Son un sin fin de veces que la impotencia me carcome al pensar que ya te has ido.
Son innumerables las veces que quise arrancarte de las fotografías.
Gracias a ti conocí otro tipo de poesía, esa que va acompaña de un beat, una voz ronca y mucha rabia o raras veces alegría... La que trata de concienciar a la gente, enseñar a ser honesto y seguir; porque mañana será otro día.
