The fifth mask (Michael Afton X Tn?)

Nuevo Hogar Y Amistades?

La familia Anderson había llegado a Utah cerca de las dos de la tarde y treinta minutos después habían llegado a su nuevo hogar.
Una hermosa casa de dos pisos, con un patio delantero cercado por una valla de madera (de estas que hay en las películas estado unidenses) de color blanco, la casa era de un color celeste grisáceo con detalles blancos en las puertas y ventanas mientras que los techos tenían una tonalidad gris ceniza oscuro.

La casa estaba en un vecindario cercano a un bosque que tenia unas colinas, casualmente la casa le daba la espalda al bosque, "quizás el patio este conectado al bosque" pensó el hijo mayor de la pareja viendo curioso la casa.

{La casa parecía estar ahí hace bastante tiempo por su estilo de construcción. Pero era bastante bonita diría que hasta encantadora como suele decir mi madre, era un poco más grande que nuestra anterior casa... El vecindario parecía tranquilo de igual forma, cerca de aquí vi una escuela es probable que esa sea mi próxima escuela. }

El joven andaba tan sumido en sus pensamientos que ni siquiera notó que los camiones de mudanza habían llegado. Así daría inicio a toda la movida de bajar los muebles y las miles de cajas, al cabo de una horas algunas cosas ya estaban en su sitio o solo las cajas al menos.

{Es probable que tardaremos en desarmar las cajas... El patio trasero es lindo y mi habitación o bueno la ventana da al bosque, además que se podría decir que puedo salir por mi ventana y llegar a patio o a una parte del techo que es como una habitación semi oculta, pero veré eso después, ya que mi madre me llamo para ir hasta el quiosco de la esquina a comprar pan, por suerte lo había visto de camino a casa}

El adolescente de cabello dorado caminaba rumbo a esa tiendita, aprovechaba para ver a su alrededor y memorizar algunas calles o en su defecto lugares.

{Había llegado a la tiendita y pedí el pan. En lo que esperaba a que me entregaran la bolsa un chico de tez oscura, cabello oscuro y con muchos rizos, remera azul, shorts algo gastados y una particular máscara de temática de pollo a una lado de su cabeza se paró detrás mío esperando su turno para ser atendido por el dependiente.
Note la mirada de aquel chico sobre mi, quizás solo me parecía, aunque antes de que pudiera pensar algo mas me entregaron la bolsa con pan, agradecí y me dispuse a irme, aunque cuando me estaba por ir mi mirada y la del otro chico chocaron, este solo me sonrió con amabilidad y yo le devolví la sonrisa para irme.}

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Habían pasado algunas horas, la nueva familia estaba acomodando todo en su casa, les tomaría una semanas o días pero lo lograrían.

{Como de costumbre discutía con Abbigail ya que ella había tomado mi almohada y decía que era la suya, es insoportable cuando se pone así.}

-Abbi dame mi almohada!
Dijo furioso el adolescente ya sin paciencia.

-Es mi almohada! yo la baje del auto! Contraataco la menor con la codiciada almohada en manos.

-No! esa es la mía-, tus almohadas tenían las fundas rojas! no las moradas. Insistió nuevamente con una mueca de desagrado y amargura.

-Ehh- bueno puede que si sea tu almohada en ese caso jejejeje.
Ríe nerviosa al recordar aquello pues sus almohadas llevaban unas fundas rojas.

-Te dije... Mensa-.
Dijo el adolescente estando de brazos cruzados por el lio que armaron.

-Bueeeno, pero donde están mis almohadas entonces?

-Y yo que voy a saber a-.
El chico fue interrumpido por unas voces en el primer piso.

{Ambos nos miramos y bajamos mas rápido que vecina chismosa al escuchar una pelea, llegando al primer piso vimos a nuestros padres en la puerta hablando con unas personas y nos asomamos. Al parecer una familia nos vino a dar la bienvenida al vecindario, pude notar que aquel chico que vi en la tiendita y que me había sonreído estaba junto a sus padres y una niño de no más de cuatro años.}

-Oh! y ellos son mis hijos, Fran mi mayor y Abbi ella es mi menor. Presentando la madre de la familia Anderson con una sonrisa.

-Ay! pero si son adorables! el es mi hijo Liam y el chiquitín de aquí es Zack. Señalo la mujer a su hijo mayor y menor.

-Un placer, quizás Fran y Liam puedan llevarse bien!
Dijo con alegría nuevamente la madre de Fran.

-Claro! de seguro que no tiene problema!.
Respondió de nuevo la mujer afroamericana.

{Mientras escuchaba todo yo y el otro chico que ahora sabía que se llamaba Liam nos mirábamos como si estuviéramos hablando mentalmente, daba algo de pena pues no quería que fuera mi amigo por obligación.
Pero el parecía simpático y muy amable, para cuando me di cuenta que fueron como unos veinte minutos de charla entre mi madre y la de Liam, la familia Collins se había ido, nos habían dejado unas flores en señal de bienvenida.
Finalmente busque mi mochila y mis cosas para empezar la escuela mañana, si bastante rápido pero a mis viejos no les gusta perder el tiempo.}

Así el chico siguió acomodando su nueva habitación hasta que encontró un polisón, Buhi un peluche de un búho que tenía desde que era un niño.

-Mmm? je pensé que te quedaste en California o que mamá te había regalado con los demás juguetes.
Le hablo al peluche teniéndolo en sus manos y revisándolo para después dejarlo en su cama, sentarse en el suelo revisando su mochila sin muchas energías y ánimos.

-Quien diría arrancare las clases a mitad del año en una escuela completamente nueva.
Dijo estando solo en su habitación, acostumbrado a hablar solo a veces.

Los pensamientos de si haría nuevos amigos o no lo invadían la incertidumbre lo ponía ansioso, quizás Liam era una buena opción para empezar a hacer amigos, había escuchado a la madre del chico decir que irían a la misma escuela cuando mi madre le comento que iríamos a la escuela que vimos de camino a la casa, así que quizás no seria tan difícil o es esperaba el chico.

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Pronto llego la noche, la familia de nuestro protagonista ya había cenado, ya estaban listos para dormir, todos menos uno de ellos que se encontraba tratando de dormirse.

{No hay caso! no puedo ni cerrar los ojos, esto empeiza a frustrarme, lo único que se me ocurrió fue levantarme y dirigirme a mi ventana para luego abrirla, asome mi cabeza viendo todo el exterior para luego salir y con cuidado agarrándome de las paredes externas y caminar por los techos hasta que llegue a ese espacio que era cómo una habitación externa, me senté ahí viendo las estrellas y la luna.
El silencio que había era glorioso, era como si no hubiera más, el poder respiras ando y sentir que nadie podía decirme nada en este momento era simplemente increíble. Ahora sabía que este pequeño espacio era sagrado, pensaaba en traer algunas cosas a este espacio para hacerlo más mío, estaba tan metido en lo que que podría poner para decorar que se me olvido que mañana tenia a clases!}

Al recordar eso el chico se levanto con cuidado volvió a su habitación para finalmente dormir.
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