El Poder de Suna.
Gracias a la información que recibieron sobre Akatsuki, las cinco grandes aldeas, se pusieron en el trabajo de localizar a los Jinchūrikis, mandando espías a todo el continente, teniendo pronto, la información de ocho de los nueve Jinchūrikis.
—Es extraño... pero tras el fallecimiento del Mizukage en la guerra pasada, nadie supo sobre su Bijū: el Sanbi. Nii Yugito como Jinchūriki del Nibi, ella y Killer Bee como Jinchūriki del Hachibi, ambos están en Kumo; Roshi y Han son los Jinchūrikis del Yonbi y Gobi, están en Iwa; Utakata es el Jinchūriki del Rokubi, ha vuelto a Kiri; Fū es la Jinchūriki del Nanabi, pero está desaparecida, y yo, Sabaku no Gaara, como Jinchūriki del Ichibi.
— ¿No eran los hijos del Yondaime Hokage, los Jinchūrikis del Kyūbi? —preguntó el consejero Yura.
—No —dijo Ebisu —Al parecer, el Yondaime le otorgó el alma y consciencia a su hijo Namikaze Naruto, el Chakra a su hija Karin y el Yōki a su hijo Kaito. Tras un entrenamiento de 13 años, Kaito murió, cuando el Yōki quemó sus Tenketsu. Sin el alma para producir más Chakra, Karin perdió ese Chakra demoniaco y ahora no cuenta con las vastas reservas de Chakra de su clan. Naruto murió por 24 horas, perdiendo así el alma del Kyūbi, él sobrevivió y ahora es uno de los más poderosos Jōnnin de Konoha.
—Entonces, podemos concluir en que Konoha no tiene un Bijū —dijo Yura, quien ya estaba pensando en informar de esto a su maestro Itachi.
—Además —dijo Chijō —Al parecer, Fū fue arrinconada por los Akatsuki... es probable que ella tampoco tenga a su Bijū, ni sabemos dónde está.
— ¿La Jinchūriki de Taki solo desapareció? —se preguntó Yura —Madara-Sama, dijo que la Jinchūriki había desaparecido, tras un ataque de Hidan y Kakuzu, pero que ellos también han desaparecido... ¿realmente, alguno de los tres implicados en ese combate, utilizó un Jutsu suicida, llevándose a los otros dos consigo al infierno?
Esa misma noche, Sabaku no Gaara, tuvo una corta conversación con Ichibi y decidió salir a recorrer la aldea. Bijū y Jinchūriki conversaban sobre formas de proteger la aldea, de los enemigos. Pero no encontraban nada muy viable, excepto quizás...
— ¿Y a quien podríamos ofrecerle a Konoha? —preguntó Gaara.
— ¿Temari-Chan? —dijo una voz femenina dentro de la mente de Gaara, provocándole asombro y haciéndole girar, a buscar la voz —Estoy en tu mente, Gaara-Chan, haciéndole compañía a Ichibi-San.
Gaara no necesitó, que la dueña de la voz femenina se presentara, sabía quien era. —Okasan, ¿desde siempre tú...?
—Así es, cariño. Yo fui la anterior Jinchūriki, pero cuando naciste, me enteré de que tu Otosan deseaba usarte como Jinchūriki, empleé un Fūinjutsu de mi conocimiento, sellando mi mente en ti, luego Ichibi fue sellada en ti, pero su segundo Jinchūriki, poseyó a Ichibi-Chan y llevo estos últimos dieciséis años, deshaciéndome de ese sujeto. —Gaara había escuchado de Temari y Kankuro, cuan grandiosa Kunoichi era su madre, pero esto era...
La arena salió de la calabaza, infectó la arena del desierto, Gaara realizó sellos de manos, al conocer el Jutsu que intentaba usar Ichibi y su madre— ¡Fūton: Kūsa Bōheki no Jutsu! (E. Viento: Jutsu Protección del Cielo Pared de Arena) —la arena se levantó del suelo del desierto y formó un amplio techo, que resistió las explosiones.
