1

143 16 2
                                    

JaeMin POV':

Desde que tengo uso de razón me ha gustado el ballet, mi mamá fue una antigua bailarina y quiso que siguiera sus pasos desde muy pequeño. La relación de mis padres es un poco complicada, ambos tienen ideas diferentes, mi papá desea que tenga más experiencias mientras que mamá quiere que solo me concentre en el ballet.

Soy un bailarín de renombre, la fama llegó a la misma edad que le llegó a mi mamá o tal vez un poco antes, he granado varias medallas de oro, plata, cobre, pero jamás la copa final de la competencia internacional.

Este año tengo que ganarlo si o si, mamá se ha decepcionado de mí por no poder hacerlo, esta es mi última oportunidad ya que pronto el próximo año cumpliré 18 y la competencia se hace cada cuatro años, si tienes más de esa edad ya no puedes concursar.

En todos mis 17 años de vida solo tuve dos amigos, Chenle y DongHyuck, dividiéndome entre la escuela y mis prácticas no tuve el tiempo de poder hacer más amigos y me sorprende que Chenle no me haya dejado.

No menciono a DongHyuck porque huyó del país con su novio, DongHyuck era un gran bailarín, íbamos a la misma academia de pequeños, sus padres siempre lo presionaban al igual que la mía que cuando conoció a MinHyung ambos decidieron irse.

Nunca más volví a tener conversación con él, había desapareció de las redes y había cambiado su número, sus padres nunca hicieron algo al respecto ya que tomaron la huida de DongHyuck como una falta de respeto y lo echaron de su vida para siempre.

Sea donde sea que esté, tengo la esperanza que está feliz, no conocí a MinHyung del todo, solo algunas veces intercambiábamos palabras, pero se notaba que quería a mi amigo. Solo espero que todo haya resultado bien como para que valga la huida.

Por otro lado, Chenle es diferente, nos conocimos cuando tenía 8 años, él estaba bailando en medio de la calle junto a su primo solo por mera diversión y yo me detuve a verlo.

Le pregunté por el baile ya que no lo conocía, él me dijo que se llamaba salsa y que su primo —con el que estaba bailando— era bailarín de ese género y le estaba enseñando.

Desde ese día somos inseparables, yo a veces le intentaba enseñar ballet mientras que él intentaba enseñarme salsa aunque no terminaba muy bien ya que nuestros pies estaban acostumbrados en otro tipo de género.

—JaeMin pásame la sarsa, por favor.

Le pase la sarsa a mi papá, mi mamá me miraba desde su lado de la mesa, no sabía a qué se debía su mirada.

—Deja de mirar al niño.

—Mamá, papá, voy a salir más tarde.

—¿A dónde vas? ¿Irás con tu amiguito ese? —habló ella.

—Tenemos un trabajo de la escuela, es el 80 por ciento de la calificación.

—Sabes que no me gusta que te juntes con ese niño, no es buena influencia para ti.

—Deja que JaeMin elija a sus amigos, Mina, no hay nada de malo que ande con Lele, él también me cae bien a mí.

—No me digas que hacer con la educación de mi hijo —ambos estaban teniendo una competencia de miradas, solo pude permanecer en silencio—. Ese chico es totalmente diferente a JaeMin, JaeMin es delicado, hace ballet por eso, en cambio el otro baila una cosa que ni siquiera tiene sentido.

—La salsa es un baile muy bonito, pero claro, doña elegancia solo tiene en mente el ballet por su sueño frustrado.

Habían dos razones por la cual mi mamá es dura conmigo, la primera es que cuando salió embarazada estaba en el alto de la fama por lo que cuando se enteró de la noticia tuvo que dejar todo para cuidarme, la segunda es que no nací mujer, ella quería una mujercita para que pueda ser como ella, pero en cambio nací yo.

under the skin.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora