuántos años tienes? - Pregunto mirándome.

-       En este momento tengo 17 pero este año cumplo 18 – respondí.

-       ¿Eso significa que naciste en el 2002? – dijo sorprendido

-       Así es, wow que rápido sacaste las cuentas – respondí.

-       Para nada; solo que este año yo igual cumplo 18 y eso significa que nacimos en el mismo año y somos de la misma edad – exclamó con emoción.

-       WOW de verdad que no me esperaba eso – dije realmente sorprendido.

Esto me dejó pensando durante algunos minutos en los que ambos nos quedamos en silencio observando la luna brillar. 

No me percate de que el me estaba viendo hasta que voltee a verlo y tenía su mirada fija en mi.

-       Tus pestañas son hermosas – dijo viéndome directamente a los ojos.

-        Emmm gracias – dije nervioso y estoy seguro de él noto que me sonroje.

-       Que lindo te miras con las mejillas rojitas – dijo sonriendo.

-       Ok ahora tengo mucha pena – mencione agachando la cabeza mientras me reía nerviosamente.

Él me tomó de la barbilla y me levanto la cara lentamente hasta que nuestras miradas se volvieron a encontrar. Podía escuchar su respiración a centímetros de mi.

Mi corazón palpitaba muy rápido en mi pecho, mis manos temblaban, el viento soplaba en su cabello y su mirada se posó en mis ojos. Parecía que él iba a decir algo cuando de pronto...

COINCIDENCIADonde viven las historias. Descúbrelo ahora