III

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Por parte de Sunan...

7:35pm
Acababa de llegar a su casa después de esa charla con las personas que acababa de conocer, y no de muy buena manera.

Sin embargo por otra parte, estaba un tanto incomodo e intrigado por Opp y la pequeña charla que ocurrió luego.

*Flashback*

—Opp ¿cierto?, enserio lamento muchísimo lo que pasó con tu mamá, debo poner más atención mientras camino.

Sunan a pesar de verse malote, tener una cara de culo, estilo de vestir un poco intimidante y sobre todo una tonalidad de voz grave. Le causaba una gran incomodidad que por culpa suya una señora se haya caído, aunque fué un accidente pero si él no hubiese estado distraído en una vía pública nada de esto hubiera pasado.

—!Ya basta Opp!—exclamó la madre del chico.- Tú no eres así de serio, mira como estas haciendo sufrir al pobre chico, por amor a Dios Opp Phasuk ni siquiera puedes aguantar la risa.

Sunan estaba confundido, y bastante.
La cara de Opp molesto, parecía tan convincente que le pidió disculpas hasta por los poros, aunque su cara no expresó tanta confusión, el chico bromista le explicó.

—Mira Sunan, al principio si me moleste bastante, porque no es normal que tu madre te llame y te diga, estoy en el hospital porque alguien me empujó por accidente. Ven a buscarme—Dijo imitando la voz de su madre a la perfección.

Jaidee mientras veía a su hijo explicarle a Sunan que era una broma para hacerlo pagar por empujarla por accidente.
Se estaba preguntando el ¿por qué? no había tomado mejor un taxi, para ahorrarse la verguenza.

—Por eso.—dijo Opp.—Te jugué esta pequeña broma, eres un desconocido, pero eso no impide el hecho de que era mi única opción de hacerte pagar—Dijo con una sonrisa ladina nerviosa.

—Que idiota que es.—Sunan pensó—Pero hay algo en el que me intriga.

—No se preocupe Opp, me lo merecía—Dijo en un tono neutral.—Para compensar mi error, los invitaré a ambos por un café. Si gustan claro.

Opp aceptó enseguida, ahora la madre del mismo tardó un poco en la respuesta, pero aceptó de todas formas

—Intercambiemos números, para decirles que día podemos ir por uno, ya me tengo que ir—Sunan quería ver cual era esa intriga que el chico de estatura promedio le otorgaba, así que que mejor excusa que esa.—Señora Jaidee, cuídese mucho. Joven Opp cuídala, espere mi llamado señora Jaidee—dijo con una mini sonrisa, y partió de camino a su casa...
*Fin del flashback*

—¿Porqué, es tan raro? Y ¿porqué pienso tanto en eso?—Decía mientras se preparaba para darse un baño.

Para Sunan no era normal, ya que el pensaba mayormente en trabajo, Arthit, y más trabajo, y que llegue un chico de repente, con bromas de mal gusto a su vida no era muy común de ver en el círculo de "amistades" de Sunan, aunque pensó.

—Solo es un café, no es como si le estuviera confesando algo, o que empiece a salir con él, solo lo hago por la señora Jaidee. Además sería la última vez de escuchar esas bromas tan miserables.

En el momento que iba a entrar a el cuarto de baño, el sonido de su teléfono lo detiene, ve en la parte superior el nombre de la persona que lo llamaba.

Al ver el nombre de Arthit su expresión de seriedad, paso a una más serena.

En la llamanda

—SUNAN!, ¿ESTAS BIEN?, ¿DÓNDE ESTAS?, ¿LA SEÑORA ESTA BIEN? ¿TU ESTAS BIEN?, ¿YA COMISTE?.¿Sabes que?. No me digas nada, IRE PARA TU CASA AHORA. ¿Estás en tu casa verdad?. SUNAN CONTESTAME! ¡¿ESTAS EN TU CASA?!—Si, acá tenemos a un Arthit que se siente culpable por no llamarlo antes, y muy preocupado al mismo tiempo.

—ARTHIT, CÁLMATE, te pareces a mi mamá o bueno, ella ya ni me llama. Si, estoy ¡MUUY BIEN!. Gracias por llamar como 6 horas después hablo en un tono sarcástico.

—Sunan ya me siento mal por eso. ¡Y ME LO REPITES!, ya mismo voy a llevarte de comer, deja la puerta abierta—Dice Arthit preocupado y un poco molesto por más "bromitas"de Sunan.

A el castaño no le dio ni tiempo de contestarle, ya Arthit había cortado la llamada.

—Putas, ¡SI VIENE ENSERIO!.

Sunan como pudo se baño lo más rápido que pudo, no tardó ni 10 minutos en el baño, y por primera vez después de tanto tiempo era tiempo de ponerse la pijama.

Él era de esas personas que no les gusta dormir con prendas y lo único que Sunan usaba para dormir era la ropa interior, a la hora de abrir su clóset para buscar la prenda, no la encontró.

—Que raro—pensó, pero luego recordó que la única pijama que tenía se la regaló a el mismísimo Arthit.

—Estoy Jodido—fue la única palabra que el pudo formular ante la situación.

Y dirán, pero porque no se coloca otra prenda y ya, ¡Ja! como si eso fuera posible.
Por una tubería rota cerca de su casa, no tenían agua las demás urbanizaciones, entre ellas se encontraba la de Sunan, así que toda la ropa estaba sucia, y el agua había llegado justamente cuando el estaba en el hospital.
Que suerte ¿no?.

Mientras el individuo sufre buscando que ponerse para no recibir a Arthit en toalla

El azabache estaba pagando por la barbacoa que le estaba comprando a el castaño para pedirle disculpas, además Arthit sabe que a Sunan le encanta el cerdo a la barbacoa, Suttaya decidió irse caminando para pensar como le diría a Sunan que encontró a alguien lindo, pero sobre todo, como le explicaría que un perro lo noqueó completamente.

—Aún me duele el trasero—Pensó en voz alta, y unas chicas que iban pasando lo miraron malísimo Arthit aunque no las conocía si se sintió un poco avergonzado, y en su cara ligeramente roja se notó...

Pasaron aproximadamente 10 minutos de caminata, Arthit ya estaba al frente de la puerta de Sunan.

Y como tenían ya más de 4 años conociéndose Arthit paso con confianza sin tocar la puerta.

—Sunan, llegué. Estoy en la cocina—dijo en voz alta para que el castaño lo pudiera escuchar.

—Ya bajo, pero ash—¿enserio tengo que bajar?—pensó—Por favor, dime que vienes solo.—dijo Sunan con un tono de voz avergonzado.

—Ay por favor Sunan, por que tantos peros—dijo Arthit subiendo las escaleras que conducían al cuarto de Sunan.—¿qué estas escondiendo?— dijo pícaro.—No me digas que interrumpí algo.

Arthit abrió la puerta del cuarto de Sunan y lo único que salió de su boca fué

—No puede ser...—dijo asombrado.

El Eclipse Que Nos Une...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora