Capítulo 1

36 5 3
                                    

Mi vida es tan monótona, siento que cada día se exactamente lo que pasará en cada segundo y momento.

Estaba acostada en mi cama mientras miraba el techo. Mi papá y yo escribimos nuestros nombres cuando estábamos pintando mi cuarto.

Lo extraño. Lo extraño mucho.

Al pensar en él mis ojos se vuelven llorosos y pequeños intentos de lágrimas intentaban brotar de ellos.

Tomé un pañuelo que estaba en mi mesita de noche me sequé las lágrimas.

No he superado su muerte y nunca lo haré, es algo con lo que debo vivir.

Miré el reloj, eran las 6:30 am,dentro de 30 minutos debía llegar a la escuela sino quería ganarme un regaño de la señora Camille.

Fui hacia el armario y busqué mi uniforme, me lo puse y bajé las escaleras para desayunar.

-Buenos días. -dije con una sonrisa de oreja a oreja mientras le daba un beso a mi mamá.

-¿Cómo has amanecido?-preguntó.

-Bien, ojalá  pudiera haberme quedado en la cama. -dije sonriendo y agarrando el café.

-Cariño, no sabes cuanto te entiendo.
-dijo mi madre mientras me daba una tostada con mermelada.

Mi mamá es del tipo de personas que aparenta todo lo contrario a lo que verdaderamente es.

Ella es risueña,entusiasta y cariñosa.Es como las princesas de los libros.

Y yo bueno tengo serias dudas sobre si ella me adoptó.

Prácticamente soy todo lo contrario a ella.

Pocas  cosas son las que tenemos en común, una de las más sobresalinetes es que ambas somos mujeres y las dos amamos leer, todo lo demás tanto fisico como moral lo heredé de mi papá. Además de leer mi mamá escribe y bueno, ella es una escritora famosa.

Tiene diez libros y una editorial. Nuestra situación económica es bastante buena y gozamos de muchos lujos.

Aunque si soy sincera debo decir que nunca me he leído uno de sus libros.

Ella prefiere escribir sobre cosas reales y yo prefiero leer temas que se asemejan a la fantasía.

La realidad ya es demasiado dura en la vida como para tener que leerla.¿Por qué no podemos imaginar que volamos, qué somos hechiceros, qué vivimos en Marte o qué somos vampiros?Que podemos tocar el sol o construir un cohete que nos lleve a Mercurio.

Me dirigí al garage para buscar al objeto que más amo en mi vida: mi moto.

Tomé la chaqueta y las llaves para ir hacia la cárcel, o sea la escuela.

Estaba a medio camino de la escuela, mientras observaba todo lo que  estaba en el camino.

¡Amo conducir!

Me relaja sentir el viento en mi rostro mientras detallo el paisaje y siento la adrenalina en mis venas. Siempre tomo el mismo camino para ir a la escuela podría conducir con los ojos cerrados y llegar a mi destino.

Miro hacia el lado y siento como otra moto se interpone en mi camino.

-Idiota. ¡Quítate! -grité mientras aumentaba la velocidad.

El imbécil estira la mano derecha y me saca el dedo corazón.

Estoy acostumbrada a lidiar con este tipo de situaciones,siendo la hija menor de mi mamá, no es sorprendente que mis otros dos hermanos me tengan como blanco para las burlas y bromas.

Nieve en el verano Donde viven las historias. Descúbrelo ahora