Capítulo V

1K 113 9
                                    

El profesor Remus fue a dormir, Harry supuso que Snape habría vuelto a la cama también ya que tenía entendido que esa noche le tocaría a Snape cuidar de Sirius, aunque ahora comprendía al profesor Remus pues eso sonaba preocupante. Aun si Sirius decía arrepentirse de las cosas que hizo en el pasado, solo se arrepiente de haber pasado el limite de lo sano (si existe algo sano en odiar a alguien y querer demostrárselo), pero no le agradaba Snape y no iba a esforzarse en ocultarlo, así que sin lugar a dudas iban a discutir si los dejaban solos en una misma sala. Todo estuvo tranquilo, la salud de Sirius pareció estable por un rato, pero más entrada la tarde cuando comenzaba a oscurecer un poco Harry notó que algo no estaba bien.

- ¿Pasa algo Sirius? No luces cómodo, estas sudando mucho. - dijo el chico preocupado, alternando la vista entre la puerta y Sirius, preguntándose si debería llamar a alguien o esperar un momento.

- No me siento bien, aunque no puedo describir del todo que es lo que siento. - respondió el mayor. Parecía ansioso, no dejaba de acomodarse en la cama una y otra vez como buscando una posición cómoda.

- ¿Quieres que llame al profesor Snape o a Remus? - pregunto Harry levantándose de la silla. - Si te sientes muy mal.

- No lo sé, no creo que sea algo muy serio y no es que me sienta realmente mal, más bien me siento como lleno de energía, tengo ganas de correr, muchas ganas de correr, no puedo quedarme tranquilo. - respondió este, cosa que no convenció al joven de lentes.

- Voy a llamar al profesor Snape, espera aquí Sirius. - dijo Harry dirigiéndose a la puerta, pero Sirius no le hizo caso. - ¡¿Qué estas haciendo, Sirius?!

- No te preocupes, solo voy a salir a caminar un momento, puede que solo sea el hecho de que he estado acostado mucho tiempo, voy a dar una vuelta. Si voy como perro nadie se fijara en mi, no te preocupes. - dijo este tomando su forma de animal y bajando las escaleras a gran velocidad mientras Harry lo perseguía.

- ¡Profesor Lupin! ¡Profesor Snape! ¡Ayuda! - Grito mientras perseguía a Sirius escaleras abajo casi a punto de caerse.

- ¡¿Qué pasa Harry?! - Grito Remus alterado saliendo de la habitación al mismo tiempo que Snape.

- ¡Sirius tiene algo, de repente a salido corriendo convertido en perro! - alcanzo a responder Harry.

- ¡¿Qué?! - Dijo Remus y miró a Snape.

- El efecto de la medicina a de estar pasando, eso le generó a Black una subida de adrenalina, así que puede que este eufórico. Pero esto es solo momentáneo, cuando pasé ese efecto seguramente va a colapsar en algún lado con fiebre de nuevo. - dijo Snape bajando las escaleras lo más rápido que pudo.

Remus los siguió escaleras abajo, Harry había salido de la casa detrás de Sirius, pero no tardó nada en regresar; estaba lloviendo a cantaros afuera, en su forma de perro Sirius era por mucho más rápido, nadie pensaría que estaba herido si lo viera correr en ese momento, pensar que había necesitado ayuda para ir de su cama al comedor, el punto era que Harry termino por perderle el rastro y regreso a la casa a buscar un paraguas antes de continuar la búsqueda.

- No se a donde fue, ¿qué es lo que tiene? - preguntó Harry al ver a Snape y Remus en la entrada.

- Lo mismo que le dije a Remus, es producto de que ya paso el efecto de lo que le dí cuando llegamos esta mañana, pero es temporal, no te preocupes Potter, estará bien. Solo hay que encontrarlo antes de que esa "energía" que tiene se le acabe, es seguro que después de eso no podrá moverse. - dijo Snape, abriendo la puerta - El lado bueno es que con semejante aguacero, el único perro que estaría corriendo por allí como desesperado sería él, así que debería ser sencillo encontrarlo. Remus, tu permanece aquí en caso de que regrese, Potter y yo iremos a buscarlo.

Noches en Grimmauld Place | Fanfic Snarry (SeverusxHarry)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora