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A MinHo le dieron el alta poco después; Sus brazos estaban en la condición adecuada para que sean cuidados a mano con una crema y evitando sostener cosas pesadas o hacer movimientos bruscos. Ambas sesiones con el psicólogo serían dos veces por semana en el mismo horario, tanto para los adultos como para los niños.

Los novios se mantuvieron igual de unidos como siempre, aunque MinHo haya intentado dejar el mundo físico por segunda vez, él no lo culpaba. Ese acto no quedó exento del señor Kwon; Por más vergonzoso y terrible que haya sido, Lee admitió sus acciones e iniciaron un tratamiento más serio que viajaba hasta lo más profundo de su mente.

Los niños, oh por dios, Nayeon no podía estár más contenta de trabajar con ellos; Eran tan buenos, educados, graciosos y un millón de adjetivos más que se volvían innombrables. Obviamente que ellos avanzaron también con el tratamiento, cada vez que ella llegaba a casa, la recibían con galletas y juguito listos para ver Cocomong y hablar una horita completa. Entre esas charlas, los niños lograron el primer objetivo que era que puedan ir al baño solitos sin sentir miedo o repulsión a ese cuarto. Ahora los dos mayores -jeongIn obviamente todavía no- caminaban tranquilitos hasta esa habitación sin necesitar a sus papis. Todos los adultos estaban felices y orgullosos.

Ahora, el siguiente paso con la familia sería; Seguir ayudando a MinHo e intentar que los niños olviden el accidente. Y parecía ir de maravilla.
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En aquél comienzo de semana, los infantes volverían a la escuela; Gracias a su papi extranjero, estuvieron muy bien al día con las tareas, inclusive sus compañeritos los extrañaron, ¡faltaron mucho tiempo!

Allí en casa, era Channie el que los vestía pues MinHo se encontraba haciendo un poco de trabajo tranquilo; A diferencia de los niños, él se había tomado vacaciones pagadas que terminaban ese mismo día, pero se mantendría en licencia pues no podía encontrarse bajo situaciones de estrés por ese tiempo.

— ¡Me siento nervioso, papi!— Dijo JiSunghie dando algunos saltitos esperando a que le pongan su camisetita

— Lo sé, bebé, tus hermanos también, pero no se preocupen, nada ha cambiado— Les sonrió— Cuando los vaya a buscar, quiero escuchar todo lo que hicieron, a papá también le gustará oír—

Unos momentitos después, ya estaban todos listos. Los tres pequeños fueron a la habitación del castaño para despedirse.

— Aigoo~, ¿ya se van? ¡Mis niños ya son todos unos adultos!— Los abrazó

— Nos vemos después, papi, luego te contaremos todo lo que hicimos— Sonrió Bin

— Eso espero, portense bien y estudien mucho— Besó sus cabecitas dejandolos ir

— Ya vuelvo, cielo— Su novio lo saludó de la misma forma yendose con esos niños

El viaje fue muy lindo y ruidoso; Los tres estaban muy nerviosos y emocionados por volver al kinder, ¡lo extrañaban mucho!

— ¡Ya quiero ver a HyunJinnie y a YeonJunnie!—

— ¿A HyunJinnie, hyung~?, ¡él siempre me pelea!— Su hermanastro se sintió traicionado

— Pero él es mi amigo, Sunggie. Además, hyung siempre te protegerá, ¡voy a regañar a Jinnie si te pelea!— Sacó pecho mostrandose valiente

— Cuídense entre ustedes, amores, no dejen que otros los molesten— Dijo Chan mirándolos desde el espejo

Pronto, llegaron al destino. A los niños les súper brillaron los ojitos al ver a todos los niños y sus compañeros, ¡Cuanta gente!

— Chiquis, escuchenme un segundo antes de bajar— Llamó Chris— Este tiempo fue muy duro para nosotros, así que si alguien les preguntan por qué han estado faltando, díganles que es por razones personales, ¿sí?— Ellos asintieron— Muy bien, eso son mis niños. Vamos, que los acompaño a la puerta— Se desprendió el cinturón tomando a los infantes y dirigiéndose dentro del establecimiento

☕︎𝑺𝒊𝒏𝒈𝒍𝒆 𝑫𝒂𝒅 | 𝗠𝗶𝗻𝗖𝗵𝗮𝗻 [✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora