Terrenos

8 2 1
                                    

La charla con mamá no había sido tan intensa, solo quería saber los detalles sobre lo que había pasado y cómo había bajado la guardia, ella sabia que muchos señores mayores sentían mucho odio contra los Guirola por el pasado, pero no tanto como los pocos descendientes que quedaron de aquel que cargaban los apellidos de Hernández Martínez.

Suspiré porque al regresar a mi habitación me sentía más sola que nunca, saque el diario de cuero que traía en mi mochila lo único bueno del día es que estaba logrando mi objetivo de conseguir información acerca de los Hightower y Montecristo.

Al abrir el pequeño diario donde el olor a humedad y viejo llegaron a mi nariz, comencé a leer el contenido del diario donde eran pensamientos de aquella abuela o abuelo que lo tenía hasta que encontré una entrada interesada.

*año x día x mes x
Me acaba de llegar una carta de una familia que está siendo perseguida, pero no tengo tiempo para cubrir eso, se lo enviaré a mi hermana*

Termina la entrada, seguí leyendo hasta que continuó la secuencia.

*año x día x mes x
Mi hermana me conto que sus apellidos son unos de los más poderosos en Europa, en estos días iré a la casa principal donde se encuentra la familia principal*

Terminaba esa entrada, por varias páginas ya no salia nada acerca de esos apellidos hasta que al final de diario capto mi atención.

*año x día x mes x
Subestimamos a los Europeos, desaparecieron a varios de la familia en el occidente del país, logramos esconder algunos datos importantes pero no fue suficiente, no sabemos a dónde fueron y sobre todo que se llevaron con ellos, ellos no volverá a pasar por acá mientras no busquen lo que dejaron *

Terminaba en la última página del diario, como en la visión de la casa y esta página tenía que ir a la casa principal de las gárgolas, hablamos de una de las casas más importantes a nivel nacional por la historia que contiene y el turismo que atrae, no solia pisar ese lugar por la energía que se sentía lo que me hacía perder fuerzas, sentirme mal y aveces desmayarme.

-Mierda.... - susurre

Tome mi celular para distraerme un dato antes de dormir hasta que el mensaje de Justin y Nisa queriendo visitar mi pequeño país a lo cual accedí, ellos podrían ser de mucha ayuda en mi investigación. Ya era tarde así que decidí dormir un poco antes de que algo más pasara.

*Descansa* fue el último mensaje que leí de aquel número misterioso en el celular desechable.

Al dí siguiente revise el buzón de mensajes y ocasionalmente llegaban ese tipo de mensajes pero sin la opción de poder contestar, quería escuchar de él y poder oír de nuevo su voz, baje a desayunar como de costumbre pensando que estaría sola lo que ahora no fue así ya que todos estaban ahí.

-¿Me levante muy tarde? - pregunte extrañada

-No, la verdad que decidimos tomarnos días de descanso desde que te fuistes al internado - explico mamá - nos dimos cuenta que necesitabamos tiempo en familia y dejarte haya nos quitaba ese tiempo, así que ciertos días amanecemos acá para pasarla juntos - aclaro

Recuerdo que yo siempre hacía que por lo menos un día teníamos que cenar o almorzar juntos para hablar sobre la familia, al principio les molestaba que me entrometiera en sus agendas pero poco a poco fueron notado la mejoría de Kokomi y mía a la hora de convivir con ellos, creo que al yo irme al internado comenzaron a extrañar esas interacciones.

-¿Ya no tienes tan mal tu horario de sueño? - pregunto papá

-No, he logrado dormir más que los primeros días, al principio el Jet lag si me pego duro - aclare tomando mi desayuno - pero poco a poco voy mejorando - sonreí

TowerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora