I N C E N D I O
Un pequeño accidente, ocasionado por un pequeño animal.
O tal vez por la torpeza que cargaba.
Claro, me golpearía mentalmente a mi misma al recordar.||POV (____)||
Al siguiente dia, al rededor de las dos de la tarde, me dirigí a la mansión mariposa, pues quería echar un vistazo a la herida de mi pierna para poder curarla con mejor atención.
Me encontraba caminando en mejor estado, ya no cojeaba ni me quejaba debido al dolor de mi pierna, pero aun así quería atenderla.Cuando llegué a la finca, pude notar que no había absolutamente nadie.
Todas las habitaciones estaban vacías, ni si quiera había algún cazador de rango bajo.─Probablemente estén comiendo─ pensé.
Entré en una de las habitaciones para buscar algún botiquín y vendas para mi herida, y cuando lo hice, pude distinguir una figura más.
Mi gran amigo Inosuke.
Sonreí al reconocerlo, lo había extrañado, pues últimamente estaba un poco ocupada y no había tenido tanto tiempo para convivir con mis amigos.
─Hola cabeza de cerdo─ saludé, llamando la atención del menor.
Inosuke, quien se encontraba de espaldas, se volteó para mirarme. ─Niña tonta ¿dónde has estado?─ preguntó él.
─He tenido algunas ocupaciones─ respondí.
Miré por un momento a Inosuke, dándome cuenta de que tenía unos cuantos pequeños cortes en la parte de su abdomen y en sus brazos, probablemente son los resultados de que estuvo entrenando durante un largo rato y decidí preguntarle aquello.
─¿Así que estuviste entrenando, eh?─ dije.
Inosuke sonrió ampliamente. ─¡Claro! ¡Alguien tan fuerte como yo necesita entrenar!─ dijo con vanidad.
Sonreí una vez más. ─Me gustaría probar tu fuerza en una batalla─ respondí.
─¡Te ganaré!─ contestó Inosuke mientras cerraba su puño de una forma que demostraba seguridad de sí mismo. ─Solo espera y verás, ¡El gran rey de la montaña te ganara!─ dijo con una sonrisa.
No pude evitar reír. ─De acuerdo, de acuerdo, eso lo veremos luego─ contesté.
─¿De qué te ríes, tonta?─ preguntó Inosuke.
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𝐀𝐃𝐕𝐄𝐍𝐓𝐔𝐑𝐄 | Muzan
AdventureEl 𝐀𝐌𝐎𝐑 fue creado para las personas valientes. Porque debes tener valentía para aprender a luchar no solo contra tus propios demonios, sino también contra los de la persona a la que amas, especialmente cuando esa persona es, literalmente, uno...