REPROCHE Y PENSAMIENTOS

222 20 28
                                    

Narración.
Después de una charla extensa con el Patriarca, Dohko, Syd y Marin tuvo que partir. Pero en una casa del Santuario había dos pequeños que llorando y abrazando a una señorita de la cintura pidiéndole al hombre entre lágrimas que no se fuera que dejan a la chica más tiempo con ellos.

Albafica: Buaaaaaaa ¡por favor deje más tiempo a la señorita Helena con nosotros! ¡Helena no te vayas por favor! ¡Helena! -decía mientras miraba a la chica con lagrimones escurriendo por sus mejillas- Shifff shiffff.

Helena: Albafica yo... -la dama intentaba consolar al pequeño acariciando su cabeza con cariño- no puedo quedarme.

Manigoldo: ¡por favor señor gatito verde no se la lleve! -hablo el pequeño poniéndose enfrente del guerrero de Hasgard-.

Syd: no puedo y no, no soy un gatito verde -dijo con paciencia- ella pertenece al reino de Hasgard mi deber es traerla a casa por órdenes de la señorita Hilda -explico el hombre-.

Albafica: ¡solo déjala un poco más colmillitos! -hablo escondiendo su rostro en el vestido de la chica humedeciendo el vestido- déjela un poco más... shifff shiffff solo eso shiff shifff.

Syd: ahg -suspiro pesado- ya dije que no se los puedo conceder ella tiene que venir conmigo -dijo acercándose a la chica de cabellos cafeces-.

Manigoldo: ¡Noooooo! -grito en llanto también abrazando a la chica, Helena en el poco tiempo que estuvo en el Santuario supo ganarse a los dos pequeños con juegos, platicas y su cariño- ¡Helena no te vayas!.

Entre llantos se asomaron unas terceras aletitas de color doradas, cabello rubio y un lunar cerca en el pómulo de su mejilla derecha se trataba de Afrodite quien buscaba a sus dos hermanos, la pequeña niña se acercó con curiosidad y miro la escena donde sus hermanos le gritan al guerrero "gatito malo" o "colmillitos malo" la pequeña se acercó a toda prisa a ellos.

Afrodite: ¡Manigoldo, Albafica! ¿Qué pasa hermanos? ¿Por qué lloran? -corría a hacia ellos-.

Albafica: ¡colmillitos se quiere llevar a Helena! ¡no nos la quiere dejar para jugar! -decía mirando a su hermanita mientras se limpiaba las lágrimas- no lo permitas Afrodite ¡detén a colmillitos!.

Syd: ya les dije no soy colmillitos me llamo Syd y Helena tiene que regresar a su hogar tiene hermanos y y y... ¿¡y yo porque rayos les estoy dando explicaciones!? -dijo- Señorita Helena tenemos que partir a Hasgard.

Helena: yo lose, pero... -miro a los semi tritoncitos que le suplicaban que se quedara- niños... -se agacho para limpiarle las lágrimas a Manigoldo con sus dedos pulgares- Manigoldo, Albafica y Afrodite vengan los tres ¿sí? -los pequeños se acercaron a ella- miren yo tengo a alguien más que dependen de mí y no solo eso para ellos yo soy mamá, papá y hermana ¿me entienden? También me necesitan pequeños.

Manigoldo: hmg...pero...yo.... Helena -dijo con un puchero mirando a la chica-.

Helena: Manigoldo tu tienes a papá y a mamá mis hermanos no, me necesitan.

Albafica: ¿pero? -intervino ganando la atención de ella-... eso quiere decir que jamás regresaras ¿verdad? -dijo con sus ojitos lagrimeando-.

Afrodite: Helena....mínimo escribirás cartas ¿no? ...pero... -se detuvo miro el suelo- no se leer ....

Helena: ¿hm? Hmjmjm no se preocupen yo apenas me estoy enseñando en algunas cosas, pero...prometo llevarles una cara y que Angelo o Afrodita se las lea ¿está bien?.

Manigoldo: hmg....pero... ¿ya no jugaremos a las atrapadas? -dijo desanimado-.

Albafica: ni tampoco a las escondidas ¿verdad? -dijo agachando su cabecita y sus aletitas de sus orejas-.

MI AMOR SECRETODonde viven las historias. Descúbrelo ahora