𔘓 ٪ ˖ 𝐆𝐀𝐌𝐄 ¿𝘼𝙂𝘼𝙄𝙉? ࣪ 𓂃𒄬 ࣪˖ spruan ۰

Solo la rendición es la salida.

"luego de que la otra mitad de uno se va,  el vacío en el corazón es irreparable"

Quackity avanzó lentamente hasta el cuerpo ya sin vida de Karl,  le tomó entre sus brazos mientras su llanto comenzaba a escucharse por todo el lugar las manos del castaño comenzaban a perder el calor,  el rostro de este perdía ese color rojizo que vivía en sus mejillas y los ojos de este perdían el brillo que amaba ver todas las mañanas... Karl estaba muerto y los brazos del azabache se bañaban en la sangre de este mientras en un fallido intento de despertarlo le tocaba el rostro.

– ¿amor?  - le corrió el cabello de su frente para poder verle mejor pero seguía en lo mismo,  la misma expresión sin sentimientos -

– por favor suelte al jugador 112, jugador 137 - habló un guardia a su espalda mientras otro empujaba su hombro para que soltara al chico -

– por favor... Sean un poco humanos,  acaban de matar a su novio frente el - habló Spreen con la voz entrecortada pero no lo suficiente para llorar... No lo haría -

– suelte al jugador 112 ahora - volvió a repetir con el tono aún más serio y apuntó sin pensarlo en la cabeza del azabache -

– no me interesa que me mates ahora mismo... No me interesa tu mierda de dinero ¡SI QUIERES MATAME AQUI MISMO Y RELLENA ESA MIERDA CON MÁS DINERO!  NO ME INTERÉS..

el gatillo sonó dejando impactado al azabache mientras los demás se sobresaltado, el arma no disparo pero se pudo escuchar la risa descarada del guardia.

– a la próxima estas muerto de verdad.

Juan corrió en dirección del chico y le tomó de la mano para alejarlo de allí,  tal cual se llevaron a Rivers tomaron el cuerpo de Karl lentamente para dejarlo en la caja y llevárselo.

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Lentamente los llevaron a todos de vuelta a la sala de camas,  cada vez eran menos y más camas desocupadas,  Quackity levantó la mirada para ver la pantalla y ver como el nombre de su pareja estaba en rojo y como el monto de dinero crecía,  sus manos se empuñaron de solo rabia y golpeo con fuerza lo primero que se encontró en su camino callendo de rodillas al suelo mientras sus lágrimas caían lentamente por su mejilla.

Juan al ver el estado del chico corrió rápidamente a él y le abrazo siendo correspondido rápidamente por el contrario,  sus manos acariciaron la espalda de este mientras dejaba que se desahogue.

Spreen solo les miro,  entendiendo el dolor de este mientras su mano acariciaba la espalda de Carre quien se encontraba aún shockeaedo,  sin creer que Karl ya no estaba entre ellos.

– esto es la mierda más grande que puede existir ¿que quieren esos tipos ¿somos una clase de circo en la cual enfermos con dinero pagaron para vernos morir?  - escucho a Carre después de tanto... No tenía respuesta a su pregunta pero de igual forma no sonaba tan estúpida. -