Pareja Masoquista {+18}

Quiero estar contigo

Los meses habían transcurrido con suma rapidez, el omega pasaba encerrado en aquel hospital blanquecino donde pagaría su condena, afortunadamente su novio venia de vez en cuando a visitarlo y eso calmaba su miedo.

El omega solo esperaba la hora de almuerzo mientras miraba la ventana con rejas y almohadillas, a decir verdad, se sentía mucho mejor, ya no tenía tanta ansiedad o episodios de alucinaciones. Estar en el hospital psiquiátrico lo ayudo a reflexionar una que otras acciones.

— Sr. Kaminari es momento que salga y vaya al comedor. — aviso uno de los guardias. — tiene visitas.

— Si, ya voy. — dijo con una ligera sonrisa en el rostro.

Denki meses atrás había sido encarcelado y sentenciado por el juez a permanecer en aquel hospital hasta que los psiquiatras dieran su informe sobre la salud mental del rubio, por el momento todo iba bien. Incluso se atrevía a decir que tenía esa sensación de libertad otra vez.

El rubio se comenzó arreglar un poco el cabello y ropa para ir donde su visita, no tardo en salir de su habitación con una ligera emoción, camino entre los pasillos blancos hacia el comedor donde busco con la mirada a su alfa. Fue solo cuestión de segundos para encontrarlo pues la cabellera rojiza era fácil de distinguir.

Cuando conectaron miradas el más bajo fue corriendo hacia su alfa quien lo esperaba con los brazos abiertos esperando su abrazo, al momento de llegar hicieron aquella acción que duro varios segundos pegados aspirando las feromonas del otro.

— ¿Cómo has estado, mi rayito? — dijo con alegría.

— Super bien. — respondió con un tono relajado. — ya no tengo pesadillas ni alucinaciones.

Eso último susurro con algo de vergüenza, en todo el tiempo que había estado ahí metido pudo reflexionar lo sucedido con los niños de Katsuki, ahora en sus cinco sentidos realmente no sabía que le paso por la cabeza al intentar matar a unos bebes.

Gracias a los medicamentos que le daban podía mantener sus emociones estables, ya no se ponía ansioso o se fuera de sí, según los doctores le dijeron que fue una consecuencia de lo sucedido en la casa de Deku. La razón por la alteración de Denki fue por aquel trauma que se generó y en especial a Katsuki quien fue el que más daño le hizo al punto de dejarlo entre la vida y muerte.

Estuvieron abrazos por un tiempo más y luego se sentaron a platicar sobre su día, Eijiro estaba extremadamente feliz por la mejoría de su omega, muchas semanas atrás siempre veía a su rayo con los ojos rojos e hinchados, todo esto se debía a su separación repentina, usualmente las parejas alfa / omega no debían separarse si formaron un vínculo estable y fuerte pues ambos caerían en una depresión que podría matarlos.

Por esta razón el alfa siempre trataba en asistir a todos los horarios de visita que podía, no quería que su pareja tuviera más problemas.

— ¿Cómo te va en el trabajo? — pregunto Kaminari algo nervioso.

— Pues muy bien, lo mismo de siempre en la oficina. — dijo relajado.

— ¿Y ya te has encontrado a . . .? — se detuvo para suspirar y tomar valor. — ¿Todoroki? — susurró lo último con la mirada abajo.

— Si mi vida. — comento sabiendo donde quería llegar su omega. — todo está solucionado, tuve una plática con él y me dijo que todo estaba en orden.

— Me alegro, pero me gustaría pedirle disculpas a él personalmente. — jugo con sus dedos.

— Eso se solucionará más tarde. — atrajo al más bajo hacia él. — deja de pensar en eso.

Eijiro sabía que su omega estaba martillándose la cabeza en pedir disculpas y estaba bien que se arrepintiera, pero ahora necesitaba concentrarse en su recuperación para no volver a decaer.