El Eclipse Que Nos Une...

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Estaban viendo el primer capítulo y Arthit quedó encantado con la propuesta que me hizo Leo a Fiat los protagonistas de Don't say no, pensó que la idea de los balones de básquet le daba un toque único y se lo manifestó a Sunan.

Sunan al por eso miles de ideas vinieron a su cabeza del como podría confesarle su amor, pero luego se acordó que ya Arthit era algo casi imposible de tener...

Era como su soulmate, solamente que el destino según Sunan ha sido cruel en no juntarlos.

Seguían observando y en una escena Arthit dice...

—Sunan, ¿por qué hemos tenido tanta mala suerte en el amor?—pregunta Arthit mientras come un bocado de su pizza.

—La verdad, no tengo ni idea, tal vez a las personas no les gusta mi carácter, pero no lo cambiaré—dice mientras lo mira, con esos ojos tan profundos que gritan el amor que siente Sunan por Arthit.

—Tu carácter me gusta—responde Arthit—eres muy serio en tus cosas y no das problemas. Suertuda la persona que este contigo...

Sunan al oír eso se ruborizó un poco, ya que no era muy común que Arthit elogiará su comportamiento, siempre se queja en broma pero Sunan algunas veces se lo toma enserio es El ENOJON según Arthit

Y si, efectivamente si lo es...

Luego de casi una hora ya casi acaba el capítulo ya escena se torna un poco rara...

—Sunan, pero, ¡¿QUÉ ESTA HACIENDO FIAT?!—dice Arthit mientras observa con una cara completamente sonrojada.

—Arthit Vamos por aire fresco ¿si?—Dice Sunan  nervioso  mientras tomaba un poco de agua tratando de ignorar la escena.

—¡SI!. Vamos—dice Arthit mientras se levanta de el sofá con una gran rapidez dirigiéndose hacia la puerta principal.

Salen ambos de la casa, y deciden caminar por la toda la urbanización, había mucho frio y el único que se había abrigado era Sunan, obviamente Arthit tenía frío pero no lo demostró...

—JA —se escapó una risa por parte de Arthit—Debiste ver tu cara toda roja JAJAJA—dice mientras se ríe a carcajadas...

Sunan sonríe y dice—La tuya no estaba muy normal que digamos. Aceptaste la salida como si fuera la última que tendríamos jajaja—ríe.

—Ay si, burlate, pero el de la idea de verla fue tuya —dice Arthit mientras mira a Sunan a la cara con una sonrisa.

Sunan notó que la nariz de Arthit estaba roja y eso era por el frío así que, rápidamente se quitó su chaqueta y se la colocó a Arthit.

—Que caballeroso de su parte señor Napat—Bromea Arthit.

—Ya no te burles—dijo Sunan mientras le daba un pequeño golpe en la cabeza.

—Auch, Sunan eso se dolió más que verte con esa pijama rosa —dice Arthit para proceder a correr.

Sunan iba detrás de él y podía ver la luz de la hermosa luna, impactar sobre Arthit, una escena que jamás borrará.

Los árboles de sauce y cerezo sakura estaban por todo el lugar y hacía que la vista encajara perfectamente en el momento que ambos vivían.

El ambiente divertido y de risas se transformó en pláticas un poco más serias.

—Sunan, recuerdas a ¿mi madre?—menciona Arthit mientras ve las hojas del sauce caer.

—Como olvidarme de ella...—responde Sunan.

Ya Sunan sabía porque Arthit había cambiado de humor tan repentinamente.

—Mañana se cumplirán 2 años de su muerte, y aún me duele que ella nunca me aceptó.—Unas pequeñas gotas empiezan a desplegarse sobre el rostro de Arthit.—Ella nunca me quiso desde pequeño, y murió odiandome, debería de no estar así, pero—No había culminado la frase cuando ya Sunan lo había abrazado...

—Llora. Estaré contigo. Yo si te amo—Dice Sunan mientras una lágrima sale de sus ojos y cae por su mejilla hasta perderse en el cabello de Arthit...

Arthit al oír eso, miro a Sunan uno segundos a sus ojos y se acurruco entre su pecho a desahogar todo lo que sentía.

Claramente a Sunan le dolía ver a Arthit así pero era el único apoyo que podía darle, estar ahí para él y más en este momento.

La mentalidad de Castaño no cambiaba, "La madre de Arthit era y será un asco de persona, ni siquiera se disculpó por sus acciones"...

El llanto de Arthit era como punzadas para el pecho de Sunan, odiaba verlo sumido en sus malos sentimientos, pero era algo que no podía evitarlo así como así.

—¡Quisiera dejar de sentir! ¡Dejar de tener esto!, pero es imposible—dice llorando—¡MI MADRE JAMAS ME AMÓ SUNAN!...

Sunan entendía perfectamente ese sentimiento, ya que la relación con su madre no era la mejor que digamos...

Así duraron aproximadamente dos horas, Arthit tenía sus ojos hinchados,
Y con esos ojos miró con un sentimiento inexplicable a Sunan, era un sentimiento de nostalgia, con agradecimiento y amor...

Tus ojos, tus ojos son una especie de galaxia la cual quiero descifrar, para poder ayudarte por completo, quiero ser tu refugio Arthit...

—Arthit—dijo Sunan sin despegar la mirada de los ojos de Arthit—vamos a casa...

Arthit sin decir una palabra asintió y ambos se fueron,estaban en un silencio acogedor, aunque el momento no era bonito, no se sentía incómodo los dos estaban caminando viendo los cerezos y Arthit antes de entrar a la casa decide romper ese silencio.

—Gracias... Por todo,—suspira—algunas veces siento que no te merezco
Sunan.

—No tienes por qué agradecerme, estaré contigo en las buenas y en las malas Thiti—dice con una sonrisa no tan pronunciada.

Arthit al escuchar su antiguo apodo sonrie nostálgico y dice

—Lo sé sunny, lo sé...—dice mientras lo abraza nuevamente.

—Entremos, te prepararé tu te favorito—dice Sunan.

—Vale, entremos, además ya tengo un poco más de frío tu debes estar peor ya que me diste tu chaqueta—dice un poco apenado.

Sunan solo sonríe y ambos entran a la casa, Arthit se sentó en la sala mientras esperaba a Sunan y el té.

A los pocos minutos ya estaban juntos en la sala tomando su te de manzanilla y hablando de cosas clandestinas...

—Sunan, ¿me acompañarías mañana a visitar a mamá?.—Arthit pregunta mientras pasa su dedo sobre la taza.

—Sabes que nunca te dejaré solo—fue lo único que contestó Sunan.

Al oír esto Arthit sintió un escalofrío pero no le dio mucha importancia ya que pensaba que era el frío...