Clair de Lune || Larry Stylinson

8. Heridas sin sanar

"Los amigos que hacemos, el amor que invertimos ¿Vale la pena? ¿Vale la pena el dolor?"

(All This Time, Louis Tomlinson)

En medio de la cafetería de la universidad Louis acababa de escupir toda su agua a causa de la risa.

—¡Gané! —exclamó Jane mientras Louis estaba rojo de tanto reír.

—¡Louis! Me escupiste en toda mi camiseta nueva —le reclamó Niall mientras intentaba secarse con un par de servilletas.

Louis, Jane, Niall, Zayn y Harry estaban jugando a quien reía primero. Uno de ellos hacía caras graciosas mientras que el otro, con la boca llena de agua, intentaba no reír.

Últimamente Louis empezaba a pasar más tiempo con los amigos de Harry. Se sentaban juntos en el almuerzo o salían de vez en cuando. Al ojiazul le gustaba, los consideraba realmente divertidos. Pasaba más tiempo especialmente con Jane, ya que ambos estudiaban lo mismo y compartían muchas asignaturas juntos.

—Chicos, mañana los quiero temprano en mi casa para que me ayuden con las decoraciones —dijo Jane mientras guardaba sus libros en su maleta.

Sería su cumpleaños el fin de semana y Jane quería organizar la fiesta más grande del siglo. Todos los chicos se habían ofrecido a ayudarla con los preparativos. Jane parecía estar tan emocionada que no paraba de hablar sobre los detalles de la fiesta con Louis en cada clase que coincidían. Hasta Louis ya podía decir que sabía de memoria el itinerario completo.

Después de unos minutos cada uno se dirigió a su siguiente clase, menos Louis y Harry, los cuales tenían la siguiente hora libre.

—¿Qué te parece si vamos por un helado? —propuso Harry. Últimamente el rizado no paraba de invitarle a Louis a salir. Literalmente ponía cualquier excusa para llevarlo a diferentes lugares. El ojiazul no se quejaba, le gustaba mucho pasar tiempo con él.

—Desde hace días quiero un chocomenta...

—¡Louis! —se escuchó una voz a lo lejos que lo interrumpió.

El nombrado dio la vuelta y vio como un rostro familiar se acercaba hacia su mesa.

Un chico de ojos miel y cabello marrón perfectamente ordenado. Era Liam.

Louis le dedicó una sonrisa, pero Harry parecía que quería matarlo con la mirada.

—¡Tommo! Te busqué por toda la biblioteca, pensé que haríamos el proyecto hoy —dijo Liam.

—Lo había olvidado por completo —Louis recogió todas sus cosas y las metió en su mochila. Miró a Harry un poco apenado —Tenemos este proyecto para la próxima semana y...

—No pasa nada, otro día podemos salir —le interrumpió Harry.

Louis, un poco aliviado, tomó todas sus cosas y salió de la cafetería junto con Liam sin antes despedirse de Harry.

—¡Nos vemos en casa de Taylor! —fue lo último que dijo el ojiazul para luego desaparecer por la enorme puerta.

Harry se quedó sentado por un largo rato en su lugar, pensando.

<<¿Le dijo Tommo? ¿Qué mierda es eso?>>

Últimamente Harry había visto muchas veces a Louis junto con Liam. Parecían llevarse muy bien, demasiado bien para su gusto. No iba a mentir que le molestaba un poco ver como su amigo castaño pasaba mucho tiempo con otra persona. Harry no era de esos amigos que les gustaba acaparar a alguien solo para el mismo, nunca había sido así. Pero con Louis...