Olivia se encuentra rota, siente un gran vacío desde que terminó su compromiso con su amor de universidad, así que se muda de ciudad buscando un nuevo comienzo. Christian es un abogado, de los mejores que ha tenido su compañía y además, papá solter...
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Capítulo 5
« Entre regalos sorpresa y helados.»
— Así que, ¿el hermano de tu jefe? eh— podía sentir la sonrisa de mi madre atreves del teléfono. Después de haberle dicho que mi compromiso con Nick termino, se puso tan feliz como niña en mañana de navidad, ella siempre decía que desde el minuto uno de conocerlo no le daba buena espina, y yo como buena hija que soy (si claaaaaro) ignore cada advertencia que pudo darme.
Deje el bolso junto al suéter que ya hacía en la cama acostándome de manera vertical al colchón, dejando mi cabeza colgar de un lado de la cama. Ayer luego de haber llegado de la feria, acompañe a Grace a su habitación arropándola e intentar que durmiera cantándole una canción que obviamente destruí, salí de su habitación topándome de frente con Morgan regalándome una de sus tantas sonrisas de comercial y caminó a su habitación.
Hoy Christian había dicho que tendría el día libre ya que Morgan había decidido llevar a Grace al cine y tener una tarde solo ellos dos, así que me dedique a buscar (entre lo poco que tenía) lo que vestiría para mi cena con el hermano de mi jefe. Y como toda una adolescente emocionada por su primer cita tenía que compartir mi emoción con alguien, llame a mi número personal de emergencia; Mi madre.
— Solamente iremos a cenar, no es gran cosa — murmure cerrando los ojos.
No quería hacer algo importante de esto, porque no era nada más que cenar con un tipo lindo que acababa de conocer gracias a que cuido de su sobrina. O sí.
— Y si no es tan importante, ¿Por qué llamaste diciendo que tenías algo que decirme? — porque no tenía amigas con las cuales hablar desde que se enteraron que mi ex prometido me dejo por una linda bailarina en las vegas, no le diría eso a mi madre.
— ¿Qué no puedo simplemente hablar contigo porque te extraño?
— No.
Bufe levantándome de la cama al escuchar toques en la puerta. Camine descalza tomando el pomo de la puerta con mi mano izquierda mientras sostenía el teléfono con la derecha. Creí que sería Grace para pedirme que le contara de nuevo la historia de Ant-man o la de Rapuncel, pero no, era Christian que se encontrada de pie al otro lado del pasillo, sus manos estaban ocupadas, con una bolsa color blanca de alguna tienda departamental y en la otra un ¿tulipán? color rosa.
Estiro la bolsa y el tulipán en mi dirección haciendo referencia a que tomara ambas cosas. Podía escuchar la voz de mi madre a lo lejos, me di cuenta que aun hablaba con ella por teléfono pero no ponía atención a lo que me decía ya que seguía viendo con cara de tonta el tulipán.
— Te hablo después, te amo — corte sin esperar respuesta, guarde el móvil en el bolsillo detrás de mis jeans tratando de no tirarlo a causa de mis manos temblando (contrólate Olivia, es solo tu jefe).