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Axel Howlad:

«Mierda»

¿Axel? —Llamó.

«Doble mierda»

Bieen, nada podía ser peor que mi tía en casa. No es que la odie ni nada —Tal vez un poco— Solo que la última vez que estuvo aquí, quiso quitarnos todo lo que dejaron mis padres.

— ¿Uhm?, ¿Qué?...¿Qué haces aquí a esta hora? — Me atreví a preguntar.

— Quería venir a visitar.

— A las — Mire el reloj que siempre traía en mi muñeca — ¿Casi 6 de la mañana? No lo creo.

Se quedó unos minutos en silencio, seguramente pensando en alguna excusa.

— Me atrapaste — Suspiro — Vine porque me enteré lo de tus padres y quería hablar con mi madre.

— La última vez que "Hablaron" — Hice comillas con mis dedos — Terminaron en un posible desheredo de testamento.

Suspiró de nuevo y rebuscó algo en el bolsillo de la chaqueta de jean que traía puesta y sacó un trozo de papel doblado.

— Ten — Estiró su mano con el papel en ella para que lo recibiera — Dáselo a mi madre y dile que me llame apenas pueda.

— Le diré que estuviste aquí, adiós— Tome el papel y cerré la puerta sin darle tiempo siquiera de despedirse.

¿Quería curiosear el papel? Si y mucho, pero no podía porque sabía que este tipo de papelitos y mensajitos entre la tía Isabel y mi abuela eran una serie de palabras que solo ellas sabían que significaban, no era la primera vez que tía Isabel nos dejaba un pedazo de papel a mi o a mis hermanos para que lo entregaramos a mi abuela.

Eran casi las 6 de la mañana, decidí que hoy sería yo quien haría el desayuno así que subí a cambiarme la pijama para luego bajar a la cocina a ver si no quemaba la casa con todo y personas dentro.

Quería hacer waffles, tal vez eran fáciles de hacer.

Spoiler: No lo son.

Busque la receta y descubrí, que llevaba más cosas de las que tenía en casa pero tendría que improvisar y utilizar la receta que mi abuela siempre usaba, era más fácil.

Recordaba cada ingrediente: Huevos, harina, leche, mantequilla y escencia de vainilla. Me dispuse a buscar cada uno de ellos, no encontré la leche, bien lo haría con agua, seguro saldrían iguales.

Bueeh, no había resultado como quería pero al menos no se quemaron, conté cada uno de los platos revisando si estaban completos.

— Hades, Hera, Liam, Andrew, abuela y abuelo.

Espera, hablando de Andrew, no lo había visto desde el día anterior, ¿Se habría ido de fiesta? No, no lo creo, últimamente no salía casi, ¿Saldría sin que me diera cuenta? Si, si salió por la ventana, ¿Se quedó en casa de un amigo? No, primero avisaría. Bien, era hora de entrar en pánico porque uno de mis hermanos no estaba.

Me quite el delantal lo más rápido que pude y corrí hacia su habitación, quedaba justo al lado de la mía, casi al final del pasillo. Toque, ni una señal de vida, toque por segunda vez, nada, la tercera sería la vencida, de nuevo, nada.

Mi Nuevo Amor [En Proceso]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora