gordito › jikook.

Epílogo

«El amor te durará tanto como lo cuides y lo cuidarás tanto como lo quieras»

10 años después

JungKook sintió movimiento en el lugar en el que descansaba pero aún así no abrió sus ojos, sintió su cabello ser tocado y fue ahí donde despertó por completo.

Despertar entre los brazos del hombre que ama y que ahora es su esposo es uno de los grandes placeres que la vida le da a JungKook.

JiMin ya estaba despierto y le acariciaba el cabello. El menor acomodo su cabeza en el pecho de JiMin perezosamente aún con sueño y algo de cansancio.

─ Buenos días, cariño─. JiMin sonrió dándole otro beso en su cabeza mientras sobaba suavemente su hombro desnudo.

─Buenos días, mi rey─. JungKook habló levantando un poco su cabeza para dar un beso rápido a su esposo para luego volver a buscar un buen lugar en el pecho de éste para seguir durmiendo.

─¿Nos levantamos ya, bebé ?─. Era domingo, ninguno de los dos trabajaría, pero si era agradable hacer algunas actividades juntos.

─Estoy cansado, JiMinnie─. Claro que estaba cansado.

─¿Por qué cansado?

─ Amor ...─. JungKook se puso sobre JiMin completamente, se acercó a su oído para susurrarle con voz ronca─ Hicimos cositas anoche, churri. Cositas deliciosas─. El pelirrojo mordió levemente la oreja de su pareja─. ¿Lo recuerdas, JiMin-ssi? ─. Dijo ahora cambiando su voz a una tierna. Era tan desconcertante la dualidad de JungKook.

El menor miró el rostro de JiMin y estaba colorado, el mayor aún se sonrojaba por casi todo en cuanto a JungKook.

─Pollito...─. JungKook sonrió con malicia ambos seguían desnudos y el menor había sintiendo algo más duro que la vida contra su pierna─. Tienes problemitas con Mini JiMin─. "Mini JiMin" era el nombre asignado por JungKook al atributo de su esposo─. ¿Lo resolvemos? Quiero, quiero.

─¡No! Estás cansado, amor─. JiMin se puso tímido, a pesar de el tiempo que llevaban juntos, que ya conocían cada rincón de cuerpo el uno del otro aún había timidez como cuando eran novios y su relación se mantenía con el mismo cariño de años, el mismo o incluso más amor y algo muy importante en una relación, respeto.

─No estoy muy cansado, JiMinnie, ¿sí?─. Había hecho caritas tiernas y berrinche como niño, mientras sus manos se aventuraban por el cuerpo de JiMin bajo las sábanas.

─ Park JungKook─. Advirtió el rubio.

─ Park JiMinnie─. Dijo antes de ser besado por su esposo, JungKook sonrió al haber logrado su objetivo, convencer a su gordito bello que estaba en buen estado para una práctica de "ejercicio mañanero"

Terminaron haciendo el amor.

JungKook amaba la forma en la que JiMin se entregaba, el mayor le hacía el amor con paciencia, ternura y suavidad. Siempre se sentía como si fuese la primera vez, en cuanto a sentimientos y sensaciones porque en la práctica la primera vez de la pareja fue un perfecto y lindo desastre la falta de experiencia de JiMin y los nervios de JungKook contribuyeron a ese "desastre" sin embargo ambos lo recordaban con una sonrisa en el rostro al ser tan especial.

Ambos chicos se sentían cómodos estando juntos, se ayudaron mutuamente a cargar sus miedos e inseguridades.

Ponían empeño en su relación con el paso de los años y si, habían discusiones tontas, celos y problemas pero ambos encontraban la manera de solucionarlo más nunca pasaba un solo pensamiento de dejarse porque el amor que se tienen es más fuerte que cualquier problema o crítica, siempre lo fue y sería por muchos años más, porque en los planes de la pareja estaba envejecer juntos e incluso ser sepultados en la misma tumba.