Estragos en el corazón
en una copa de vino
mientras nos desvestimos.
La luna es testigo
de nuestro dulce castigo
en clamores te contadigo
Huellas en la piel
tus roces en mi ser
olvidándonos de un ayer
Memorias alteradas
desvaneciendonos en madrugada
con un triste y lejano ser
Unos labios sin besar
mi castigo lo vivo ya
sin poderte siquiera abrazar