De camino al destino.
Itachi había entregado toda la información que pudo, al Hokage, el cual se vio agradecido, ahora existían menos enemigos, pero no por esto, menos peligrosos pues estos cuatro sujetos no parecían ser exactamente Nukennin de rango C, o algo similar. Parecía ser, que el líder de Akatsuki, el enmascarado, había tomado bajo su ala, a hombres y mujeres de élite.
―Adelante ―dijo el Hokage, cuando escuchó la puerta ser tocada, vio entrar a Karin, la cual le regaló una sonrisa ―Hola hija.
―Hola Otosan. Quería preguntarte, si de casualidad, has pedido a Naruto-Kun, ir a alguna misión o algo ―preguntó la joven.
―No cariño. ¿Aún no ha ido a casa?
―No. Y deberías saber, que eso no es muy normal en él, que digamos ―dijo Karin.
―Tranquila, cariño. Deberá de estar entrenando o algo así, ¿no lo crees posible? ―mencionó su padre, queriendo restarle importancia, la pelirroja asintió, agradeció por el tiempo dado y desapareció en un Shunshin.
En los bosques de Hi no Kuni, una chica de cabellos verdes, y ojos anaranjados, cayó al suelo, con su cuerpo rígido, debido a que fue atacada por la espalda.
Mientras tanto, en el reino de los dioses, Naruto se encontraba ante Baal.
―Yam, es el dios del caos y la tempestad, es mi hermano. ―Reveló Baal, dios de la lluvia, la tempestad. ―En un punto, en un intento por salvarnos a todos, Yam combatió por sí solo contra el rey de todos los espíritus malignos del aire: Hanbi, pero este resultó ser muy poderoso, así que Yam devoró a Hanbi, en lugar de solo sellarlo en el infierno. Esto lo corrompió totalmente, cambiando su forma física, a la de una serpiente, con alas y cabeza de cuervo, al cual sellamos entre todos los dioses, en una estatua de sí mismo.
―Ya veo, así que es a esto, a lo que combatiré, ¿eh? ―dijo Naruto.
―Así es ―dijo Baal ―Pero la cosa se pone peor, cuando logró crear un árbol demoniaco, con el sacrificio masivo de cientos de demonios, con un ritual oscuro, y luego controló a deidades negativas, especialmente: dioses del infierno y del reino de los muertos, creando un árbol que no era de madera, sino de sangre y almas cristalizadas, fue llamado Shinju. Este árbol, fue adorado por los hombres, los cuales estaban en medio de una guerra caótica, la cual solo podíamos calmar por momentos, cosa que lo empeoró todo, pues toda la sangre derramada, literalmente alimentó el poder negativo del árbol, y a los demonios. El árbol acabó tomando consciencia propia, cuando una mujer llamada Ōtsutsuki Kaguya, quien a futuro sería la madre del Rikudō Sen'nin, comió el fruto del árbol, siendo Kaguya, la primera mujer en obtener el Chakra, el árbol tomó consciencia propia e intentó recuperar el Chakra, formando a una criatura llamada Jūbi no Okami, la cual fue combatida por Rikudō y su hermano menor, Rikudō selló en su interior a la criatura, gracias a un sello creado por su hermano, y cuando él ya era muy anciano, liberó el Chakra, creando a los nueve Bijū's, usando el In'yōton y un Jutsu llamado Chibaku Tensei, selló el cuerpo del Jūbi en una "luna" más pequeña, que él mismo creó, haciendo que este falso cuerpo celeste, se introdujera en la real, pero al parecer, Kaguya fue consciente de todo lo que pasaba, de alguna forma ella creyó estar en control del Jūbi, pero era falso, y ella creó a Kuroi Zetsu, para que este recolectara el Chakra de los Bijūs y la liberara a futuro. ―El dios rio.
―Seguramente, esto de una luna artificial, no le hizo mucha gracia a Tsukuyomi, Selene y a los demás ―dijo el rubio sonriente.
―Exactamente ―dijo el dios ―Naruto. Detén a su sirviente: Uchiha Obito, deja que las aldeas se encarguen de los demás Akatsuki, ya has enfrentado a casi cuatro o cinco de ellos. Sin alguien que recolecte el Chakra, el Jūbi jamás será liberado y sin esos Chakras reunidos, Yam no podrá volver a caminar en la tierra, sin que una criatura compuesta por tanta maldad, como el Shinjū, es decir: el Jūbi, le libere de su prisión. Y no puede hacerlo, sin sus sirvientes humanos, los cuales están recolectando el Chakra. Han perdido a una de sus cartas más poderosas, y Konan ha desertado de Akatsuki, sin Pein especialmente... Yam y Obito, se verán obligados a ser más... aguerridos.