—Desgraciados —pensó con enfado la rubia Nukennin de Iwagakure.
Junto a Gaara, apareció su hermano Kankuro con su marioneta Karasu, pero ante ellos, apareció un segundo Akatsuki, uno de cabello rojo y ojos castaños, el cual no se ocultaba en su marioneta, sino que parecía dispuesto a usarla.
— ¿Usará a Hiruko? —se preguntó Kankuro, un poco nervioso. Entre los marionetistas de Sunagakure, la marioneta Hiruko era legendaria, pues nadie sabía a ciencia cierta, cuantas armas le había otorgado Akasuna no Sasori, el cual estaba detrás de la misma.
— ¿Comenzamos? —preguntó Sasori sonriente.
Hiruko atacó con Senbons desde su boca, lo mismo hizo Karasu. Pero Kankuro aplaudió, mientras que las Senbon en el suelo brillaban en un tono amarillo y luego rojo.
— ¡Sasori! —le llamó Deidara preocupada, por su compañero, ya sabía qué esperar del brillo.
— ¡Sabaku Fuyū! (Suspensión del Desierto) —exclamó Gaara, alzando del suelo a sus ninjas, mientras que Sasori e Hiruko explotaban.
Una explosión ocurrió, donde estaba parado Sasori, los trozos de Hiruko volaron en el aire.
—Desgraciados —pensó Deidara, para luego ver a Sasori maltrecho retroceder, no estaba ileso. —Maldita sea, ¿acaso estaban esperando este ataque?, ahora... ahora saben que es una marioneta humana. ¿Cómo lograron el truco ese de las Senbon explosivas?, ¿Quiénes les advirtió que los atacaríamos? —Por andar pensando en otras cosas, no se dio cuenta de los tres escuadrones en tierra y listos para el ataque.
— ¡Fūton: Kazekiri/Shinkū Renpa no Jutsu! (E. Viento: Jutsu Viento Cortante/Serie de Olas del Vacío) —dos poderosos Jutsus de Fūton, directamente del escuadrón de abanico, que causaron que muchos de sus explosivos de arcilla de C-1, salieran volando hacía Deidara y explotaran, mandándola a volar.
— ¿Cómo han hecho que mis propios Bakuton no Jutsu, exploten sobre mí? —se preguntó furiosa.
Sasori, a pesar de estar maltrecho, empleó la marioneta del Sandaime Kazekage, y comenzó realizar sellos de manos, dejando casi todo su Chakra en ese último ataque— ¡Satetsu Kesshū: Gosunkugi! (Arena de Hierro Recolección de Asalto: Clavo de Cinco Soles) —cientos de clavos de arena de hierro, salieron hacía los Shinobis de Suna.
Pero un ANBU, con mascara de tigre, ya estaba listo para algo así. Cientos de líneas aparecieron en su piel, como si poseyera un Jūinjutsu de Orochimaru, su piel blanca casi no se veía, debajo de las líneas negras, su Chakra se elevó tanto, que era incluso visible, realizó sellos de manos, a gran velocidad— ¡Doton: Dochū Eigyo no Jutsu! (E. Tierra: Jutsu Ocultación Bajo Tierra) —todos los ninjas que estaban combatiendo, así como los civiles de los hogares cercanos, atravesaron el suelo, como si fuera agua, mientras que los clavos de arena caían sobre la tierra, sin herir a nadie, los Shinobis y aldeanos salieron de debajo de la tierra.
— ¡Suna no Jutsu: Kyodai Sunaryū! (Jutsu de Arena: Dragón de Arena Colosal) —Gaara dejó gran parte de su Chakra, en ese último ataque, empleando tanto su arena, como la arena del propio desierto, haciendo que la cabeza de un dragón se formara y devorara a ambos Akatsuki, o eso creyeron, pues una magnánima explosión ocurrió dentro del dragón, saliendo de allí Deidara sobre un ave, sin un brazo y con un ojo sangrante.
Los Shinobis de Sunagakure celebraron, su triunfo contra Akatsuki.