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Capítulo 78

Capítulo 78

Este es otro sueño.

pensó Sarubia, sintiendo las frías gotas de lluvia en sus mejillas. Lo que vi frente a mí fue un bosque oscuro. Y la lluvia caía tan fuerte que podía sentir el frío en mis huesos.

Podía sentir el barro en mis zapatos.

"......Ayuda por favor......."

Vi un pequeño acantilado empinado frente a mí. Podía escuchar la voz de un niño delgado, pero extrañamente, no podía ver al niño.

Y había un hombre agazapado al final del acantilado.

"¡Tú eres el único que necesita desaparecer!"

Escuché la voz de un hombre. Su voz con los dientes apretados resonó en el oído de Sarubia. tan vívidamente como puedes escuchar justo al lado.

"...Por favor... ¡Tío!"

Escuché el llanto ferviente del niño. No podía decir cuál era la situación porque solo vi la espalda del hombre. Sin embargo, el corazón de Sarubia comenzó a latir extrañamente cada vez más rápido.

"¿Tío? ¡Dile que no me haga reír!" ¿Quién es tu tío? ¡Mi hermano puede ser más feliz sin ti! ¡Maldita familia Royce!"

La familia Royce....'

Golpe, golpe, golpe, golpe, golpe, golpe, golpe, golpe. Como, como, está a punto de explotar.

Sarubia se acercó lentamente al hombre un paso a la vez. Los brazos del hombre estaban estirados fuera del acantilado.

"... No por favor......."

"Sí, es mejor morir así. No debería haberle pedido al artista que me viera de nuevo. Eso lo mataré eventualmente".

Tengo piel de gallina por todo mi cuerpo. Los ojos de Sarubia se agrandaron.

"Adiós."

"¡Ay dios mío!"

El grito del niño. Un sonido agudo que pareció desgarrar sus tímpanos resonó.

"¡De ninguna manera!"

gritó Sarubia, extendiendo su mano. En ese momento, cayó un relámpago. Entonces, el hombre agachado se levantó lentamente.

"Si te fuiste."

El hombre murmuró suavemente. El hombre, que giró lentamente la cabeza, hizo contacto visual con Sarubia.

Ay dios mío..'

Fortón. Él era Fortón.

El cuerpo de Sarubia comenzó a temblar como un carcaj.

"¡Poten!"

Le grité con una voz llena de ira.

Y, en un momento.

Su frente estaba ennegrecida.

* * *

"¡Argh!"

Sarubia abrió los ojos gritando de dolor.

"¡Sarubia!"

Sentado junto a ella leyendo un libro, Rutan lo recogió y se acercó a ella. Sarubia escuchó su voz sorprendida.

"¡Oh mi!"

Levantó una mano y agarró el corazón. una mano temblorosa y pupilas dilatadas. Ante su apariencia, que parecía asustada, Rutan la agarró por el hombro y gritó.

"¿Estás bien?"

"......Vamos......."

Sarubia agarró ligeramente el cuello de Rutan cuando estaba a punto de levantarse de su asiento. Abrió la boca con una leve sonrisa en el rostro lleno de sudor frío.