Minho no soporta el olor a durazno.
Jisung huele a durazno.
➳ Créditos a la autora @anya_pink_ •
➳ Jisung: Alfa•
➳ Minho : Omega•
➳ Inicio: 18/03/2023•
➳ Final : 02/05/2023•
➳ ADAPTACIÓN•
Minho se alejó lentamente del alfa, manteniendo una sonrisa pequeña mientras esperaba la reacción de su novio. Jisung por su parte, continuaba impactado ante las palabras que había susurrado el omega, sintió sus orejas calentarse y tosió cuando se atoró su saliva del asombro.
— ¿Es enserio? —preguntó el alfa mirándolo a los ojos en medio de la oscuridad del cine.
Minho asintió con cautela.
— Si, después de todas las sesiones que tuve con los doctores, ya puedo soportar el olor a durazno.
Jisung sonrió en grande.
— ¡Eso es genial, Minho!
El alfa lo abrazó, metiendo su nariz en el cuello del omega pelinaranja, quien asintió entre medio de risas por las cosquillas que le provocaba Jisung.
— Perdóname —susurró Minho.
Jisung se alejó lentamente para mirarlo con confusión.
— ¿Por qué te disculpas?
— Por hacer que utilizaras el neutralizador, por hacerte sentir mal y por haber sido descortés contigo la primera vez que nos conocimos.
El alfa sonrió, acariciando con ternura la mejilla de su omega.
— No tienes que disculparte, no era tu culpa no poder tolerar el olor a duraznos.
— Aun así...
— Minho —Jisung tomó entre sus manos la cara del mencionado, provocando que los labios de este se abultaran—, esperaría toda mi vida sin ningún problema hasta que estuvieras bien, hasta que te sintieras cómodo conmigo.
Los ojos de Minho se llenaron de lágrimas al escuchar las palabras del alfa, se preguntaba cómo es que podía existir un hombre así de tierno y amoroso, sintiendo cómo su lobo corría alrededor mientras su colita se menaba de un lado a otro al sentirse tan amados.
— Gracias —Minho lo abrazó fuertemente—. Te amo.
El alfa sonrió pegándolo más hacia sí mismo.
— También te amo.
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Jisung esperaba fuera del salón de Minho en el último edificio de la universidad, con un gran ramo de velos de novia entre sus manos y suspirando constantemente mirando su reloj, esperando que dieran las 2 de la tarde, la hora en la que las clases de Minho terminaban. Se escuchó la voz del profesor despedirse de los alumnos, poco después, el alfa vio la puerta abrirse e instintivamente buscó con la mirada aquella cabellera de color naranja que lo traía en las nubes todo el tiempo.
